UNIDAD DE LA IZQUIERDA ALLENDISTA: Unidad y frente antineoliberal: Para desplegar fuerzas vinculando las movilizaciones populares en respuesta a la crisis capitalista en una acumulación social, ideológica y electoral para instalar una alternativa antineoliberal a través de la construcción de un gran Frente Amplio de unidad de la izquierda allendista, para enfrentar la batalla electoral […]
UNIDAD DE LA IZQUIERDA ALLENDISTA:
Unidad y frente antineoliberal: Para desplegar fuerzas vinculando las movilizaciones populares en respuesta a la crisis capitalista en una acumulación social, ideológica y electoral para instalar una alternativa antineoliberal a través de la construcción de un gran Frente Amplio de unidad de la izquierda allendista, para enfrentar la batalla electoral desplegando la izquierda allendista como una alternativa de poder y conductora de las luchas sociales más allá de las elecciones presidenciales y parlamentarias de diciembre próximo.
Unidad desde la Base y apresto organizativo territorial: Para asegurar esta confluencia y unidad entre la izquierda extraparlamentaria conformada por el JUNTOS PODEMOS MAS, los socialistas allendistas y otros movimientos, hemos impulsado un proceso unitario a través de la Mesa Unitaria de la Izquierda Chilena, instancia que impulsó la unidad desde la base, generando un amplio proceso de participación y consulta nacional que culminó en la elaboración del programa de gobierno alternativo y la elección del candidato presidencial unitario de la izquierda.
Se organizaron más de 196 Asambleas unitarias de izquierda en la gran mayoría de comunas de todo país y Asambleas por frentes sociales que contaron con una masiva participación de cuadros políticos, dirigentes de organizaciones de trabajadores, estudiantes, pueblos originarios, campesinos, juntas de vecinos, mujeres, creadores culturales, pequeños y medianos empresarios, medios alternativos de comunicación, adultos mayores, derechos humanos, comunidades cristianas de base, etc.
El proceso de unidad culminó el sábado 25 de abril en la sede de la ex Universidad Técnica del Estado, en la Asamblea Nacional de la Izquierda Chilena, en la cual participaron alrededor de 3.000 delegados elegidos por sus respectivas Asambleas y representantes de las comunidades de chilenos en el exterior, los que organizados en 25 Comisiones de trabajo sancionaron el programa alternativo y eligieron democráticamente al candidato único y unido presidencial de la izquierda chilena.
En un clima unitario y con el respaldo de los delegados del Partido Comunista de Chile, de la Izquierda Cristiana, de los Socialistas Allendistas, de los movimientos Izquierda 21 y la Surda e independientes de izquierda, los delegados eligieron democráticamente al compañero Jorge Arrate, Socialista Allendista, sufragando en 25 urnas distribuidas en todo el recinto.
Arrate se impuso con el 80% de los votos ante Tomás Hirsch, ex candidato presidencial y vocero Latinoamericano del Partido Humanista. Escrutada la elección, Tomás Hirsch señaló que trabajaría con alegría y entusiasmo por Jorge Arrate. Junto al también ex precandidato y Presidente del Partido Comunista, Guillermo Teiller, al pueblo allendista e invitados de América Latina y el Caribe de partidos del Foro de Sao Paulo, miles de partidarios convocados por el Juntos Podemos MAS y los Socialistas Allendistas proclamamos solemnemente a Jorge Arrate como abanderado presidencial de la izquierda unida, en el teatro, que lleva el nombre del gran guerrero mapuche Caupolicán.
» Por el pueblo de Chile, por los miles de hombres sacrificados, por el porvenir de los que sufren y anhelan una verdadera democracia y libertad. Yo, Jorge Arrate, proclamado Candidato a Presidente de la República por esta grandiosa asamblea de hombres y mujeres libres, prometo solemnemente ante el pueblo luchar por el triunfo de la izquierda y de este gran frente y por cumplir y hacer cumplir nuestro programa «. Arrate se comprometió así ante los más de 7.000 asistentes en el Caupolicán a luchar por hacer cumplir el programa de la alternativa antineoliberal de gobierno, señalando que Chile tenía que terminar con la exclusión impulsando una Asamblea Constituyente para transformar el modelo de desarrollo del país. Llamó a todos los sectores de la izquierda a la unidad, señalando que «nuestro enemigo se encuentra en la derecha y en los sectores neoliberales de la concertación y nosotros no tenemos enemigos en la izquierda». Finalmente, rindió homenaje a Cuba y saludó a los gobiernos de izquierda y progresistas de Hugo Chávez, Rafael Correa, Evo Morales, Lula, Fernandez de Kichner, Lugo, Tavaré, Ortega y Funes.
Izquierda Unida y Socialismo del siglo XXI: La recomposición de una Izquierda Unida con un poderoso componente socialista allendista, forma parte del ADN y de la cultura profunda instalada en la idiosincrasia de los trabajadores y del movimiento popular chileno, pues ella ha sido y es siempre un factor de crecimiento y posibilidad de ofensiva popular.
La unidad de socialistas allendistas y comunistas junto a los cristianos de izquierda, y humanistas con los movimientos sociales, constituye la clave para la victoria y el crecimiento de la alternativa.
La unidad de los Allendistas no solo suma, sino que multiplica. Con ese objetivo, y para disputar la fuerza histórica, actual y futura del socialismo y del allendismo redomiciliándolo en una clara alianza estratégica de izquierda, hemos constituido en todo el País el Socialismo Allendista, conformado por cuadros socialistas de izquierda militantes del PS y otros que lo han abandonado en los últimos años junto a cuadros provenientes de otras vertientes socialistas y revolucionarias.
Al calor de la batalla electoral en estrecha vinculación con la movilización popular buscamos sentar las raíces del Partido del Socialismo Allendista en Chile. Desde el seno del socialismo y con su reubicación en la izquierda y en proceso activo de unidad, buscamos resolver la disputa por el carácter y tipo de izquierda que hegemónicamente se expandirá en Chile. Por estas razones para los Socialistas Allendistas el enfrentar y derrotar en las urnas y en la cultura a los socialdemócratas o socialistas liberales, se convierte también en una batalla estratégica, en la batalla de las ideas y por la hegemonía cultural, pues ello determinará el avance de una izquierda allendista y por tanto antisistémica y revolucionaria en Chile. En ese marco, proyectamos la candidatura presidencial de Jorge Arrate e inscribimos la crítica política e ideológica que los socialistas allendistas hemos hecho a la llamada «Cumbre Progresista» en Viña del Mar, cuando señalamos que la socialdemocracia europea y sus aliados de la Internacional Socialista (IS) se encuentran en nuestra América en «banca rota» para enfrentar la actual crisis capitalista y la urgencia de profundizar la ofensiva y difusión del socialismo del siglo XXI.
Los Socialistas Allendistas asumimos la tarea de hacer confluir y sumar hacia la izquierda parte importante de la cultura socialista y allendista popular, la misma que en las diversas elecciones ocurridas en los últimos 19 años ha respaldado a los candidatos del Partido Socialista, partido que ha obtenido ininterrumpidamente un promedio electoral de 11 a 12 por ciento nacional y que ha sido capturado por una lógica cupular y burocrática, de orientación social liberal sobre la base de una alianza subordinada a la Democracia Cristiana y sectores tecnocráticos neoliberales en la Concertación, hoy en crisis terminal.
Buscamos instalar y resignificar así el partido del Socialismo Allendista, heredero del Partido Socialista de Chile fundado por el joven Salvador Allende y por quién fuera su primer líder; el Comodoro Marmaduque Grove, militar revolucionario y fundador de la Fuerza Aérea de Chile. Grove precursoramente en 1932, al mando de una Junta militar revolucionaria constituyó la República Socialista de los 12 días.
En su Declaración de Principios el Partido Socialista de Chile, fundado el 19 de abril de 1933, asume «el marxismo como método de interpretación de la realidad» y señala que «la doctrina socialista es de carácter internacional y exige una acción solidaria y coordinada de los trabajadores del mundo» ya en aquél entonces señala que el PS; «propugnara la unidad económica y política de los pueblos latinoamericanos para llegar a la Federación de las Repúblicas Socialistas del continente», impulsando una «política antiimperialista como afirmación principal de una voluntad revolucionaria».
Con la candidatura presidencial de Jorge Arrate, la izquierda chilena vive una oportunidad histórica para avanzar en una alternativa de poder allendista y popular, amplia, unitaria y con capacidad ofensiva.
En síntesis, los 3 ejes ordenadores del Socialismo Allendista son;
Primero, con la candidatura de Jorge Arrate reinstalar una fuerza allendista y de izquierda en el marco de un programa de transformaciones alternativo y una alianza de izquierda unida con sentido estratégico más allá de las elecciones de diciembre próximo.
Segundo, acumular fuerzas para perforar la exclusión social y política de la izquierda en el parlamento y en la sociedad, generada por la constitución neoliberal y consagrada por el actual sistema electoral binominal.
Tercero, instalar y socializar masivamente en la sociedad chilena la necesidad de una nueva Constitución en el Bicentenario de Chile, producto de una gran movilización popular a través de una Asamblea Constituyente. Una nueva constitución que devuelva Chile la completa soberanía sobre nuestros recursos estratégicos y que ponga fin a la consagración de la propiedad privada como el derecho fundamental y a la actual concepción del Estado subsidiario que impide que el Estado sea un agente económico soberano, redistribuidor y regulador para retomar el legado de Salvador Allende abriendo un gran cause popular y revolucionario de futuro para construir en Chile el socialismo del siglo XXI.
CONJUGAR EL VERBO DE LA UNIDAD:
La Concertación como coalición de gobierno se encuentra en proceso de crisis y descomposición y si bien el gobierno de la Presidenta Bachelet en la práctica es un centro atrapado en la lógica neoliberal, en su interior y base social subsisten importantes sectores populares y progresistas cooptados por sus políticas, sectores que hay que ganar y capturar mediante el surgimiento y despliegue de una alternativa Allendista de la izquierda unida como la que hemos construido entorno a Jorge Arrate y el Juntos Podemos Mas/Frente Amplio.
Como resultado del modelo neoliberal y su institucionalidad, del pensamiento único dominante y de una democracia oligarquizada, representativa y concentradora, la correlación de Chile es todavía profundamente conservadora. Para los socialistas allendistas la clave de la batalla Allendista por Chile se logra con unidad y lucha, no con caminos unilaterales o en solitario. Se edifica en el reencuentro amplio entre los movimientos sociales y las fuerzas organizadas de la izquierda, se construye con la unidad de las viejas y nuevas fuerzas de la izquierda y a partir de una Izquierda Unida como la que hemos construido en torno al Juntos Podemos Mas/Frente Amplio.
El factor más importante en esta batalla es y será el despliegue de la candidatura de la unidad de la izquierda, como expresión de una poderosa alianza entre socialistas allendistas y comunistas, Después de 36 años, ninguna candidatura presidencial de la izquierda Unitaria había sido encabezada por un socialista como sucede hoy con Jorge Arrate. Es por ello que buscaremos sumar a este proceso a otros sectores y grupos en formación como el liderado por el senador Alejandro Navarro, que luego de participar en la mesa Unitaria de la izquierda se restaron del proceso de construcción de la unidad que culminó con la elección de nuestro programa y del cro Arrate como abanderado presidencial. Con este mismo enfoque enfrentamos la contradictoria pre candidatura del actual diputado PS, Marco Enríquez Ominami, la que se presenta como una potencial opción desde dentro de la Concertación, de corte transversal pero de claro énfasis liberal en materia económica y más bien funcional a la continuidad Concertacionista.
Para nosotros la candidatura del cro Jorge Arrate, más allá de la coyuntura electoral es portadora del germen de un proyecto Allendista alternativo para el Chile del siglo XXI, basado en la unidad amplia de los revolucionarios, de los socialistas y comunistas, cristianos de izquierda, humanistas junto a amplios y nuevos sectores de izquierda en conjunto con los movimientos sociales.
A CONSTRUIR EL PARTIDO DEL SOCIALISMO ALLENDISTA
ALZATE CHILE