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Entrevista al cantante jamaicano Linton Kwesi Johnson

Estallamos porque estábamos cansados de comer mierda

Fuentes: Público

Linton Kwesi Johnson, analista de los conflictos raciales en Inglaterra y precursor de la mezcla de poesía y reggae, participa en el Festival Yuxtaposiciones

La historia comienza con un niño jamaicano de 11 años pisando Inglaterra por primera vez. Corría el año 1963 y el pequeño Linton Kwesi Johnson había llegado para quedarse. «Recuerdo que sentí una gran decepción al verme en aquella ciudad gris y fea en un frío día de noviembre. Todos los edificios parecían fábricas. No era la Inglaterra que había imaginado una mente infantil condicionada por el colonialismo, la Inglaterra de las calles pavimentadas con oro y todos esos clichés», rememora 47 años después Kwesi Johnson, que llegó ayer a Madrid para recitar sus poemas en el Festival Yuxtaposiciones, en la Casa Encendida de Caja Madrid.

Linton Kwesi Johnson (Chapelton, Jamaica, 1952) fue uno de los miles de jamaicanos que emigraron a la antigua metrópoli inglesa en los años sesenta. Se instaló junto a su madre en el barrio de Brixton, al sur de Londres. El pequeño Linton iba a ejemplificar como nadie los dos fenómenos históricos más significativos provocados por la ola migratoria llegada desde el Caribe: el racismo (y su corolario: la lucha antirracista) y la revolución de la cultura británica. En efecto, la mezcla del reggae y el dub con los estilos de música británicos cambiaría en unos años el curso de la música popular. Pero antes de que los punkis de The Clash se fueran a grabar a Jamaica (1980) y de que surgieran estilos como el drum & bass o el reciente dubstep, los jamaicanos británicos tendrían que llevarse muchos palos.

El racismo contra los negros (con su mezcla de agresiones físicas y marginación económica) estaba a la orden del día en la Inglaterra de los años sesenta y setenta. El joven Linton Kwesi aprendió pronto a desenvolverse en este ambiente hostil. «En el colegio me eché rápidamente amigos blancos. No había otra salida: entonces no había muchos niños de origen caribeño en las aulas. Lo de los profesores ya fue otro cantar. Tuve algunos muy buenos, pero otros eran bastante racistas. Paradójicamente la educación que había recibido en Jamaica era superior en algunos aspectos a la que me ofreció Inglaterra. En matemáticas, por ejemplo, estaba dos o tres años adelantado a los niños ingleses, aunque entonces un niño caribeño en Londres sólo podía aspirar a trabajar en una fábrica», cuenta a Público.

Con las panteras negras

El niño aprendió a hacerse valer. Eran tiempos de acoso policial y agresiones fascistas contra los inmigrantes; es decir, el «ambiente xenófobo ideal para acabar militando», explica Linton, que en 1970 se enroló en la facción británica de las Panteras Negras. «Teníamos los mismos eslóganes que las panteras americanas. Black Power. People’s Power. Pero lo que más me sorprendió cuando empecé a militar fue comprobar que había libros escritos por negros. Que existía en el mundo algo parecido a una literatura negra», cuenta sin ironía.

El libro que cambió la vida de Linton Kwesi Johnson se llamó The Souls of Black Folk, de W. E. B. Du Bois, un ensayo sobre la precaria situación de los negros americanos tras la abolición de la esclavitud. El texto ejerció de «catalizador» en la mente de un joven que descubrió la poesía «gracias a la política». «Escribir poesía se convirtió en un acto político» para un Linton influenciado tanto por los «discursos de Malcom X» como por las canciones de los pioneros del hip hop The Last Poets, «que utilizaban el lenguaje de las calles como vehículo poético», afirma.

Su primer libro de poemas, Voices of the Living of the Dead, se publicó en el año 1974. Al año siguiente aparecería el poemario Dread Beat an Blood (1975), una demolición del idioma de William Shakespeare pocas veces vista hasta entonces. El poeta contaba historias sobre abuso policial, marginación social y ataques del National Front en un inglés caribeño en el que las palabras se escribían como sonaban en las calles de Brixton. O el argot elevado a la máxima potencia poética.

El poemario salió en forma de álbum en 1978, con Kwesi Johnson recitando imparable sobre una base musical de reggae y jazz. Había nacido la dub poetry. Y Linton se había convertido en el gran cronista de la juventud británico-jamaicana. Y en un fino analista de los conflictos raciales en Reino Unido: la última canción del disco, All Wi Doin’ Is Defendin, vaticinaba con precisión inquietante lo que iba a ocurrir el 11 de abril de 1981 en Brixton: los primeros disturbios raciales ocurridos en Inglaterra. «Las autoridades habían criminalizado a toda una generación de jóvenes inmigrantes caribeños. Estallamos porque estábamos hartos de comer tanta mierda», recuerda tajante.

El descontento negro había explotado tras meses en los que a las dosis habituales de racismo se le había unido las destructivas recetas sociales de Margaret Thatcher (la Dama de Hierro había sido nombrada primera ministra en 1979). Johnson se convirtió en una de las voces más representativas de una comunidad negra que exigía ser escuchada tras pegar un puñetazo en la mesa. «Los disturbios de Brixton fueron el inicio de la transformación de las relaciones raciales en Reino Unido. Habíamos demostrado que éramos poderosos y que estábamos dispuestos a ejercer ese poder. Lo paradójico del thatcherismo es que fue la etapa en la que los negros conseguimos más avances gracias a las luchas que mantuvimos para alcanzar igualdad racial y justicia social», cuenta Johnson, que resume así la doctrina Thatcher: «Se trató de una ruptura radical de los acuerdos sobre los que se sostenía la Inglaterra posbélica para dar vía libre al neoliberalismo».

Linton Kwesi Johnson grabó durante esos años discos básicos del dub como Forces of Victory (1979) Bass Culture (1980) y Making History (1984), títulos que mostraban una politización que contrastaba con la deriva mística de otros músicos de reggae. Estos discos han cobrado nuevos bríos en los últimos años gracias a la influencia del dub sobre la música electrónica, que ha engrandecido las figuras de los pioneros jamaicanos. Linton Kwesi Johnson, por ejemplo, actuó en el Sonar barcelonés en el año 2006.

Su última recopilación de poemas, Revalueshanary Fren: Selected Poems (2002), ha sido la primera obra de un poeta negro y la segunda de un poeta vivo publicada en la prestigiosa colección de clásicos modernos de la editorial Penguin. Palabras mayores.

Tras años de lucha política y militancia underground, Linton Kwesi Johnson se ha convertido en un clásico de la cultura británica contemporánea, pero nadie podrá acusarle de haberse acomodado políticamente al calor de los gobiernos laboristas y su «cháchara» multicultural. «La ironía es que el nuevo laborismo llevó el thatcherismo mucho más lejos de lo que Thatcher pudo soñar nunca. Tony Blair vendió todos los activos nacionales. El agua, el gas, la electricidad ¡Lo liquidó todo!», zanja entre indignado y estupefacto.

Fuente: http://www.publico.es/culturas/345267/estallamos-porque-estabamos-cansados-de-comer-mierda