Moira Millán es una de las dirigentes indígenas más activas del movimiento que defiende el territorio y la cultura del pueblo mapuche, situado entre los actuales estados de Chile y Argentina. Hace una gira por Europa durante los meses de abril y mayo. Ha visitado diferentes organizaciones y asociaciones políticas por explicar la lucha de […]
Moira Millán es una de las dirigentes indígenas más activas del movimiento que defiende el territorio y la cultura del pueblo mapuche, situado entre los actuales estados de Chile y Argentina. Hace una gira por Europa durante los meses de abril y mayo. Ha visitado diferentes organizaciones y asociaciones políticas por explicar la lucha de su pueblo y fortalecer la solidaridad. Endavant (OSAN) la invitó en su estancia breve en Barcelona el mas de abril, y L’ACCENT aprovechó para entrevistarla.
Todavía hoy en día el pueblo mapuche es un grande desconocido por los catalanes, nos gustaría que nos explicaras quién sois y cómo vivís.
Los mapuches somos una nación originaria, un pueblo ancestral. ‘Mapuche’ significa ‘gente de la tierra’, toda nuestra cultura la construimos a partir del territorio que habitamos. Actualmente este territorio está usurpado por los estados chileno y argentino. El territorio mapuche llega hasta el río Bio Bio por la vertiente de Chile y se extiende por el sur de la provincia de Córdoba, Santa Fe y Río Negro del lado de Argentina. Este extenso territorio se denominaba Walli Mapu, significa, en lengua mapuche, ‘hasta dónde llega nuestra mirada’.
Pero actualmente el asentamiento mapuche ha sido modificado empujándonos hacia al sur. Actualmente encontramos comunidades a la provincia Chugut y Santa Cruz y limitan al norte con la provincia de Buenos Aires. Hoy, los mapuches luchan por poder vivir de acuerdo a nuestra manera de ver el mundo, cosa que hoy no podemos hacer puesto que somos un pueblo invadido territorialmente y sometido culturalmente.
¿Cómo tomáis conciencia de este sometimiento?
El pueblo mapuche nunca ha dejado de luchar y resistir y a pesar de perder la guerra nunca ha sido un pueblo vencido. En las últimas décadas tras el año 1992 estamos viviendo un desvelo en todo el territorio de la población mapuche que vive en las ciudades que empieza a tomar conciencia y a transitar por el camino de la autoafirmación.
Si sois un pueblo originario tendréis formas de organización propias. ¿Cómo os comunicáis con el resto de los pueblos del mundo?
El pueblo mapuche tiene formas propias de organización política y social donde las mujeres tienen un papel destacado. Por ejemplo tenemos el lonko que es la máxima autoridad política de una comunidad y puede adoptar diferentes roles. El lonko no llega a serlo porqué haya ido a la universidad o porqué sea escogido democráticamente. Nosotros entendemos que el lonko, nace por serlo. Responde a la esencia de la persona que hace esta función porqué es la que hace mejor, la que más ha desarrollado durante la vida.
Las machi son las autoridades espirituales y medicinales, werken son comunicadoras, son personas que transportan el mensaje de nuestro pueblo. A parte de la organización social de las comunidades existen varias funciones o roles que responden al ngen de cada individuo. El ngen es la esencia, el espíritu que determina la naturaleza de cada persona. Las comunidades se coordinan entre ellas por hacer frente a problemas comunes.
¿Cuáles son estos problemas comunes contra los cuales estáis luchando actualmente?
La comunidad mapuche se enfrenta a la lucha por la recuperación de su territorio y por preservar la vida vegetal, animal y humana. El territorio mapuche está afectado por la invasión de las transnacionales extractivas, contaminantes y destructivas como las industrias mineras, petroleras y de construcción de presas por generar energía, presas que si se hacen inundaran gran parte de nuestro territorio.
Nos enfrentamos haciendo manifestaciones, recuperaciones de tierras y ocupación de terreno. En Argentina existe una gran solidaridad con el pueblo mapuche y nos coordinamos con organizaciones y movimientos sociales argentinos, con Chile tenemos más problemas por coordinarnos y el espaldarazo social es más escaso.
Y concretamente a tu comunidad, ¿qué luchas lleváis a cabo?
Mi comunidad lucha actualmente contra la construcción de seis presas que quieren construir en la cuenca del río Carrenleufu territorio mapuche usurpado actualmente por Argentina. Son 11.000 hectáreas de masa boscosa, de bosques nativos que quedarían bajo el agua, y afectan a familias mapuche y campesinas.
Este megaproyecto responde a un plan energético que compromete la vida de ríos del lado argentino y chileno impulsado por las transnacionales españolas Endesa y Santander.
¿Cómo caracterizarías la lucha del pueblo mapuche?
En el pueblo mapuche hay un movimiento que existen varias posiciones en busca de la liberación de nuestro pueblo. Des de asimilacionistas a reformistas, pasando por autonomistas o separatistas y también una cuarta posición que quiere introducir a la mesa de negociación política de todos los sectores de discusión del mundo una forma diferente de pensarnos como sociedad. Nosotros basamos esta forma distinta de relacionarnos con el mundo en la existencia de derechos que denominamos «cósmicos», estos derechos son el arte de vivir en armonía, no sólo con los otros pueblos del mundo y también entre los hombres y las mujeres, sino también en un orden de equidad con la naturaleza.
¿Cuál es el papel de las mujeres en esta lucha y en las comunidades?
Las mujeres tienen un protagonismo muy importante en nuestra lucha, no sólo una visibilidad socialmente activa sino también tienen un papel fundamental en la construcción de la conciencia familiar.
¿Cómo entendéis la autodeterminación?
La autodeterminación para nosotros es vivir en nuestro territorio de acuerdo a las nuestras formas de vivir el mundo, sin la opresión y el control de ningún estado que nos mantenga bajo una pretensa hegemonía cultural.
¿Qué perspectivas de futuro tenéis y qué objetivo tiene esta gira y encuentro con los pueblos europeos?
Pienso que el pueblo mapuche se fortalecerá y mientras tanto generaremos un camino de autoafirmación que nos permitirá recuperar derechos y obtener nuevos. Además, esta gira busca la solidaridad internacional y el apoyo a las luchas que estamos llevando a término pero también enriquecernos de las luchas que traen otros pueblos, como es por ejemplo vuestro caso, el catalán, y articular acciones conjuntamente.
Trabajamos para organizar varios encuentros que nos permitan emprender estas acciones conjuntas de las cuales podamos aprender. Por ejemplo, el año pasado organizamos un encuentro con compañeros de Euskal Herria dónde hablamos sobre los derechos lingüísticos y normalización del euskara. Fue una experiencia interesante para nosotros y nos ha servido mucho como perspectiva por enriquecer nuestra lucha idiomática.
Actualmente estamos organizando el mes de julio un encuentro de jóvenes mapuches en la ciudad de Puerto Madre donde asistirán jóvenes mapuches Guluches (de Chile) y mapuches Puelches (de Argentina).
Otro proyecto es la organización de una cooperativa textil organizada por mujeres mapuches que participarán en el encuentro nacional de mujeres que se hará el mes de octubre a la ciudad de Neugen.
Para concluir, ¿qué dirías a los que piensan que la defensa de vuestra cultura es un tema del pasado?
La cultura mapuche no es en absoluto un tema del pasado, es un tema del presente y sobre todo de nuestro futuro. No es sólo conservar una sabiduría y unos conocimientos que son imprescindibles de recuperar para los mapuches y también los otros pueblos oprimidos.
Ya que planteamos una interpelación profunda a la cultura dominante y al sistema de valores que nos imponen desde el poder. Tenemos un futuro y el futuro es libertario. Marici Weu *Marici *Weu ! (por cada uno que caiga diez más se levantarán), y como decís vosotros: visca la terra lliure!