El Senado aprobó una serie de reformas a la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet pero mantuvo el sistema binominal que no permite a la izquierda tener representación parlamentaria.Entre los cambios introducidos a la Carta Magna, aprobados en primera instancia por la Cámara de Diputados, se encuentra la supresión de los nueve cargos […]
El Senado aprobó una serie de reformas a la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet pero mantuvo el sistema binominal que no permite a la izquierda tener representación parlamentaria.
Entre los cambios introducidos a la Carta Magna, aprobados en primera instancia por la Cámara de Diputados, se encuentra la supresión de los nueve cargos de senadores designados o institucionales.
Esos legisladores llegaron al Parlamento por una designación aprobada durante el régimen de Pinochet (1973-1990) y no mediante el voto popular.
La bancada de senadores está compuesta por cuatro representantes castrenses, que son altos jefes retirados del Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea y la policía militarizada de Carabineros.
Otras modificaciones aprobadas son la rebaja del período presidencial de seis a cuatro años y la eliminación de los cargos de senadores vitalicios que la Constitución de Pinochet reservó para los ex presidentes.
El único vigente es el del otrora mandatario demócrata cristiano Eduardo Frei Ruiz-Tagle (1994-2000).
Sistema binominal se mantiene
Una tarea pendiente que dejaron los senadores, fue terminar con el sistema binominal, reivindicación y aspiración de inmensa mayoría de los chilenos, en especial en la izquierda chilena.
En marzo pasado, una propuesta del Partido Comunista (PC) para cambiar este tipo de proceso fue introducida al Parlamento por el presidente de la Cámara Baja, Gabriel Ascencio.
La presentación tuvo lugar tras un encuentro del diputado democristiano con el presidente del PC, Guillermo Teillier, y bajo su compromiso de llevar la iniciativa al Parlamento, aún cuando los partidos de gobierno no cuentan con los votos para modificarla.
Tal propuesta buscaba una distribución proporcional y no excluyente, que entregue oportunidad a la izquierda y a grupos laborales de estar representados, aumentar el número de diputados y senadores, y aprobar el voto de los chilenos en el exterior.
Según el proyecto presentado por el PC, se buscaba establecer un sistema proporcional que permita tener una composición de 150 diputados y 50 senadores, así como eliminar la inhabilidad que actualmente enfrentan los dirigentes gremiales y vecinales para formar parte del Legislativo.
Con la actual legislación, los partidos de la extrema derecha opositora, con un poco más del 34 por ciento de los votos, pueden disponer del 50 por ciento de los parlamentarios en ambas cámaras, lo que hace virtualmente imposible cualquier cambio constitucional.
En tanto diversas personalidades del ambito cultural y político ya se habían manifestado en contra del binominalismo.
Reacciones en el mundo cultural y político
La periodista y escritora Patricia Verdugo dijo hace algunas semanas que «hay mucha gente en el gobierno y en la Concertación, que no quiere cambiar el sistema binominal».
Sostuvo que el sistema debe aceptar al bloque Juntos Podemos y darle un espacio en el Parlamento, «pero eso es a costa de que la Concertación y la derecha pierdan sus espacios de poder, pero no lo van a permitir».
«Se debe aceptar a Juntos Podemos y eliminar el sistema binominal y volver al sistema electoral proporcional», pero aseguró que lo que más le conviene al oficialismo es mantener el binominalismo.
Recordó que con el triunfo obtenido por la izquierda en las elecciones municipales del año pasado, donde logró más del 10 de los votos. Los partidos Comunista y Humanista, pasan a ser «un actor político nacional» y para ello ejemplificó como los partidos oficialistas iniciaron conversaciones con la izquierda para contar con su apoyo.
En tanto, el multimillonario candidato presidencial, Sebastián Piñera, se manifestó contrario al injusto mecanismo electoral.
Piñera aclaró que en la década de los 90, fue «la propia UDI la que lo calificó como perverso (al sistema binominal) y me parece mal que algunos hoy día adoren lo que ayer quemaron y hoy quieran quemar lo que ayer adoraron».
Por su parte, el diputado del gobernante Partido Socialista (PS) Carlos Montes señaló sistema es preciso «revisarlo profundamente porque afecta a la democracia chilena. El presidente (Ricardo) Lagos ha sido el más contundente al respecto».
Si la derecha quisiera cambiarlo lo podemos aprobar en una semana porque se ha presentado varias veces y ellos lo han rechazado, subrayó.
Las enmiendas deben ser ratificadas el próximo 16 de agosto por el pleno del Congreso, en una sesión conjunta de diputados y senadores.