Recomiendo:
0

Al cumplirse un mes del fallecimiento de Guillermo Almeyra entrevistamos a Eduardo Lucita

Guillermo Almeyra, militante de cuatro continentes

Fuentes: Rebelión

M.H.: Este pretende ser un homenaje a nuestro columnista internacional, Guillermo Almeyra, con quien teníamos el placer de comunicarnos cada 15 días y analizar distintos acontecimientos de la política internacional («Fe de erratas», FM La Boca (90.1), Miércoles de 9:00 a 10:00). Eduardo fue un gran amigo de Guillermo. Me gustaría que nos dieras una […]

M.H.: Este pretende ser un homenaje a nuestro columnista internacional, Guillermo Almeyra, con quien teníamos el placer de comunicarnos cada 15 días y analizar distintos acontecimientos de la política internacional («Fe de erratas», FM La Boca (90.1), Miércoles de 9:00 a 10:00). Eduardo fue un gran amigo de Guillermo.

Me gustaría que nos dieras una semblanza de Guillermo, yo siempre decía que era un fino analista internacional y político; pero a veces es difícil dar una imagen de quién es esa persona que se está comunicando con la audiencia. Más allá del programa especial que hicimos con Guillermo cuando comentamos su libro autobiográfico Militante crítico. Creo que fue la única oportunidad en la que hablamos de su trayectoria.

E.L.: Para entrar en conocimiento de la personalidad política de Guillermo el libro autobiográfico es esencial, porque uno en pocos minutos no puede abarcarlo. Porque no solo fue un periodista y un fino analista político, sino también que era un hombre de una cultura exuberante, eso se notaba cuando hacía los análisis, porque no se remitía a analizar el problema inmediato de la coyuntura sino que lo componía en la historiografía económica social del país que analizaba.

Cuando residía en Buenos Aires nos hablábamos todos los días a la mañana temprano y analizábamos la situación. Desde que se fue a Europa hablábamos cada 15 días, teniendo en cuenta los costos de las comunicaciones, pero lo extraño tremendamente porque me gustaría saber hoy su análisis sobre lo que sucede en Chile y, sobre todo, su opinión sobre lo que está pasando en los países árabes.

Acaba de renunciar el Presidente del Líbano, por una situación incontrolable, un alzamiento popular; la situación en Argelia, Irak, Hong Kong, Egipto. Y no se trata de una reedición de las primaveras árabes, en cada uno de estos países pesa la formación social histórica y sus características propias pero hay un hilo conductor que está ligando todo esto y ahí se necesita el análisis profundo y fino y ahí lo extraño mucho a Guillermo. Más allá que desde su calidad humana era un ser excepcional, de una fraternidad, una solidaridad, muy desprendido. Yo he tenido oportunidad de parar un mes entero en su casa cuando vivía en México y sé lo que es su solidaridad, su acogimiento, etc.

Al mismo tiempo que tenía esta personalidad solidaria, esta cultura exuberante, era un polemista feroz, alguien que no daba resquicios, son muy conocidas las disputas que tuvo acá con Atilio Borón o en México con el Subcomandante Marcos. Yo siempre he comentado que alguna vez le pregunté por qué. El a veces me mandaba algunos borradores y yo le sugería que limara algunas asperezas. Su compañera de toda la vida, Anaté, alguna vez me lo agradeció porque no quería que se metiera en esas polémicas tan largas que lo afectaban personalmente, porque cuando van subiendo los decibeles se afectan las cuestiones personales, pero debo decir que muy pocas veces tuve suerte, pero el intento estaba.

Alguna vez le pregunté por qué era tan duro, porque en eso tenía la dureza de los trotskistas de los ´40/´50, que para defenderse del estalinismo y el crecimiento del capitalismo se endurecían tremendamente incluso entre ellos, donde la pasión muchas veces primaba sobre la razón, hay fracturas que no se explican si no es por la pasión por encima del criterio de la razón. Yo le pregunté y no me dejó terminar y me dijo que él no hacía prisioneros, y con eso terminó la discusión. Tenía esas características, hay algo que se conoce poco, hay que leer el libro, porque ha sido militante de 4 continentes.

M.H.: A mí siempre me sorprendió su colaboración con el gobierno de Yemen en los ’80.

E.L.: Claro porque uno que proviene de la militancia trotskista sabe que se reparten militantes por todos los continentes, pero cuántos fueron a Yemen del Sur. Además él sin conocer el idioma formó un grupo, editó un diario que vaya a saber quién leería. Esto en la época de la República socialista de Yemen del Sur a principios de los años ´80.

M.H.: Y tiene una intervención en la construcción de la televisión pública de Yemen.

E.L.: Sí. Era formidable. Hay que leer las anécdotas de cuando fue a militar a Brasil, que vivía con un boxeador y aprendió a boxear con él. El sumun es lo de Libia, hicieron un comité en Europa, y fueron en un barco lleno de italianos y otra gente a Libia cuando derribaron el avión en el que murió un hijo de Kadafi. Ellos iban en plan de apoyo democrático pero no en apoyo a Kadafi que ya no era el mismo de los orígenes. Pero los pusieron a desfilar, y a todos les dieron una remera con la imagen de Kadafi, y ellos recortaron la imagen y desfilaron con una camiseta con un agujero en el centro. Ese era Guillermo.

M.H.: También su participación en la fundación de Refundación Comunista en Italia.

E.L.: Después de Italia se fue a México y lo expulsaron.

M.H.: Miembro de la Academia Nacional de la Ciencia en México.

E.L.: Eso vino después de la expulsión. Los extranjeros no pueden intervenir en la política interna, por eso fue expulsado un par de años y después volvió y durante muchos años escribió los editoriales de Uno más uno pero sin firmarlos, porque eran sobre política nacional y no podía hacerlo. Al mismo tiempo publicaba artículos internacionales que los firmaba.

M.H.: Él le daba poca importancia pero lo cierto es que los dos únicos cientistas sociales que formaban parte de la Academia de Ciencias de México eran él y Ana Poniatowska, la gran escritora mexicana de origen polaco.

E.L.: Dos extranjeros, aunque él siempre decía que era un argentino no practicante, que era un ciudadano del mundo.

M.H.: Ultimamente Guillermo se agitaba mucho para hablar, entonces necesariamente las entrevistas eran breves.

E.L.: El viaje fue un drama, porque en el avión no lo aceptaron, tuvo que viajar en barco, en el que no lo aceptaban si no llevaba un respirador, así que entre un grupo de amigos se hizo una colecta y le compramos el respirador portátil. Me escribió apenas llegó a Marsella donde reside su hijo. El viaje duró 23 días, no salió del camarote, que estaba en el subsuelo. Me dijo que no pensó que llegaba vivo y que estuvo a punto de tirarse al agua porque no soportaba más. Pero llegó vivo y duró casi 4 años más y activo, porque tenía problemas, estaba en silla de ruedas, casi no respiraba, pero la cabeza le funcionaba como siempre.

M.H.: Yo que lo conocí siendo un hombre mayor ya, siempre lo aprecié mucho porque colaboró mucho conmigo en la pequeña editorial Metrópolis. Escribió varios prólogos y trabajos escritos que prestigian la editorial. Los aportes que ha hecho Guillermo fueron muy importantes, inclusive su presencia física en la presentación del libro que sacamos en oportunidad de cumplirse el primer año de la muerte del Comandante Chávez en el Bauen. Guillermo participó personalmente de esa presentación y es de esos pequeños lujos que uno se da en la vida.

Eduardo, ¿Cómo viste las elecciones y la situación en general? Creo que hay que hablar de una serie de acontecimientos, por las situaciones que se viven en Ecuador, Chile, Perú, la elección del Frente Amplio, el golpe de Estado en Bolivia. Todo un cuadro.

Entramos en un nuevo período político

E.L.: Inclusive podemos incorporar la situación de Hong Kong, de Líbano, que acaba de caer el gobierno, Argelia. Hay un reguero de reacciones que en general son en contra de la política neoliberal y habría que ver si los resultados electorales en Argentina, de un modo distinto no expresan lo mismo. Nosotros ahora entramos en un nuevo período político, que como todo cambio va a generar continuidades y rupturas, en una situación muy compleja en términos económicos.

La crisis no es tan profunda como en 2001 pero tiene algunos elementos más dificultosos que los de ese momento. Tomando un solo caso, el de la devaluación, hubo una macro devaluación de 3.1/4.1 con Duhalde y después se paró, ahora estamos en una devaluación desde abril del año pasado, continúa y los precios aumentan todas las semanas, no hay estabilidad, no hay precios de referencia.

M.H.: Me sorprendió mucho a mi vuelta de Brasil el aumento de los precios, después de haber estado 17 días, por ejemplo, el caso de la manteca y las bananas.

E.L.: Y siguen cambiando, hay remarcaciones del 10/15%. Puede ser que todo sea un adelanto frente al acuerdo de precios y salarios, al menos así se está proponiendo. Este es el marco, una situación al borde de la hiperinflación, en un país en el que prácticamente no tenemos moneda, nadie quiere tener 10 pesos en el bolsillo, los gastás en algo o te comprás dólares.

Estamos en un default selectivo pero vamos a un default completo. No hay que olvidarse que cuando Argentina fue al FMI era porque no podía pagar los vencimientos en manos de los privados, ahora no puede pagar ni los de los privados ni los del FMI. Entonces la situación es muy compleja.

En ese sentido las elecciones confirmaron lo que todo el mundo presumía, que los Fernández iban a ganar en primera vuelta. La sorpresa fue que el macrismo sacó el 40% de los votos, si le sumás a los otros dos trogloditas, Espert y Gómez Centurión, están en un 44% y va a tener una bancada en diputados superior, 9 más de los que tenía hasta ahora. Yo no sé si con esto el próximo oficialismo va a tener quórum propio o va a tener que negociar para tenerlo, entonces el peso de la derecha neoliberal va a ser muy fuerte. El macrismo se va pero no se va.

Todos creíamos que Mauricio Macri se iba a retirar del todo de la política. Pero no, como la pincharon del todo a Vidal, la sacaron del juego, queda como referencia de la oposición. Es otra novedad.

M.H.: Leía en Resumen Latinoamericano, a un analista informático que sostiene que hubo robo de votos. En una pequeña proporción pero que podría modificar alguna legislatura y algunas intendencias.

E.L.: Dicen que Macri recuperó 2.3 millones de votos y que Fernández aumentó solo 270.000. El FITU perdió de las PASO 161.000 votos, pero además están los otros 160.000 del MAS, si sumas son 320.000 votos, y esos votos no pueden haber ido a Macri, han ido a los Fernández, porque ni siquiera el voto en blanco creció. Algo raro hay.

En esta polarización se llevaron puesta la candidatura del FITU a Presidente, no así a Diputados que más o menos están en 750.000 votos. Incluso a Myriam Bregman le faltaron 8.000 votos; una vez más el papel de Luis Zamora fue perjudicar a otro sector de izquierda.

Si Macri aparece por un lado, en el reducido margen de la izquierda la que aparece como la figura predominante es Myriam Bregman. Su presencia política supera a su partido e incluso al FITU, va mucho más allá.

Las elecciones dan eso, en este marco de crisis hay algunas cosas que favorecen a Fernández, el conjunto de las clases dominantes están muy preocupadas por la profundidad de la crisis, tienen muy presente el 2001, tienen presente el 18 y 19 de diciembre de 2017 también.

Ayer mismo en un programa televisivo había uno de estos neoliberales profundos que decía que hay que meterle al gasto público y eso son las jubilaciones y pensiones, cosa que desde el punto de vista matemático es cierto, y otro le dijo que no se olvide que la última vez hubo 200 toneladas de escombros en el Congreso. Y después está el reflejo de Chile. Eso le da fortaleza en la negociación a Alberto Fernández.

Por otro lado es cierto que el contexto internacional no es el mismo, pero cuando asumen Duhalde y Lavagna, la soja estaba a 230 dólares por tonelada, hoy está a 330, el gran salto de la soja fue de 2007 en adelante, por eso en 2008 sale la Resolución 125. Desde ese punto de vista no está tan mal, el dólar no está tan atrasado como en 2015. Macri ha tenido éxito en el ajuste porque el aumento de las tarifas ha sido feroz y la población lo tiene asimilado, la gente se queja cuando va a pagar, pero las paga. Ya no hay nadie, salvo Del Caño, que plantee retrotraer las tarifas. El tema es cómo hacer para desdolarizarlas.

Por otro lado los salarios y las jubilaciones han perdido un 20%. Todo eso es un plafón para Fernández. Pero está el tema de la deuda que es el tema central a resolver, a fin de noviembre va a estar acá Eric Toussaint a quien le has publicado el libro Sistema deuda que en este momento vale la pena releer, porque la salida uruguaya, portuguesa, ucraniana, todas fueron precedidas por un ajuste feroz, inclusive en Uruguay, y no se han recuperado todavía porque en Uruguay la vida es más cara que en la Argentina.

Cómo hacer esto de renegociar la deuda, porque a nadie se le ocurre no pagarla o suspender los pagos para investigarla, a pesar de que la deuda absorbida por Macri tiene mucho para investigar. Las maniobras de Sturzenegger cuando era presidente del Banco Central y que se perdieron 14.000 millones de dólares, son para investigar. Esos datos están.

Todo el argumento del kirchnerismo para no investigar en su época, era que las huellas habían sido borradas por el canje, el megacanje y las operaciones blindadas. Pero ahora las huellas están. Christine Lagarde le dijo a Macri que en el BCRA no hay transparencia y a los 15 días lo echaron a Caputo. El bono a cien años. ¿Cuál eran las razones de emitirlo? Porque la tasa no era barata, era del 8%. Quiere decir que en los 10 primeros años recuperan el capital y en los siguientes «papita pal loro».

M.H.: En días pasados, en broma, comentábamos con compañeros y amigos de fútbol, suelo ir a ver fútbol a un bar de Rioja y San Juan, no vaya a ser que se incendie el Banco Central y se pierdan algunos papeles. Y se incendió el Banco Nación. Tuvieron que evacuar a los 4.000 empleados de la Casa central. Yo creo que los datos están, quiénes fueron los que compraron dólares, más allá de que los den a conocer.

E.L.: Está todo. Hay tres fondos de inversión, el Templeton, Black Rock y otro que no recuerdo el nombre que tienen relación con Caputo, no Luis, sino el gran amigo de Macri, Nicolás.

M.H.: En el tema de la deuda hay que tener en cuenta otro factor, que ya lo deben haber analizado, cuando se debe tanta plata hay una fortaleza del deudor también. En este momento el FMI agotó su capacidad de préstamo en la Argentina.

E.L.: Es muy importante analizar eso porque hay una disputa muy fuerte entre Washington y Wall Street, entre el FMI y los Fondos de inversión. El FMI dice «ustedes tienen que aceptar una quita del 40%». Los Fondos dicen que es mucho, que puede ser de un 20%. Pero los Fondos de inversión dicen que la responsabilidad es del FMI, entonces que también el FMI tiene que hacer una quita, porque si los Fondos no hacen una quita el FMI no cobra, pero si el FMI no cobra ellos tampoco.

M.H.: Es importante lo que decías de la presencia de Toussaint porque aclararía mucho la temática que aborda que es la de las «deudas odiosas» donde el acreedor, conociendo que el deudor no puede pagar, le presta igual.

E.L.: Ese sería el caso del FMI. El primer acuerdo dura dos meses, cómo no va a saber eso.

M.H.: Además tenía una auditoría en el BCRA que operaba a diario.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.