Apoyando las demandas de universitarios y secundarios, numerosas personas salieron a las calles para revivir una protesta clásica de la década de los ’80. La presidenta de la Fech, Camila Vallejo, celebró la convocatoria en Twitter destacando que «todo el país» repudió «la represión» contra las marchas del jueves. La protesta fue uno de los […]
Apoyando las demandas de universitarios y secundarios, numerosas personas salieron a las calles para revivir una protesta clásica de la década de los ’80. La presidenta de la Fech, Camila Vallejo, celebró la convocatoria en Twitter destacando que «todo el país» repudió «la represión» contra las marchas del jueves. La protesta fue uno de los temas más comentados a nivel global en la red.
Santiago revivió la noche de este jueves los cacerolazos, que entre habituales cortes de luz dieron forma a una imagen clásica del descontento ciudadano contra la dictadura de Augusto Pinochet durante la década de los ’80.
Según los dirigentes estudiantiles se trató de una protesta «contra la represión». Esto porque ante la negativa del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, a autorizar marchas en la Alameda, amparándose en las disposiciones del Decreto Supremo N°1086 de septiembre de 1983, Carabineros contó con un amplio contingente y recursos para evitar que universitarios y secundarios se acercaran siquiera a Plaza Italia.
Estudiantes trataron de marchar en la mañana y al finalizar la tarde pero Fuerzas Especiales actuó para que «la ciudad de Santiago pudiera funcionar normalmente», según justificó el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla. La autoridad reportó al menos 527 detenidos en todo el país.
Cacerolazos
La ciudadanía reaccionó ante este escenario y apoyando a los estudiantes salieron a las calles en distintos puntos de la capital para hacer sonar cacerolas desde antes de las 21:00 horas. La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech), Camila Vallejo, celebró la convocatoria en Twitter destacando que «todo el país» repudió «la represión de la cual hoy hemos sido objeto». La protesta, que se replicó en varias ciudades del país, fue uno de los temas más comentados a nivel global en la red.
Ese respaldo social a las demandas de la Confech y los escolares se vio reflejado en la última encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) que correspondiente al mes de julio y dada a conocer el jueves último y que arrojó un rechazo de 80% al lucro en colegios y universidades, en línea con una de las principales consignas del movimiento.
Por otro lado, la encuesta conocida al mediodía situó al Presidente Sebastián Piñera como el mandatario peor evaluado en la historia del estudio, con una aprobación de 26% a su labor y una desaprobación de 53%.
Todo esto se dio en vísperas de la respuesta que estudiantes y profesores se comprometieron a entregar al ministro Felipe Bulnes, que con su documento «Políticas y propuestas de acción para el desarrollo de la educación chilena» esperaba alcanzar algún tipo de acuerdo para terminar con las manifestaciones que se arrastran desde fines de mayo y que a la luz de las declaraciones de los líderes del movimiento deberían continuar.