De acuerdo a las cifras conocidas, la izquierda «santista» (como se previó), le dio el precario triunfo electoral a Humberto de La Calle Lombana en la consulta liberal, más los votos de algunos gamonales que al final movieron sus maquinarias en algunos departamentos (Huila, Valle, Antioquia). Es precario porque los 740.000 votos representan el 2% […]
De acuerdo a las cifras conocidas, la izquierda «santista» (como se previó), le dio el precario triunfo electoral a Humberto de La Calle Lombana en la consulta liberal, más los votos de algunos gamonales que al final movieron sus maquinarias en algunos departamentos (Huila, Valle, Antioquia).
Es precario porque los 740.000 votos representan el 2% de participación y se obtuvo solo la mitad de los votos que logró el partido liberal hace 8 años en una consulta similar (2009).
Algunos creen que ese hecho impedirá que los políticos corruptos del liberalismo (que son casi todos) se vayan para donde Vargas Lleras. Eso es una ilusión.
Es el error fundamental de quienes creen que la bandera de la «paz» es el tema principal que mueve la política en Colombia cuando la realidad muestra que la gente no cree en ese «cuento».
Pero no. La lucha en 2018 se centrará en desenmascarar a los corruptos, tanto los que se oponen al fin negociado del conflicto armado (Uribe-Vargas) como a quienes quieren utilizar demagógicamente el tema de la paz para engañar.
Es muy bueno que los políticos liberales corruptos se muestren como lo que son y se vayan finalmente con Vargas Lleras. Ya es hora de derrotarlos plena y frenteramente.
De la Calle hará llave electoral con Clara López y tratarán de mover a la izquierda santista, a la sombra y «dirección» de César Gaviria (¡Qué saperoco!).
Es lo mismo que hicieron para obtener la auto-derrota del Plebiscito (02.10.2016). No aprenden.
Menos mal que existe la Coalición Colombia (Claudia, Fajardo, Robledo), que necesariamente se convertirá en el referente de una lucha abierta contra la corrupción político-administrativa y por el cumplimiento de los acuerdos con las Farc, sin demagogias ni triunfalismos.
Fuente original: https://aranandoelcieloyarando