Un paro total de actividades por parte 28 mil de los trabajadores contratistas y subcontratistas de Codelco comenzó ayer con movilizaciones en las divisiones de El Salvador, Andina, El Teniente y Ventana. Cristián Cuevas, vocero de la Confederación Nacional de Trabajadores Contratistas de la Gran Minería del Cobre, informó que se encuentra ningún contratista trabajando, ni […]
Un paro total de actividades por parte 28 mil de los trabajadores contratistas y subcontratistas de Codelco comenzó ayer con movilizaciones en las divisiones de El Salvador, Andina, El Teniente y Ventana.
Cristián Cuevas, vocero de la Confederación Nacional de Trabajadores Contratistas de la Gran Minería del Cobre, informó que se encuentra ningún contratista trabajando, ni los trabajadores de planta debido a que los caminos de acceso a las diferentes divisiones se encuentran bloqueados con barricadas y piedras.
Cuevas aseguró que en Calama han sido objeto de violentas represiones y que el «Plan B» que tienen estipulado es paralizar el 100 por ciento de Chuquicamata. Agregó que las divisiones se encuentran funcionando con sus turnos de noche, situación que no podría extenderse más allá de 24 horas.
Los trabajadores subcontratistas buscan terminar con las diferencias laborales que existen con los trabajadores de planta, que se cumpla la ley de subcontratación y que se les dé el mismo bono que reciben los otros por gestión, el cual ascendería a cerca de 2,4 millones de pesos anuales.
Si bien los trabajadores mantuvieron contacto con el Gobierno y la empresa a través de una mesa de negociación, la semana pasada las conversaciones fueron congeladas al no llegar a acuerdo con la empresa.
En Rancagua, se tomaron el acceso al mineral El Teniente, impidiendo el acceso de funcionarios.
En diversos puntos de la carretera del Cobre colocaron barricadas.
Afuera de la división El Teniente, en la Sexta Región, hay numerosos buses detenidos ya que los huelguistas cortaron las correas de distribución para impedir su avance.
El presidente de los trabajadors subcontratados de Rancagua, Jorge Peña, insistió en que los empleados demandan un «plan básico de salud, plan de vivienda, de educación para todos los trabajadores y sus familias y el estricto cumplimiento de la ley de subcontratación».