En el Sur corren vientos de libertad. No puedo pasar por alto, el ejemplo de dignidad que se gesta al otro lado de nuestra cordillera. La Argentina nos ha demostrado con coraje, que se pueden recuperar nuestros recursos naturales y golpear al capital financiero transnacional. Nuestro angosto y largo país no solo mira y admira […]
En el Sur corren vientos de libertad. No puedo pasar por alto, el ejemplo de dignidad que se gesta al otro lado de nuestra cordillera. La Argentina nos ha demostrado con coraje, que se pueden recuperar nuestros recursos naturales y golpear al capital financiero transnacional. Nuestro angosto y largo país no solo mira y admira la valentía que irradia las tierras que vieron nacer al «Che», sino que ya comenzó a transitar por el largo camino hacia la libertad. El Chile Rebelde ya despertó de su letargo hace mas de un año, y hoy nuevamente demostró en la calle – esa que se hacía pequeña frente a los cánticos y tambores que entonaban que «la educación chilena no se vende, se defiende.-Las y los protagonistas de esa historia que dio la vuelta mundo en el 2011.Esa que contaba las historia de una juventud que se cansó de la injusticia del modelo educacional neoliberal que los vio nacer y que no claudicó ante las ofertas tentadoras que buscaban nuevamente su silencio. Este ya es otro año y si esta historia fuera un pugilato, diríamos que ya comenzó el segundo round de los estudiantes chilenos.
Algunos meses han transitado desde que escribí las bases de una ponencia que presente en un seminario internacional organizado por el Partido Socialismo y Libertad (PSOL) el 1 de diciembre 2011 en Sao Paulo, Brasil y en una mesa sobre Chile en el Foro Social Mundial, el 28 de enero de 2012 en Porto Alegre, en el mismo país. La ponencia tomó la forma de artículo, siendo publicado con el nombre de «Movimiento estudiantil en el Chile Actual» o «Lecciones del Movimiento Estudiantil en el Chile Actual» en diferentes medios nacionales e internacionales.
En el texto mencionado en el párrafo anterior, expuse los factores que combinados, gatillaron la aparición del ya conocido «Movimiento estudiantil chileno del 2011». Estos son: Como factor estructural y principal, la falta de legitimación del actual sistema político, económico, social y cultural, el famoso neoliberalismo. Como factor político-coyuntural, las contradicciones que genera un gobierno de centro derecha. Como factor generacional, la aparición de una nueva camada de luchadores y luchadoras sociales; como factor Internacional, las revueltas de indignación que se desarrollan en el mundo entero, y el tan importante factor de la experiencia, que ya carga en su mochila el movimiento estudiantil. Junto con analizar los factores indicados, realicé una caracterización del movimiento estudiantil, mencionando entre ellas a la creatividad, masividad, autonomía y temporalidad. También mencioné en dicho texto el pliego de exigencia del movimiento estudiantil, el cual no solo se limitaba a las demandas gremiales de educación gratuita, de calidad, y desmunicipalizada, sino que también incorporaba demandas transversales a la sociedad chilena, como una nueva constitución, reforma tributaria, renacionalización del cobre, entre otras.
Lo primero que quiero decir, es reafirmar la teoría de que el tiempo es el mejor amigo de la precisión, dando una óptica más completa de los procesos sociales. En este caso no es la excepción. Aunque mantengo la gran mayoría de mis postulados, cada punto tratado puede ser profundizado con mayor propiedad en esta época, aunque esto último no es la intención de estas breves líneas. La idea de revisar el texto anterior se explica por lo que está ocurriendo en esta cuarta semana de abril del año 2012, y por la apertura de la ya superada primera etapa, el «segundo round». Lo que realizaré será mirar algunos acontecimientos que se generaron durante el cambio de año.
No muchas cosas han acaecido desde ese tiempo, pero no por ser pocos, son menos importantes. El mes de diciembre finalizó con un recuento de las batallas estudiantiles por los medios de comunicación y con las bajas de los últimos bastiones de resistencias (tomas), entregando los inmuebles a las municipalidades, privados o rectores.
El fin del año también terminó con el cambio de mando en las federaciones de estudiantes. En el acápite sobre la característica «autonomía», señalé lo siguiente: «el Partido Comunista ha tratado varias veces de bajar las movilizaciones y los propios estudiantes han cuestionado su forma de actuar y los han llamado a respetar el mandato popular. Esto a la larga, le pasará la cuenta a los que traten de partidizar a este movimiento«. Dicho y hecho.
En la mayoría de las elecciones de federaciones del país, las Juventudes Comunistas fueron derrotadas, dando como principal ejemplo el caso de la Universidad de Chile, donde Camila Vallejo no pudo conseguir la presidencia. Otro caso emblemático es la Universidad de Santiago (USACH), donde perdieron la mesa y fueron derrotados por un amplio margen. Este castigo es otorgado por parte del estudiantado, puesto que el PC chileno ya premió la conducta de algunos de sus dirigentes, entregándole un cupo a alcalde a Camilo Ballesteros -ex presidente de la FEUSACH- por la comuna de Estación Central a través de un pacto por omisión con la Izquierda Neoliberal (Concertación). El caso de Camila Vallejo, actual vicepresidenta de la FECH, es distinto, ella se ha transformado en toda una celebridad de la política, dedicándose a viajar por el mundo en nombre del movimiento estudiantil, entrevistándose con el mismo Fidel Castro hace un par de semanas. Lo más probable es que el PC la ocupe como carta parlamentaria en las elecciones del año 2014. Esto indica una vez más que el parámetro de decisiones de la política tradicional no tiene mucho que ver con las deliberaciones del mundo social.
Del mismo modo, lo que marcó el último mes del año 2012, es la sensación de que nada concreto se había conseguido. Solo en algunos sectores mas politizados se entendía que las movilizaciones habían realizado un cambio de paradigma en la conciencia de la sociedad chilena. Es verdad, no se consiguió mucho de lo material exigido, pero el movimiento tuvo «la capacidad de poder insertarse en el inconsciente colectivo» y aprender a transitar a una nueva etapa histórica que se está abriendo en Chile. Esta nueva etapa histórica tiene/debe que estar marcada por el protagonismo de las nuevas generaciones. De algo estoy seguro: Esta «nueva generación de luchadores/as sociales que se ha presentado en la escena nacional», llego para quedarse.
El 2011 finaliza definitivamente con un estudiantado tratando de salvar su año académico, con el cansancio natural de meses de movilización activa, y con sensaciones encontradas por la dicotomía objetiva- subjetiva, expresada en la derrota material del petitorio y la victoria de concientización de la necesidad de un Chile mejor.
En Chile, los meses de enero y febrero son sinónimo de vacaciones, sobre todo para el mundo estudiantil. Gran parte del estudiantado se quedó en el mes de enero tratando de salvar el año y el resto asumió la naturalidad del descanso. No sé si febrero sirvió como tiempo de evaluación del movimiento estudiantil del 2011 y sus proyecciones para el 2012. Lo que si estoy seguro, es que sirvió para recargar energías para las batallas venideras.
El mes de Febrero es interrumpido nuevamente de forma intempestiva por un nuevo movimiento social. Ya no eran los estudiantes y Santiago no era el epicentro de las batallas contra la represión policial. Nuevamente desde el sur de Chile, se levanta un pueblo exigiendo sus derechos. Este pueblo es el de la ciudad de Aysén, que se movilizó (y aún se moviliza) por la baja en los altos costos de los combustibles, salud de calidad, equidad laboral, por que exista plebiscitos vinculantes, regionalización de los recursos naturales, por medidas para salvar las pesca artesanal, rebaja en el costo de la canasta básicas, más y mejores rutas de acceso y una universidad pública de alta calidad y formación académica nacida de los intereses y necesidades de los ayseninos. Aysén se organiza a través de la «Asamblea de Movimientos Sociales de Aysén» que logra una victoria parcial más para el mundo social, lo que fortalece la tesis de que Chile, desde la revuelta de Magallanes en enero de 2011 y el triunfo logrado a través de su asamblea de bajar el aumento del gas natural de 16,8 % que imponía el gobierno central al aumento de un 3% de acuerdo a la variación del IPC, se abre una avanzada sostenida por el mundo social en post de sus reivindicaciones.
Pero volvamos a lo estudiantil. Los secundarios son los que más han sentido en este tiempo la represión de los ediles comunales y sostenedores de colegios, quienes desenvolviéndose en el autoritarismo de la legalidad, han aplicado la no renovación de matriculas (expulsión) a centenares de luchadoras/es sociales que se defendieron el derecho a mantener los liceos tomados frente a la ineptitud de un gobierno incapaz de resolver las problemáticas de la educación. Ya se han realizado movilizaciones locales por reintegrar a muchos de estos estudiantes, logrando con éxito esta demanda, pero por otro lado, aún es necesario seguir defendiendo el derecho a la movilización y la no criminalización de ésta.
Llegó el mes de marzo y la vuelta a clases tiene como principal pregunta, la que ya a esa altura, no se podía evitar: ¿Qué pasará con el movimiento estudiantil este año? Esta respuesta es aún un libro abierto por escribir, donde los protagonistas del 2011 no dejarán que queden en blanco las páginas de una historia que ya todos sabemos donde comenzó, y a la vez todos queremos que termine de la misma forma, con una educación gratuita, de calidad y para todas y todos.
En estos últimos días se están escribiendo páginas importantes de esta historia. Dos son los acontecimientos en la cuestión estudiantil los que están marcando la agenda nacional esta semana, la cuarta del mes de abril de 2012. Como toda lucha, siempre hay dos frentes que se están moviendo, jugando sus apuestas para hacer retroceder a su oponente. En esta contienda, encontramos al ya «ultra» desprestigiado gobierno con su anuncio del día Lunes 23 de Abril en materia de nuevo sistema de financiamiento estudiantil para la educación superior y los protagonistas del 2011, los estudiantes chilenos que convocaron a la primera gran movilización del año este miércoles 25.
Vamos por parte. Este lunes 23 de abril, el Ministro de Educación Harald Beyer anunció una propuesta en materia de educación que será enviada al parlamento, donde se pretende establecer un nuevo sistema de financiamiento para la educación superior. Este tiene como principal característica de cambio, la eliminación de los bancos en el negocio de la educación y que el Estado asuma este rol a través de una agencia especializada. Este nuevo sistema de créditos estatal tendrá una tasa anual de 2% y se extenderá al 90% de los estudiantes, dejando exento de este beneficio al 10% más rico. Esta propuesta también incluye cambio en los requisitos para acceder a las becas para los estudiantes más vulnerables, como la disminución en los puntajes de la PSU. El crédito antes señalado por el ejecutivo, propone que este se pague cuando los estudiantes comiencen a trabajar y nadie va a pagar más del 10% de su sueldo, cancelando los beneficiarios no más de 180 cuotas como máximo.
Analicemos algunas cosas de esta propuesta.
● Lo primero, es que este pronunciamiento se realizó con un par de días de anticipación a la primera gran movilización del año. Por tanto, tiene por objeto confundir y amortiguar el descontento de la sociedad con el actual sistema educacional. Aunque esta propuesta no se lanza por la movilización, la fecha que utiliza el gobierno tiene carácter estratégico, con la intención de disminuir el efecto del primer gran golpe del movimiento estudiantil, el cual marcará una pauta en el desarrollo del año.
● Sin caer en el exitismo este anuncio por parte del ejecutivo no lo podemos ver sólo como una propuesta más, aunque es inmensamente insuficiente. Esta se debe tomar con una victoria parcial del movimiento, entenderla como parte de la pavimentación del camino. No es menor hacer desaparecer en primera instancia del negocio de la educación al capital financiero transnacional expresado en la banca privada. Cualquier aporte que ayude a mayor igualdad de la educación superior no es un regalo del gobierno actual, sino logrados a través de la movilización social.
● Sin caer el derrotismo, los logros son insuficientes, y el gobierno de Sebastián Piñera sigue siendo mezquino con la sociedad chilena. Este tipo de pronunciamiento debes fortalecer la convicción de que la lucha tiene que seguir adelante, que la clase política hará todo lo que está a su alcance para seguir con el negocio de la educación y que el estudiantado debe lucha el tiempo que requiera, para cumplir con las justas aspiraciones que se han impulsado.
● Lo último que quiero plantear sobre el pronunciamiento del gobierno, es que no es más que eso en estrictas palabras. Aún no podemos hablar de ley. En el último año hemos sido testigos cómo el presidente ha ocupado los medios de comunicación para dar a conocer al país una propuesta sobre educación, porque la que había planteado el mes anterior era insuficiente. Esto nos demuestra que las definiciones políticas se gestan en el seno del pueblo, cuando éste se moviliza y asume el protagonismo que le corresponde.
Este miércoles 25 de abril se convocó a la primera gran movilización estudiantil del año. La primera gran sorpresa positiva, no vista en el transcurso del año 2011, es la voluntad de unidad que han puesto las diferentes organizaciones que les compete directamente las temáticas educativas. La CONFECH, los estudiantes secundarios de la ACES y CONES, el colegio de profesores y la asociación de padres y apoderados, entre otras. La amplitud y coordinación en la convocatoria nos habla de un movimiento más maduro y alejado de los sectarismo tan habituales de algunos grupos que quieren parcelar los esfuerzos en virtud de sus intereses particulares.
Esta marcha, por ser la primera del año, no estaba exenta de nerviosismo y ansiedad. Aunque en una marcha no se juega el futuro del movimiento, sin duda que marca pautas de lo que podría suceder en el futuro. La actividad político-cultural que se realizó el sábado 21 de abril, no anunciaba un buen pronóstico para lo que podía suceder en esta jornada, pero la caminata de Plaza Italia al escenario que se encontraba ubicado en la Estación Mapocho, fue todo un éxito. 48 mil personas determinó carabineros. 80 mil los organizadores. Me la juego con la cercanía de la última. La masividad que caracterizó las movilizaciones del 2011, volvió para quedarse, aunque la verdad , nunca se fue. También cabe destacar que la creatividad se hizo presente en la manifestación, no con la misma intensidad de otras ocasiones, pero con el asomo de ser necesaria para las próximas.
En esta primera movilización se confirmó la principal demanda: Educación gratuita. Se reafirmó el camino de lucha. Se consagró la movilización social como principal método para conseguir los cambios necesarios. El estado de ánimo que nos dejó haber dado el primer golpe en el segundo round de esta lucha, aunque sea precipitado decirlo, me hace apostar por un triunfo seguro al final del camino.
La Otra Educación: A Construir un Proyecto Educativo Popular
Ya pasaron los tiempos donde los que exigíamos educación gratuita éramos tratados como unos locos voluntaristas en el mismo seno de la izquierda y en las instancias de participación del movimiento estudiantil. Ya pasaron a la historia las reivindicaciones por un arancel diferenciado invocado como principal bandera de lucha de la gran mayoría de las y los estudiantes de izquierda. Esto no ocurrió hace mucho tiempo, es más, en los primeros meses del auge del movimiento estudiantil, estas dos formas de ver la educación estuvieron en pugna hasta que venció definitivamente una: la gratuidad en la educación, triunfando no sólo en la conciencia del estudiantado, sino que en el sentir colectivo de la enorme mayoría de la sociedad chilena.
La enseñanza anterior nos deja el siguiente aprendizaje, no es nuevo, pero tiene una vigencia insoslayable: «Seamos realistas, exijamos lo imposible» sobre todo cuando estos emplazamientos emanan de los más profundos sentimientos de justicia.
Tal vez aún no conseguimos nada de lo planteado de forma originaria y algunos logros son parciales e insuficientes. Pero de algo estoy seguro compañeras y compañeros: Es necesario pasar a la ofensiva. Es urgente plantear un proyecto educativo alternativo a la educación capitalista. Un proyecto que sea discutido por todos los estamentos de la sociedad.
Educación gratuita, universalización del acceso, calidad y desmunicipalización aún son bandera vigentes. Lo que quiero plantear es la necesidad de siempre ir un paso más allá. Es hora de discutir contenidos y metodologías. Es hora de extirpar no solo el flujo de sangre capitalista, que es la mercantilización, sino su corazón, que es la ideología que nos imponen las clases dominantes a través de la educación primaria, secundaria y universitaria, desde nuestro trayecto de niños aprendiendo a leer el mundo hasta nuestro examen de grado. Si vamos a hacer una revolución en la educación, hagámosla como corresponde.
Para que otra sociedad se posible, necesitamos otra educación. Para que la otra educación exista, necesitamos del mundo académico, las y los trabajadoras/es, las y los especialistas, las y los estudiantes, los padres y madres, de pobladores y profesionales, de los logros de la educación formal, de las experiencias de la educación popular… En definitiva, del activo global de estos tiempos, que es el protagonismo popular en la construcción de una alternativa educacional que no quede en lo testimonial, sino en la propuesta que le usurpe el lugar a la educación formal.
* Militante de Libres del Sur-Chile
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