Convocadas por la Plataforma Estatal por la Paz en Colombia, personas vinculadas a las organizaciones y colectivos que en los distintos territorios del Estado español trabajan en pro de la paz con justicia social en Colombia, así como exiliados y refugiados colombianos y miembros del Movimiento de Victimas de Crimenes de Estado, se dieron cita […]
Convocadas por la Plataforma Estatal por la Paz en Colombia, personas vinculadas a las organizaciones y colectivos que en los distintos territorios del Estado español trabajan en pro de la paz con justicia social en Colombia, así como exiliados y refugiados colombianos y miembros del Movimiento de Victimas de Crimenes de Estado, se dieron cita en el municipio de Rivas Vaciamadrid este 12 y 13 de abril para poner en común propuestas para la paz con las que contribuir al esfuerzo de construcción de acuerdos de la Mesa de Diálogos de La Habana y al Congreso por la Paz convocado por las organizaciones sociales y movimientos populares que convergen en la Ruta Social Común para la Paz, que se celebrará el 19 y 20 de abril en Bogotá.
Este Congreso Estatal partía de un trabajo previo que se ha venido desarrollando en las distintas comunidades autónomas del Estado español, donde se han realizado encuentros regionales para articular propuestas, garantizando mecanismos de participación y haciendo un llamado muy amplio a participar activamente en la construcción de propuestas que enriquezcan desde la realidad de los exiliados o migrantes colombianos y las organizaciones de solidaridad internacionalista en el Estado español, la agenda de propuestas que permita vislumbrar un itinerario para la paz con justicia social en Colombia.
Este esfuerzo de coordinación y participación previo dio sus frutos en el Encuentro Estatal de Rivas Vaciamadrid, en el que se constituyeron tres comisiones de trabajo: una enfocada en propuestas hacia la Mesa de Diálogos de La Habana, otra centrada en propuestas hacia el trabajo de la solidaridad internacionalista y otra comisión de participación popular.
No a la impunidad
En el plenario donde se pusieron en común las conclusiones y propuestas de las distintas comisiones, que serán recogidas en un documento próximamente, se insistió en que el exilio colombiano es parte de las víctimas del Estado colombiano, que tienen derecho a plantear una altura de miras en la agenda de la negociación de paz. Y desde esta definición se reclamó la necesidad de aprender de las experiencias de distintos modelos de resolución de conflictos internos ya implementados: se mencionó el fracaso de los procesos en Centroamérica, donde en buena medida se tomó la inspiración del modelo de la Transición española, basado en la renuncia a pedir responsabilidades por los crímenes cometidos. Una de las reclamaciones más enfáticas del encuentro estatal español es el rechazo de la impunidad. Se habló también del modelo sudafricano, en el que se sacrificó la justicia a cambio de la verdad; y del modelo argentino, donde, por el contrario, se partió de la base de que no puede haber democracia sin justicia y por tanto había que perseguir a los criminales hasta el final, como una política cuyos frutos no fueron inmediatos, sino que han tenido que pasar décadas para que empiece a darse algo de justicia con respecto a los crímenes de la dictadura. No a la impunidad y rechazo de la llamada justicia transicional, donde a los responsables de crímenes se les ofrecen beneficios y perdón a cambio de confesiones. Cualquier paz basada en la impunidad será una paz falsa.
También se subrayó la necesidad de que la paz se base en la verdad, y se subrayó que no debe hurtársele al pueblo colombiano la verdad de los hechos que han venido sucediéndose y de sus responsables, bajo el argumento de la «reconciliación». Porque conocer la verdad es la garantía de que no se vuelvan a repetir y no se cierren las heridas en falso. «Como el fuego» – se dijo- «la verdad puede ser dolorosa al comienzo, pero también cauteriza».
La necesidad de que la paz se aborde con un enfoque de género se planteó como una urgencia en la medida en que las mujeres sufren especialmente la violencia y la pobreza, y no pueden estar excluidas de la agenda de construcción de la paz.
Los participantes en el Encuentro por la Paz denunciaron la connivencia de la Unión Europea y de los respectivos gobiernos con los crímenes de Estado funcionales a los intereses de las transnacionales asentadas en Colombia, y reclamaron la inmediata exclusión de las FARC de la «lista de organizaciones terroristas» de la Unión Europea.
Del Gobierno español reclamaron específicamente que acompañe el proceso de diálogos, que en este momento está siendo respaldado por Cuba, Venezuela, Noruega y Chile como países acompañantes, y la contribución activa del Gobierno español a los diálogos de paz.
Los participantes en el Encuentro Estatal por la Paz en Colombia acordaron realizar un segundo evento de ámbito estatal para el segundo semestre del año, así como promover un Foro de ámbito europeo siguiendo la metodología y el modelo propuesto por las delegaciones de paz de La Habana para poder recoger las propuestas de la población civil.
Audiencia Pública Internacional con el congresista Iván Cepeda
El 13 de abril por la tarde, una vez concluido el Encuentro, sus conclusiones fueron trasladadas a la Comisión de Paz del Congreso colombiano a través de una Audiencia Pública Internacional, en la que el congresista Iván Cepeda pudo escuchar a través de video-conferencia, el diagnóstico y las propuestas de los participantes en el Encuentro estatal, en su triple dimensión: víctimas, exiliadas y activistas de la solidaridad internacional con Colombia.
FOTO: REBELIÓN / La Audiencia Pública Internacional sesionó mediante videoconferencia con el congresista
Iván Cepeda y fue acompañada por una representante de la Embajada venezolana (en la mesa)
Iván Cepeda afirmó que «el asunto de las víctimas y sus derechos es crucial para construir la paz», recalcando que «no se trata de una mera negociación entre partes; no se trata de un regateo sobre cuánta verdad, cuánta justicia, cuánta reparación y cuántas garantías de no repetición» de los crímenes concede el Estado. «Es imprescindible que se reconozca el principio de bilateralidad: deben ser reconocidas todas las víctimas».
Cepeda recordó que el Acuerdo General que enmarca las negociaciones de La Habana dice que los ciudadanos tienen derecho a reunirse y enviar sus propuestas, tratando de que tengan formalidad y garantía. En ese sentido, agradeció la participación de una representante de la Embajada de la República Bolivariana de Venezuela en España, como garante de la Audiencia Pública celebrada en Madrid y subrayó que la voz de los exiliados es fundamental para el proceso de paz.
Entre las propuestas trasladadas a la Comisión de Paz del Congreso colombiano desde la Audiencia Pública de Madrid, se planteó la necesidad de actuar sobre las causas estructurales de la guerra y acabar con la violencia contra las mujeres, se subrayó que el enfoque de género es indispensable. Se recordó que no estamos en un escenario de post-conflicto, sino que la guerra continúa y cada día se siguen generando víctimas. El llamado a un cese al fuego bilateral y la exclusión de las FARC-EP de la lista de organizaciones terroristas, así como la incorporación de las organizaciones insurgentes hasta ahora ausentes del actual proceso de paz, el ELN y el EPL, a la Mesa de Diálogo de La Habana, fueron reivindicaciones concretas de la solidaridad internacional con Colombia en el Estado español.
El congresista Iván Cepeda agradeció los aportes e hizo un llamado a multiplicar las audiencias públicas y los espacios de participación y construcción de propuestas para la paz con justicia social en Colombia.
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