Sobre el feminicidio de 40 niñas del Hogar Seguro de Virgen de la Asunción (Guatemala)
En el ámbito internacional, las feministas solicitan a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, que intervenga para vigilar las investigaciones. Piden también una visita al país de la Relatora sobre los Derechos de las Mujeres de Naciones Unidas y de la Relatora Especial de Violencia contra las Mujeres, sus Causas y Consecuencias, de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. El Consejo del Pueblo Maya, en otro comunicado, llama también a la reflexión sobre lo que significa seguridad en el hogar, porque no existe tal, si permitimos que haya violencia contra las mujeres.
Debemos, dice, ante la tragedia de las niñas del albergue Hogar seguro, parar y denunciar todos los abusos contra las mujeres, las niñas y los niños. La mayoría de los «hogares seguros» creados por el Estado, afirma el Consejo Maya, no tienen la visión, capacidad, y voluntad para atacar de raíz las causas de las violencias contra la niñez. «Son cárceles y «funcionan mal porque este Estado no está hecho para proteger a la sociedad ni para garantizar la vida».
Feminicidio institucional
Propone que la sociedad «contribuya a erradicar cualquier acto de violencia, desde los gestos despectivos, insultos, los malos tratos, hasta las torturas, desapariciones y asesinatos», en lo individual, en su casa, trabajo o escuela, para que la violencia salga de la cotidianidad. Descolonizar nuestras relaciones y derribar los cimientos de las violencias, privilegios y segregaciones. Piden también a los medios de comunicación respeto a las niñas fallecidas y hospitalizadas, a sus familias, para que no se las victimice ni criminalice y no se exponga a las sobrevivientes «cuya vida corre peligro».
A los hombres les piden que no se convierta en máquinas de destrucción y dolor, y que se asuman como seres íntegros, generosos y solidarios. Las mujeres, dicen las organizaciones, debemos unirnos para salir de las opresiones y solicitan a la comunidad internacional que siga observando y acompañando a las comunidades y pueblos más necesitados.
«Las niñas no se tocan, no se violan, no se queman, no se matan», finalizan las feministas. «No más pactos para controlar y matar a las mujeres», dice el Consejo del Pueblo Maya.