Recomiendo:
0

En los últimos días han asesinado a tres dirigentes y un líder indígena

La Centra Unitaria de Trabajadores denuncia una vez más el exterminio de la dirigencia sindical colombiana

Fuentes: Rebanadas de Realidad

La Central Unitaria de Trabajadores de Colombia ha denunciado reiterativamente el exterminio que cunde contra su dirigencia sindical y, por tal motivo, va a llevar a cabo entre el 15 y 18 de septiembre lo que hemos llamado el «SOS del sindicalismo mundial frente a la aniquilación del sindicalismo colombiano». El propósito del SOS es […]

La Central Unitaria de Trabajadores de Colombia ha denunciado reiterativamente el exterminio que cunde contra su dirigencia sindical y, por tal motivo, va a llevar a cabo entre el 15 y 18 de septiembre lo que hemos llamado el «SOS del sindicalismo mundial frente a la aniquilación del sindicalismo colombiano».

El propósito del SOS es el de frenar la ola de terror que se manifiesta en el constante asesinado de nuestros dirigentes sociales. En los últimos días han denunciado el asesinato de tres dirigentes sindicales de organizaciones filiales a la CUT: LEONONEL GOYENECHE, Tesorero de la CUT, Subdirectiva Arauca; JORGE PRIETO, Presidente de ANTHOC, Seccional Arauca y ALIRIO MARTÍNEZ, Presidente del Sindicato Agrícola y Dirigente de la ANUC. También la retención del Presidente de la CUT Arauca, SAMUEL MORALES y RAQUEL CASTRO, de ASEDAR, hechos que muestran la continuidad de la política de exterminio contra nosotros.

Ligado a lo anterior, denuncian también el asesinato del dirigente indígena, FREDDY ARIAS ARIAS, asesinado por los paramilitares, en Valledupar, Cesar, hecho que se suma a la ola de terror que vive el sindicalismo y el movimiento popular colombiano.

La situación que se presentó en Arauca fue denunciada el día 4 de agosto del presente año, a las autoridades militares, al Ministerio del Interior, a la Defensoría del Pueblo y a los organismos de derechos humanos, por parte del sindicalismo de Arauca, en el que se informaba de la puesta en práctica del llamado plan pistola, para atentar contra la dirigencia sindical, por parte de los grupos paramilitares de ese Departamento.

La situación anterior ha llevado a la CUT a plantearle al Gobierno las siguientes exigencias:

Que se inicie la investigación para que se esclarezcan los hechos que motivaron el asesinato de los compañeros, pero que ésta la hagan los organismos de Derechos Humanos de Bogotá.

Que nos den garantías a los dirigentes sindicales para asistir al sepelio de los dirigentes sindicales asesinados.

Que el gobierno se cerciore sobre la veracidad de la información antes de expresarla y no ponga en tela de juicio la actividad sindical como aconteció en el día de hoy.

En medio del dolor que embarga al movimiento sindical, la CUT reafirma la lucha por la defensa de los intereses de los trabajadores y en procura de un verdadero Estado Social de Derecho en el que la diferencia no sea acallada con el asesinato.