El viernes 10 de septiembre, en el Parque Baquedano, más de doscientos funeros se dieron cita para protestar por la construcción del Monumento al fascista e ideólogo de la dictadura militar, Jaime Guzmán Errázuriz (en la foto dándole la mano a Pinochet) a quien declararon funado por su complicidad con la dictadura militar. Con un […]
El viernes 10 de septiembre, en el Parque Baquedano, más de doscientos funeros se dieron cita para protestar por la construcción del Monumento al fascista e ideólogo de la dictadura militar, Jaime Guzmán Errázuriz (en la foto dándole la mano a Pinochet) a quien declararon funado por su complicidad con la dictadura militar. Con un papelografo que decía «No al monumento fascista» los manifestantes repudiaron esta iniciativa que impulsa la UDI con el apoyo del alcalde de Providencia, «ex coronel en retiro e instructor de torturadores en Tejas Verdes, Cristian Labbe». La Comisión Funa señaló que el monumento que se pretende construir en Plaza Italia, en el frente del Teatro de la Universidad de Chile, es «una verdadera provocación para la gran mayoría de los ciudadanos de nuestro país».
Jaime Guzmán «desde el primer día se puso al servicio de la Junta que asumió tras el sangriento golpe militar del 11 de septiembre de 1973. Formó parte de la denominada «Comisión Legislativa» que intentó darle visos de legalidad a la tiranía y es el cerebro de la Constitución de 1980, aprobada en un plebiscito fraudulento, y que sirve hoy para terminar excluyendo a los que el consideraba «enemigos», a pesar de que se abolió el articulo quinto, en el que se dejaban fuera de la ley a todos los partidos «marxistas» señaló la Comisión Funa.
Claudio Ibarra – dirigente de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos – manifestó en el acto que esta iniciativa de la derecha «es una ofensa» para los miles de familiares y compañeros de los asesinados y detenidos desaparecidos que murieron en la dictadura. «Para nosotros no nos parece justo que el gobierno permita que se construya este monumento ya que Jaime Guzmán es el ideólogo que ayudo a derrotar al presidente Salvador Allende. Junto a Pablo Rodríguez ellos fueron los fundadores de Patria y libertad la que atentó contra la Unidad Popular. No nos parece que una persona que tanto daño hizo a los derechos humanos en nuestro país tenga un monumento. Él sabía de las torturas y de los allanamientos a las poblaciones» señaló.
En el edificio, donde en el primer piso funciona el Teatro de la Universidad de Chile, se pueden ver dos lienzos con la leyenda «Los vecinos no queremos el monumento aquí». Un dirigente vecinal señaló que con la construcción que ya empezó en agosto se «han pasado a llevar los derechos de todos los vecinos y de todos los chilenos que se juntan en este punto de Santiago a celebrar victorias deportivas y sociales, como también a protestar».
El candidato a concejal de PODEMOS Carlos Sánchez, quien también tomó la palabra, señaló que Guzmán ayudo a paralizar a la sociedad chilena «a crear movimientos sociales indefensos; incapaces de defender sus propios derechos como históricamente lo habían hecho los movimientos de trabajadores, movimientos de mujeres, movimientos de campesinos y los movimientos de pobladores. Ese gran logró, introducido a través de la fuerza y de la represión y posteriormente a través de políticas tendientes a la desmovilización del movimiento social, es también responsabilidad de Jaime Guzmán…»
«Si ellos, los neoliberales quieren construir un monumento a Jaime Guzmán pues entonces tenemos que instalar miles de monumentos en homenaje a todos los trabajadores que lucharon por recuperar nuestras riquezas. Tenemos que levantar monumentos a todos los mártires, a todos nuestros muertos, en cada esquina. Si ellos instalan este monumento nosotros aquí diremos cuantos muertos Jaime Guzmán trajo, cuanta cesantía Jaime Guzmán trajo…» señaló Sánchez.
El monumento que se levantará en Plaza Italia ha sido diseñado por la escultora María Angélica Echavarri y el arquitecto Nicolás Lipthay A. De acuerdo a la UDI Jaime Guzmán fue «una figura de excelencia y rectitud excepcional» y «un precedente de rectitud y valentía, de transparencia y fuerza», «su memorial, monumento erguido en su nombre, debe según creemos, despertar otra vez en el corazón de la ciudad el espíritu de Jaime Guzmán». Para el corazón de muchos chilenos, sin embargo, será el memorial simplemente de un criminal.