El estado actual del modelo económico cubano -centralizado, con bajo crecimiento y con probable alta desigualdad- pudiera transformarse siguiendo trayectorias diferentes. Estas incluyen desde la posibilidad de un relativo atasco del modelo actual hasta un tránsito hasta el modelo anhelado oficialmente: una economía próspera con dirección centralmente planificada. Existen, entre esos dos casos, otras posibles […]
El estado actual del modelo económico cubano -centralizado, con bajo crecimiento y con probable alta desigualdad- pudiera transformarse siguiendo trayectorias diferentes. Estas incluyen desde la posibilidad de un relativo atasco del modelo actual hasta un tránsito hasta el modelo anhelado oficialmente: una economía próspera con dirección centralmente planificada. Existen, entre esos dos casos, otras posibles configuraciones futuras del modelo.
En el texto anterior, se habían definido las dos incertidumbres críticas que se adoptarían como los ejes de una posible matriz de escenarios: el grado de predominio estatal en la regulación y el crecimiento inclusivo.
Corresponde ahora identificar los posibles escenarios que pudieran representarse en cada uno de los cuatro cuadrantes definidos por el cruzamiento de los ejes de las dos incertidumbres críticas.
Debo aclarar que lo que se presenta a continuación presenta dos limitaciones importantes. En primer lugar, como he dicho anteriormente, el ejercicio de escenarios debe ser realizado de manera colectiva, involucrando varios expertos, de manera que lo que se expone a continuación no debe ser entendido en modo algunos como un ejercicio cabal de escenarios sino simplemente como una reflexión a modo de ilustración.
En segundo lugar, la exploración de escenarios adopta aquí el marco restringido de escenarios socialistas. Es decir, no se han considerado otros escenarios posibles que pudieran representar un cambio radical de modelo. El futuro no es predecible y, con independencia de nuestras preferencias, pudieran identificarse escenarios no socialistas. De hecho, un ejercicio amplio de escenarios debería considerarlos. La razón para que se haya adoptado aquí un enfoque restringido es que este texto se propone básicamente ilustrar situaciones que pudieran tener una relevancia directa para los debates que se hacen el país sobre la reforma económica.
El grafico siguiente identifica cuatro posibles escenarios:
Escenario inercial: modelo actual, con combinación de un alto grado de predominio estatal en la regulación y bajo crecimiento inclusivo, con alto índice de desigualdad y con escaso crecimiento económico.
Escenario preferido: situación que expresa la preferencia oficial identificada en los documentos de la «actualización» y el plan de desarrollo hasta 2030. Se trata de un modelo donde «el sistema de dirección planificada de la economía tiene en cuenta la vigencia de las relaciones de mercado, regula el accionar de sus leyes y limita los espacios de su actuación, de modo que las leyes del mercado no ejercen el papel rector del Modelo» (párrafo 211 del documento de la «actualización»). Es decir, un modelo esencialmente centralizado, pero que ofrece un margen instrumental al mercado.
Escenario indeseable: situación que refleja un estado de desazón generalizada respecto a la posibilidad de un futuro sin prosperidad económica y con desigualdad, a la que se agrega la posible primacía de mecanismos de mercado. En su variante extrema, pudiera degenerar en una reproducción de la fase más aguda del llamado periodo especial.
Escenario aceptable: Sería un entorno de crecimiento inclusivo, con elevada aceptación generalizada. El calificativo de aceptable se refiere aquí a una situación «sub-óptima» respecto a la visión oficial expresada en los documentos de la «actualización» y del plan de desarrollo hasta 2030. El grado de predominio estatal en la regulación seria notablemente menor que el que pudiera corresponder a un «sistema de dirección» con una fuerte función rectora. Se caracterizaría por un peso relativamente elevado del mercado en funciones claves como la asignación de recursos y la fijación de precios. Un posible punto de referencia consistiría en asumir que en este cuadrante la planificación centralizada decide el 50 por ciento, o menos, de la inversión total del país.
En este cuadrante quizás tiene sentido reflejar dos sub-escenarios. Uno más próximo a un grado relativamente alto de predominio estatal de la regulación, en el contexto del cuadrante, al cual le he llamado «socialismo próspero con mercado», que es un término que ha sido utilizado por algunos economistas cubanos, específicamente por la Dra. Margarita Garcia Ravelo.
En ese sub-escenario se asume que «el mercado no será el mecanismo de asignación de los recursos por excelencia, pero sí comenzará gradualmente a influir en tales determinaciones, y contribuirá al cumplimiento del Plan». Aunque pudiera pensarse que es similar a lo planteado en el documento de la «actualización», en mi modesta opinión existe una diferencia. Mientras que el texto de la «actualización» pone el acento en los límites dentro de los que debe funcionar el mercado, la formulación de «socialismo con mercado», reconoce el papel subordinado del mercado, pero proyecta una visión más positiva respecto a la función del mercado. En cualquier caso, es mi interpretación personal del asunto.
Al segundo sub-escenario le he llamado «socialismo próspero de mercado». Esencialmente pudiera ser considerado como una variante de lo que desde ya hace algún tiempo ha sido adoptado como modelo socialista en China, donde el mercado funciona «como mecanismo central de asignación de recursos» (ver texto de Margarita Garcia Ravelo). No expreso aquí un juicio sobre el modelo chino, y mucho menos sugiero su adopción en Cuba. Simplemente lo he mencionado para facilitar la comprensión de las características de este sub-escenario.
¿Cuáles serían las posibles trayectorias que deberían considerarse con vistas a informar el diseño de estrategias?
Sugiero adoptar tres grupos de trayectorias:
- Trayectorias que debe ser evitadas a toda costa: En este caso sería cualquier trayectoria que pudiera conducir desde el escenario «inercial» hacia el escenario «indeseable». Significaría el desplazamiento desde un cuadrante «malo» a uno peor.
- Trayectorias de conservación: Son las trayectorias que pudieran conducir desde la situación actual hacia el escenario «inercial». Se producen transformaciones que, sin modificar sustancialmente el modelo, pudieran incluir adaptaciones mínimas que le permitiesen subsistir (resistir), quizás en espera de oportunidades más favorables para hacer una modificación más sustantiva del modelo. No implicaría un cambio de cuadrante.
- Trayectorias de transformación: Serian todas las trayectorias que culminan en los dos cuadrantes «buenos» desde una perspectiva de crecimiento inclusivo (escenario «preferido» y escenario «aceptable»). En principio pudieran identificarse tres trayectorias, señaladas en el grafico siguiente como:
- Trayectoria 1: desde la situación actual hacia el escenario «preferido», es decir, materialización de la «conceptualización» del modelo.
- Trayectoria 2: desde la situación actual hacia el sub-escenario de «socialismo próspero con mercado», con un grado de participación del mercado en la regulación que sería relativamente superior al que se asume en la «actualización».
- Trayectoria 3: desde la situación actual hacia el sub-escenario de «socialismo próspero de mercado», que rebasaría considerablemente lo que asume hoy la «actualización» en materia de funciones del mercado.
¿Cuáles serían las implicaciones posibles de esos escenarios y trayectorias para el diseño de estrategias? Ese será el tema de una próxima nota.
Fuente: http://elestadocomotal.com/2017/04/24/escenarios-economicos-posibles-trayectorias/