En entrevista, el senador de la república, Iván Cepeda explica el momento actual de los diálogos de la Habana, del inicio de las conversaciones con el ELN y analiza la propuesta de la ultraderecha de llamar a la resistencia civil contra la paz en Colombia. -Prensa Alternativa: ¿Cuál es la actual situación de los diálogos […]
En entrevista, el senador de la república, Iván Cepeda explica el momento actual de los diálogos de la Habana, del inicio de las conversaciones con el ELN y analiza la propuesta de la ultraderecha de llamar a la resistencia civil contra la paz en Colombia.
-Prensa Alternativa: ¿Cuál es la actual situación de los diálogos de La Habana y del inicio de las negociaciones del gobierno con el ELN?
-Iván Cepeda (IC): En el caso de los diálogos con las FARC-EP se está a portas del cierre de la segunda fase del proceso de paz. Hubo una primera fase exploratoria, ahora estamos en la fase de los dialogas, las conversaciones y los acuerdos. Ya se está concluyendo, ya se están discutiendo asuntos que tienen que ver con el último punto de la agenda y si bien quedan algunos pendientes, es previsible que muy pronto se llegue a una culminación exitosa de esos diálogos. Luego de ello, comenzará la fase de implementación y cumplimiento de los acuerdos; la fase más difícil probablemente. Ahora, con ELN se salió de la fase de exploración, se ha acordado una agenda y estamos a la espera de que muy pronto se instale una mesa para que comiencen las conversaciones oficiales y se lleguen a acuerdos.
-P.A.: El paramilitarismo ha venido en aumento. ¿Qué plantea el gobierno nacional para acabar con estas estructuras armadas ilegales de ultraderecha?
-I.C: El paramilitarismo es un peligro real. El paramilitarismo no es una pesadilla, ni una imaginación que ha tenido alguien en Colombia. El paramilitarismo ha sido el peor enemigo de la paz. Cuando se ha intentado, siempre se ha interpuesto como un obstáculo. Por supuesto es necesario una acción contundente, lo que hemos pedido al gobierno es que reconozca ese hecho y que actúe en consecuencia. Nosotros creemos que hay sectores de las fuerzas militares, no digo las fuerzas militares en general porque yo estoy convencido de que la mayoría de los miembros de las fuerzas militares y de policía respaldan el procesos de paz, pero quedan algunos sectores que si están en una lógica de no permitir que se llegue a la paz, y eso hay que señalarlo y hay que desenmascararlo. También hay sectores de gente que ha despojado tierras, que quiere mantener el despojo a punta de grupos armados ilegales
-P.A: ¿Como ve el blindaje al que han llegado el Gobierno y las FARC_EP Para proteger los acuerdos de La Habana?
-I.C/ Muy necesario, es parte de la garantía de que se llegue a la paz. Sino quedan blindados los acuerdos cualquiera puede venir el día de mañana y decir «esto no me gusta, este acuerdo está mal hecho, es un acuerdo que debe ser borrado o alterado», y entonces estaríamos ante una situación de inestabilidad que pondría en riesgo la paz. Ahora, por supuesto, esto no significa no que deba haber una refrendación popular. Es evidente que vamos a tener que salir a votar en una consulta popular o como quiera llamarse para respaldar los acuerdos.
-P.A: ¿Cuál es el objetivo de la ultraderecha de llamar a la resistencia civil contra la paz en Colombia?
-I.C: Mimetizarse, intentar presentarse como luchadora por alguna causa justa. Pero a nadie la cabe en la cabeza que luchar contra la paz sea una acción noble, es decir, uno no puede decir que luchar contra los derechos humanos, contra la libertad, contra la igualdad, sean causas nobles. Luchar por la guerra es una causa perversa, entonces, como es una causa perversa, ahora la quieren empaquetar con una túnica blanca. Eso no es coherente, es muy propio del uribismo ponerle nombre y etiquetas a sus peores ideas y sus peores propósitos.
Fuente original: http://prensalternativa.