Pese a la flotilla de helicóptero Apaches artillados para su protección durante el tiempo que permanecerá en Chile, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, ya fue notificada por organizaciones políticas y sociales de que su presencia no es grata para los chilenos. En una carta entrega en la víspera al presidente saliente Ricardo Lagos, […]
Pese a la flotilla de helicóptero Apaches artillados para su protección durante el tiempo que permanecerá en Chile, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, ya fue notificada por organizaciones políticas y sociales de que su presencia no es grata para los chilenos.
En una carta entrega en la víspera al presidente saliente Ricardo Lagos, el Partido Comunista (PC) de Chile, manifestó su rechazo y desacuerdo por la presencia en las tierras de Neruda de la jefa de la diplomacia estadounidense.
Rice llegará esta noche a Santiago y participará el sábado en los actos de toma de posesión de la presidenta electa, Michelle Bachelet.
Su comitiva de seguridad supera los 300 efectivos, que estarán alojados en el capitalino hotel Hayatt.
Los agentes estadounidenses se sumarán a los más de tres mil 200 policías que comenzaron ayer las tareas de protección de los 32 jefes de estado y las delegaciones de casi un centenar de países que asistirán al cambio de mando presidencial.
El miembro de la comisión política del PC Juan Andrés Lagos, señaló a Crónica Digital, que Rice no es grata en Chile porque la tradición «diplomática de nuestra nación siempre ha rechazado en forma sostenida el terrorismo y la intervención de potencias extranjeras, en los asuntos internos de naciones y pueblos. Un ejemplo de ello es la presencia de cientos de agentes secretos y miembros de CIA En estos días».
Por su parte, el Secretario General de las Juventudes Comunistas (JJ.CC) Sergio Sepúlveda, sostuvo que el derecho internacional y los pactos suscritos por Chile, la presencia de Rice, «lesiona y hiere la dignidad nacional».
Quema de bandera norteamericana
Por mientras que los altos dirigentes comunistas entregaban una carta en la sede gobierno al mandatario chileno, un grupo de jóvenes pertenecientes a las JJ.CC procedieron a quemar una bandera de la principal potencia mundial, frente a La Moneda, situación que no llegó a mayores, pero el ambiente fue distinto, cuando Lagos y Sepulveda procedían a leer una declaración pública a la prensa nacional y extranjera, la policía militarizada de Carabineros no les permitió por varios minutos leer la misiva.
Tras el forcejeo entre los militantes de izquierda y la policía uniformada, los líderes comunistas señalaron que «Rice encabeza los esfuerzos del gobierno Norteamérica y no del pueblo de los Estados Unidos, que busca destruir, con métodos violentos y terroristas, las experiencias emancipadoras de Cuba y Venezuela».
Lagos, por último advirtió que la Casa Blanca amenaza los procesos de independencia nacional que se desarrollan de Argentina, Brasil, Bolivia, Uruguay, Ecuador o Colombia.
Organizaciones sociales se suman a protestas contra Rice
El Secretario General de la Confederación de la Construcción Sergio Villegas, se sumó también a las protestas contra la presencia en Chile de Rice:»No pude ser que nuestras autoridades policiales y de gobierno permitan al Servicio Secreto estadounidense ingresar al país medio centenar de armas cortas para la protección de Rice», sostuvo el dirigente obrero.
«Eso lesiona nuestra soberanía. Son nuestras policías y organismos de seguridad los que tienen que velar por las autoridades y gobernantes que visitan nuestro país y no personal extranjero», explicó Villegas a Crónica Digital.
El líder sindical indicó que la presencia en Chile de la diplomática estadounidense, «con sus helicópteros artillados, demuestra que ellos (los gobernantes de Estados Unidos) no están tranquilos en ninguna parte. A diferencia de otros presidentes que son respaldados por los pueblos del mundo como Fidel Castro, Hugo Chávez, Evo Morales entre otros».
Solidaridad con Cuba rechaza presencia de Rice
El Comando Amplio de Solidaridad y la Coordinadora de Solidaridad con Cuba, dijeron hoy que Rice «viene en representación de un gobierno a cuyo prestigio no le caben más manchas de lo sucio que está, después de sus aventuras guerreras, de las torturas en los campos de concentración de Iraq y Afganistán, de su respaldo a cuanta dictadura haya existido en América Latina».
El coordinador de Comando Amplio de Solidaridad con Cuba, Juan Cuevas apuntó que «pocas veces gobierno alguno había actuado con soberbia tan insolente como la actual administración norteamericana, que no ha tenido escrúpulos de mentir para justificar sus agresiones expansionistas en busca de petróleo».
En tanto, el presidente de la Coordinadora de Solidaridad con la mayor de las Antillas, Carlos Lagos, recordó que hoy se encuentran presos cinco jóvenes cubanos en Estados Unidos, ellos han sido acusados injustamente de espionaje, a pesar de haberse manifestado en contra el Comité de Detenciones Arbitrarias de la ONU, Amnistía Internacional, varios parlamentos del mundo, y los propios tribunales norteamericanos, que declararon irregular el juicio en el cual se les condenó, pero el gobierno de George W. Busch los mantiene presos y protege a los terroristas como Posada Carriles, asesino de cientos de cubanos y cómplice del atentado que le costó la vida al ex canciller del gobierno del presidente Salvador Allende, Orlando Letelier».
Cuevas, acusó a la Casa Blanca de mantener a cientos de personas detenidas en Guantánamo «en un virtual estado de secuestro, al margen de toda legalidad. En días recientes un tribunal norteamericano dictaminó que los nombres de los presos debía ser publicados, pero ya el Pentágono anunció que acatará parcialmente este decisión. Año tras año la Asamblea General de la ONU condena el bloqueo contra Cuba prácticamente por unanimidad, salvo algunas pequeñas colonias de EEUU. Todo esto evidencia el menosprecio de EEUU por la comunidad internacional, la opinión pública y las Convenciones vigentes».
Por último los dirigente solidarios, sostuvieron que «Rice llega a Chile con la arrogancia de un procónsul romano, y su presencia constituye una afrenta para nuestro país, y en general para cualquier país del mundo civilizado».