«Con profundo dolor, debemos comunicar que a la una de la madrugada de hoy, 6 de marzo de 2005, pocas horas después de entrar en estado de coma, ha fallecido nuestra muy querida compañera Gladys Marín Millie, presidenta de nuestro partido». Así, el secretario del PC, Guillermo Tellier, anunció a Chile y al mundo la […]
«Con profundo dolor, debemos comunicar que a la una de la madrugada de hoy, 6 de marzo de 2005, pocas horas después de entrar en estado de coma, ha fallecido nuestra muy querida compañera Gladys Marín Millie, presidenta de nuestro partido». Así, el secretario del PC, Guillermo Tellier, anunció a Chile y al mundo la partida de la más emblemática figura comunista criolla, Gladys Marín.
Tras un año y medio de su lucha contra el cáncer, que la obligó a viajar por un largo período a Cuba, la madrugada del domingo la líder comunista entró en un coma profundo del cual ya no despertó.
Luego de su deceso, los restos de Marín fueron trasladados desde su casa en La Florida, hasta el ex Congreso Nacional, donde está siendo velada y mañana martes su cuerpo será cremado. Hasta el recinto ubicado en el centro de Santiago desfilaron miles de personas para darle el último adiós.
Entre la masiva concurrencia, llegaron personalidades de la esfera política y social, lista que encabezó el Presidente de República, Ricardo Lagos, quien junto a su esposa Luisa Durán permaneció cerca de cinco minutos en la guardia de honor. Incluso, se dio el tiempo para entonar la Internacional Socialista. Entre las visitas se sumaron las candidatas oficialistas, Michelle Bachelet y Soledad Alvear (ver recuadro) y se espera la visita de delegaciones de Cuba, Colombia y Venezuela.
Gladys Marín se encontraba en Chile desde diciembre de 2004, fecha en la que retornó de Cuba para pasar las fiestas junto a sus familiares. Fue durante los meses de verano que su salud empeoró hasta afectar su capacidad motriz y de lenguaje.
Según Nancy Marín, hermana de Gladys, la dirigenta «murió muy tranquila y nunca sufrió», pues «venía ya presentando un cuadro, horas antes del deceso, que se veía que no se iba a revertir». Agregó que su familia se ha sentido muy acompañada gracias a las demostraciones de afecto que han inundado el ex Congreso. «La gente la quiere, la aprecia por los valores que ella tiene y por la lucha que dio en toda su trayectoria», destacó.
Por su parte, el gobierno sintió también la pérdida de Gladys Marín, por lo que -de acuerdo al ministro del Interior, José Miguel Insulza- a partir de hoy se decretaron 48 horas de duelo oficial.
Insulza también recordó la extensa amistad que mantuvo con Marín, a pesar de algunas discusiones. «Aunque nos dijimos cosas por la prensa, nunca dejamos de ser amigos», aclaró.
En tanto, el vocero de La Moneda, Francisco Vidal, ofreció las condolencias a los familiares de la ex parlamentaria. «El Gobierno de Chile se hace parte del sentimiento de respeto y dolor que hoy tienen miles de chilenos», señaló.
A su turno, el canciller Ignacio Walker manifestó su entera disposición para recibir a las visitas extranjeras que deseen despedirse de Gladys pues, según afirmó, «ella obviamente va mucho más allá de nuestras fronteras».
Por su parte, Guillermo Tellier ofreció un emotivo discurso para despedir a la ex dirigenta comunista. «Al anunciar el doloroso desenlace de la enfermedad que aquejó a nuestra inolvidable compañera, tenemos la certeza de que su figura ya no pertenece sólo a quienes militamos en las filas de su partido. Con Gladys, mil veces venceremos».
Políticos de todas las tendencias valoraron su trayectoria
LA PRECANDIDATA PRESIDENCIAL DEL PS-PPD, MICHELLE BACHELET, dijo que la muerte de Gladys Marín «entristece a todos los chilenos» y destacó que «toda su vida fue una mujer valiente, consecuente, siempre estuvo detrás de sus ideas con mucha fuerza» y agregó que «existan este tipo de personas, este tipo de mujeres en nuestro país, es algo que nos llena de orgullo».
Emocionada, la ex ministra de Defensa afirmo que «su partida nos entristece, pero también nos compromete a continuar en la misma senda, a trabajar por nuestro país, por todos los chilenos,
especialmente por los más necesitados, a los que Gladys le dedicó toda su vida».
LA CANDIDATA DC, SOLEDAD ALVEAR, expresó su pesar destacando que «falleció una mujer que siempre fue consecuente con todo lo que hizo y creyó, y eso es lo importante en la vida».
Alvear recordó que le tocó compartir con la desaparecida líder del PC muchas jornadas contra el régimen militar. «El país la recuerda como una mujer íntegra y por esto es importante vivir como se cree y luchar por lo que se quiere», dijo Alvear. Además, añadió que sus funerales, previstos para el día internacional de la mujer dan a esta fecha un gran simbolismo. «Tengo una gran pena, porque se fue una mujer que siempre peleó por lo que ella creía», concluyó la abanderada DC quien también se hizo presente en el ex Congreso Nacional.
EL EX PRESIDENTE DE RN, SEBASTIÁN PIÑERA, sostuvo que la muerte de Gladys Marín es una gran pérdida para el país, resaltando que «con ella se pierde algo importante de la política chilena, porque siempre luchó por causas grandes, la libertad, la democracia y la justicia». El ex parlamentario, subrayó que «fue una mujer que luchó con coraje y siempre fue consecuente con sus ideales. Agregó que nunca vio a Marín luchando por cosas pequeñas; «siempre por cosas grandes y siempre fue decente, a veces con mucha fuerza, pero con nobleza, eso es lo que le hace falta a la política chilena». Hasta el ex Congreso también concurrió la diputada Lily Pérez y el secretario general de RN, Cristián Monckeberg.
A PESAR DE ESTAR EN EL POLO OPUESTO, representantes del gremialismo no quisieron estar ausentes en la despedida de la dirigenta comunista.
El presidente del Senado, Hernán Larraín, quien debió soportar pifias en su contra, manifestó que la partida de Gladys Marín «es una perdida muy significativa porque creo que todos valoramos la forma como ella se entregó por su causa, con mucha fuerza, con mucha dedicación, inclaudicable en sus principios». El senador de la UDI por la circunscripción sur de la Séptima Región, reconoció que es posible «jugarse la vida por una causa como lo hizo ella, yo creo que eso le hizo despertar mucho respeto mucha admiración incluso para sus más distantes adversarios».