Recomiendo:
0

Hacia una alternativa amplia en medio de la crisis

Fuentes: Rebelión

La reciente movilización de los trabajadores del sector público constituyó una respuesta contundente a la crisis, sobre todo porque se logró un triunfo que evitó en parte que las consecuencias de la crisis cayeran sobre los hombros de los trabajadores. Esta movilización en ha sido el ensayo general para las luchas del próximo año, cuando […]

La reciente movilización de los trabajadores del sector público constituyó una respuesta contundente a la crisis, sobre todo porque se logró un triunfo que evitó en parte que las consecuencias de la crisis cayeran sobre los hombros de los trabajadores.

Esta movilización en ha sido el ensayo general para las luchas del próximo año, cuando las repercusiones de la crisis van a ser mucho más graves. Hay que mantener muy en alto este espíritu de unidad que se ha logrado, con un paro que fue creciendo y creciendo. Si no se hubiera llegado a un acuerdo, si la Cámara de Diputados no aprobaba el 10%, se iban a plegar los transportistas y otros sectores, podría haberse llegado a un paro general de actividades.

La Concertación está cruzada por una contradicción interna. Por una parte quienes pretenden dar solución a la crisis en el marco del neoliberalismo y otro sector que se da cuenta que esto es imposible y que las cosas no pueden seguir como están.

Pocos días antes de salir para Europa fuimos a conversar, una delegación del PC con personeros del ministerio de Hacienda, de Economía, del Banco Central y de CORFO y hablamos precisamente del tema del reajuste al sector público. Una de las cosas que les dijimos es que el gobierno no podía entregar un reajuste menor al alza del costo de la vida, que esto iba a ser un error político garrafal, y que lo mejor sería que negociara directamente por lo menos un reajuste igual al alza del costo de la vida.

El hecho es que se dio tal como dijimos y trataron de descargar los efectos de la crisis en los hombros de los trabajadores. Por eso esa oferta menor del 5% que significaba birlar casi el 10% del poder adquisitivo de los trabajadores y eso era imposible. Es imposible pretender que las cosas sigan así.

La derecha al acecho

Si la Concertación no cambia su modo de hacer política o si no presenta al país un programa de nuevo tipo con transformaciones tanto económicas como sociales, va a ser difícil que retenga el gobierno.

Se puede dar la paradoja -en eso la derecha es muy oportunista- que quienes introdujeron este sistema a sangre y fuego ahora puedan ganar el gobierno por la crisis que ellos mismos instalaron. No sé como calificarlo pero todo lo que debe ocurrir en Chile, es decir los cambios profundos en temas económicos, sociales y políticos que son necesarios, no los va a producir la derecha. Va a llegar al gobierno para tratar de salvaguardar lo mejor posible un sistema que a ellos y a los socios que representan les han dado inmensas utilidades, no sólo en Chile sino en el mundo entero.

La Concertación ha resultado más papista que el Papa, teniendo todas las posibilidades y recursos que tuvieron a disposición para industrializar al país, para instalar nuevos hospitales, escuelas, viviendas, para llevar adelante una política de desarrollo, medidas contra cíclicas como las llaman, no lo han hecho y siguen aferrados a recetas norteamericanas que no quieren, de ninguna manera, que cambie el sistema y Bush, en los estertores de su mandato, ha estado haciendo llamamientos para salvar el sistema.

Respecto a las declaraciones del ex presidente Patricio Aylwin al Mercurio del domingo pasado, me parece que está medio «gagá». Si el PC es «nostálgico», por qué miran tanto hacia nosotros cuando vienen las elecciones presidenciales.

Acordémonos que Aylwin ,en los tiempos de la UP, fue uno de los responsables, no del golpe, pero si de abrirle camino entonces, por qué nos extrañamos que hoy día diga: qué importa que gobierne la derecha. El fue quien le dio las espaldas al programa original del primer gobierno de la Concertación, un programa de transformaciones profundas por el cual nosotros votamos, votó toda la gente que votó por el No.

Aylwin fue el que empezó a darle la espalda y finalmente lo botó al tacho de la basura y empezó a avanzar hacia un sistema neoliberal olvidándose de todo lo que habían prometido al pueblo.

Voto de chilenos en el exterior

En Estocolmo, lo primero que hicimos fue entrevistarnos con el embajador chileno en Suecia. Fuimos con un grupo bastante numeroso de chilenos de distintas organizaciones muy representativas y le planteamos al embajador que queríamos que hubiera un mayor involucramiento del gobierno chileno en la lucha por lograr que el derecho a voto de los chilenos se hiciera realidad en los próximos meses.

Tuvimos una muy buena acogida por parte del embajador que se comprometió a dar todas las facilidades para que los chilenos residentes puedan encontrarse, facilitar los encuentros para todo tipo de conversaciones, para los contactos con el gobierno, etc.

Le hemos planteado al exilio chileno en Suecia que se ponga a la cabeza de esta lucha. Se disponen no sólo a trabajar para que el exilio chileno en Suecia sea uno de los que le ponga más empeño por el voto en el exterior, sino que van a comunicarse con el resto del exilo chileno en el mundo entero.

Candidato y programa único

En Estocolmo hay una alta compresión de la mayoría de los chilenos de la política que estamos llevando adelante y no puse el acento tanto en las presidenciales sino en el tema de la exclusión y la necesidad que tenemos de terminar con ella en Chile.

Han quedado claros los objetivos que nosotros tenemos: Uno, la exclusión en el Parlamento; segundo, la necesidad de construir una alternativa de izquierda al fragor de la lucha presidencial y aquí es donde aparecen estos cuatro candidatos hasta ahora que tienen una postura de alternativa al sistema neoliberal. Lo tercero es producir convergencias para efectuar cambios fundamentales en el país.

En esta convergencia nosotros le damos gran importancia al papel que jueguen las organizaciones sindicales, la CUT y todas las organizaciones sociales del país y a los movimientos sociales como lo que han hecho recientemente los trabajadores del Estado en Chile y lo que hicieron los trabajadores del cobre y los forestales y otros en una movilización que va a ir en crescendo en Chile y va a ir provocando las condiciones para llevar adelante los cambios que se necesitan.

La Concertación aparece bastante desgastada, no sé si con dos ex Presidentes van a poder dar respuesta a lo que el país requiere: Ricardo Lagos que tiene a su haber el Transantiago, EFE, el tema de obras públicas y no sé que otros temas. Frei también ha tenido problemas, hay que recordar el acuerdo con Argentina para crear este gran territorio donde se están realizando grandes inversiones como Pascua Lama que contamina el país y el tratado del gas con Argentina que tantos dolores de cabeza nos ha dado. También que estuvo involucrado en traer a Pinochet cuando estaba detenido en Londres.

La derecha se siente cómoda con Piñera y quisiera que la UDI pronto se pronunciara para tener más tiempo que la Concertación. Pero tampoco está segura de ganar porque en la elección municipal -si uno analiza con cuidado los resultados- la derecha mantuvo y hasta bajó un poco la votación en la elección de concejales, que es la que mide la fortaleza electoral de los partidos.

Tiene una personalidad que se perfila mejor en las encuestas pero eso está por verse, no es la primera vez que la derecha va en primer lugar en las encuestas en este país, si no pregúntenle a Lavín.

En la izquierda está muy bien lo que está pasando. Se ve que se ha superado el Juntos Podemos en cuanto a las fuerzas que quieren venir a un acuerdo alternativo al neoliberalismo. Está clara la situación de Arrate que todavía está dentro de la Concertación. Yo creo que hay que esperar un poco porque las situaciones todavía se están definiendo.

Nosotros vamos a tener un pleno del Comité Central el 17 o 18 de diciembre en que vamos a avanzar sobre este tema. Pero yo no forzaría a que tenemos que hacer tal cosa sin estar de acuerdo en un programa único, un candidato único.

No quiero hacer de abogado del diablo pero, por poner un caso, la Nueva Izquierda dice que tiene que votar en primarias también la gente sin derecho a voto en estas abiertas, pero, yo diría que si miramos las elecciones en Estados Unidos, con el fenómeno Obama aumentó muchísimo el número de electores y sobre todo jóvenes que se entusiasmaron pero que se inscribieron para ir a votar.

¿No será este un motivo, un aliciente de hacer primarias para insistir que se inscriban los jóvenes y después voten? No al revés, porque después pueden decir, muy bien, yo elegí a un candidato pero igualmente no voto.

No es que me niegue a las primarias abiertas, es un razonamiento en voz alta nada más, pero creo que tenemos que sentarnos a conversar y converger en una opinión única y en esto tenemos que ser muy transparentes y todos los candidatos tenemos que actuar con la misma generosidad.

Espero que lleguemos a un acuerdo, ese es nuestro objetivo, no le temo a ninguna fórmula para llegar a un candidato y programa únicos, y creo que se están abriendo las posibilidades para tener una alternativa importante en el país.

– Guillermo Teillier es el presidente del Partido Comunista de Chile.