Como suele ser habitual, ante las demandas de los trabajadores por mejores salarios, las empresas privadas forestales que son protegidas por el Estado chileno, ante la movilización desplegada por su lucha por mejores condiciones de vida, la única respuesta que han encontrado ha sido la represión y la muerte. Las informaciones procedentes de la Octava […]
Como suele ser habitual, ante las demandas de los trabajadores por mejores salarios, las empresas privadas forestales que son protegidas por el Estado chileno, ante la movilización desplegada por su lucha por mejores condiciones de vida, la única respuesta que han encontrado ha sido la represión y la muerte.
Las informaciones procedentes de la Octava Región en Chile, indican que un funcionario de los aparatos represivos del Estado chileno, dio muerte con su arma de servicio a un obrero forestal impactando al trabajador de Bosques Arauco que participaba en la demostración por mejoras salariales, los incidentes ocurrieron en la ruta de Concepción a Arauco. Incidentes que han dejado un saldo además de seis trabajadores detenidos y seis heridos.
Los trabajadores ocuparon la ruta 160 que une Concepción con Arauco, en el acceso a la planta de Horcones, cuando fueron provocados por los efectivos de los aparatos represivos que intentaron desalojar la ruta. En los altercados, uno de los funcionarios policiales disparó contra un obrero que se encontraba sobre una maquina retroexcavadora.
De acuerdo a informaciones preliminares, el obrero fallecido trabajaba en Conguillío, Novena Región, y pertenecía a una empresa contratista de Bosques Arauco. Los trabajadores forestales este último tiempo han venido desplegando una serie de luchas reivindicativas, con el objeto de mejorar sus salarios y condiciones de trabajo. Sin embargo las empresas privadas con el aval de los neoliberalistas del gobierno de Bachelet, se han negado rotundamente a buscar una solución a las demandas de los trabajadores de este sector laboral. En el sector de Horcones fue donde se produjeron los enfrentamientos entre los aparatos represivos, que llegaron provocando a los trabajadores. Para luego derivar en el uso de la fuerza policial la que comenzó a arrojar bombas lacrimógenas para dispersar a la multitud y para ello también utilizaron carros lanza aguas, aunque estos esfuerzos parecían estériles para repeler las manifestaciones que realizaban los trabajadores por sus demandas. Los balazos al aire de las fuerzas represivas podían sentirse por doquier, según señalan fuentes periodísticas de la región. La enorme violencia policial también hacía peligrosa la labor de varios de profesionales de medios de comunicación quienes, en un clima irrespirable por el humo de las bombas lacrimógenas, intentaban proteger su integridad física. De acuerdo a informaciones de la prensa local, la intendenta regional María Soledad Tohá- ha tratado de responsabilizar a los trabajadores de los hechos acaecido en la zona, la alta funcionaría pública de la región es la que tiene bajo su mando, la orden de reprimir los presuntos hechos de violencia que se produzcan en la región. Los trabajadores de Bosques Arauco están en paro desde el lunes pasado, en demanda de un reajuste salarial. Los 7.000 trabajadores exigen mejoras salariales y al no obtener respuesta de los empresarios forestales, resolvieron ir a la huelga , el que ha derivado en algunas escaramuzas con los aparatos represivos de la región. Las negociaciones estaban en punto muerto, pese a la mediación incluso de monseñor Ricardo Ezatti, ya que la empresa retiró la última oferta que había puesto sobre la mesa.
Como es habitual en este tipo de conflictos, los empresarios madereros deslindan todo tipo de responsabilidades, por ejemplo, el gerente de la Cámara de la Producción y del Comercio (Cppc), Leoncio Toro Araya, señalo que se está haciendo un uso indebido de la fuerza por parte de los trabajadores.
Se informó además que el dirigente Pascual Sagredo y personal de la Celulosa Arauco abrieron una instancia de diálogo para tratar de impedir más víctimas y terminar con la brutal violencia de los aparatos represivos..
El Partido Comunista emitió un comunicado para exigir «el retiro inmediato de las fuerzas represivas y la reinstalación de la mesa de negociaciones».
Los hechos se viene a producir justo en los momentos en que la popularidad de la presidenta Bachelet y su conglomerado político, la Concertación, se encuentra seriamente deteriorada ante los electores y la ciudadanía, así lo indica la última encuesta dada a conocer por la empresa Adimark, en el día de ayer.