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La Costa Nostra: reseña de una condena anunciada

Fuentes: Rebelión

Este libro, escrito por la periodista Laura Ardila Arrieta lo compré en una librería cercana a la estación Museo del Oro en Bogotá. Lo compré especialmente para realizar esta reseña, ya que hace un tiempo conocí de primera mano los actos delictivos del Clan Char y me parecieron tan aberrantes que RCN se esta tardando […]

Este libro, escrito por la periodista Laura Ardila Arrieta lo compré en una librería cercana a la estación Museo del Oro en Bogotá. Lo compré especialmente para realizar esta reseña, ya que hace un tiempo conocí de primera mano los actos delictivos del Clan Char y me parecieron tan aberrantes que RCN se esta tardando en sacar una novela, por supuesto, con su propia versión de la historia, les propongo un nombre: Crónica de una condena anunciada. 

La Costa Nostra es la historia no autorizada de los Char, el clan político más poderoso de Colombia, y aprovechando que se viene el Carnaval de Barranquilla, y que me han vetado para trabajar en cualquiera de sus empresas, por lo dicho aquí, vamos hacerle ruido desde la fría pa que sepan que hay mucha gente esperando justicia, y soñamos con verlos algún día ante la palestra de un juzgado por corruptos.

Ahora bien, esta investigación de las que les vengo hablar, se hizo mucho más conocida gracias a que la editorial Planeta, luego de tener todo preparado para publicarla ,decide, «extrañamente», echarse para atrás a último momento. De manera oficial el pasado 4 de julio de 2023 Laura Ardila tiene una reunión con al señora Mariana Marczuk, directora editorial de Planeta para la región andina, en la que se le comunica que la editorial no va asumir una demanda por daños morales, y que esta determinación es una decisión del departamento legal de la empresa. Dicho en pocas palabras: los Char consiguieron intimidar a la editorial para que la investigación no se publicara, a pesar de que la mismísima directora se rindiera en elogios ante la investigación. 

Aún así, y luego de muchos esfuerzos y afectos, el libro sale a la luz según lo previsto gracias a una editorial independiente. Yo vi varias veces esa portada roja con una silueta de tiburón en los agaches del centro, incluso hasta en grandes medios de difusión. El objetivo, como dice la autora es: «llegar a la periferia colombiana, que es donde los ciudadanos conviven con poderes como los aquí descritos» Yo comparto este objetivo, aunque eso suponga poner la vida en peligro. Vamos a ello. 

Comencemos con lo más mediático para no aburrirlos ¿Les suena el apellido Merlano? Yo creo que sí, sin duda alguna este apellido es más conocido por Aida Merlano hija, y no tanto por Aida Merlano madre, debería ser al contrario; los contextualizo. 

El escandalo que produjo la fuga desde un segundo piso en una «cita odontológica» de Aida Merlano madre es bien conocida por el país, así como también las declaraciones que dio desde Venezuela luego de esta fuga tan estrafalaria. Lo cierto es que Aida Merlano madre fue la amante de la cara más visible del clan: Alex Char, y en esas declaraciones contó una historia de corrupción, traiciones y amores que dejo al descubierto las costuras del clan. Sin embargo, la que ha visibilizado este escandalo ha otros públicos es Aida Merlano hija, quien se catapulto en redes sociales gracias a lo que medianamente se supo por los medios tradicionales de lo que dijo Aida Merlano, su madre. 

Ahora bien: ¿Qué nos dice esta investigación  sobre este escandalo?  Lo más importante es la declaración de Aida Merlano madre, y si usted es chismoso o chismosa le recomiendo que la vea por YouTube, y luego lo invito a ver el video de la fuga, créanme, no tiene desperdicio. Aida Merlano fue condenada por corrupción y estuvo prisión por concierto para delinquir y posesión de armas. 

De boca de ella, de la amante de uno de los líderes de este clan, se supo que existe un entramado de corrupción entre los procesos de contratación publica con el estado y las empresas outsourcing de esa familia y amigos, en las que se captura ese recurso para financiar campañas políticas. Aida Merlano llego a ser electa congresista, gracias a la compra de votos, todo esto con el beneplácito de ese clan y la familia Gerlein (socios de clan Char). Que una de las integrantes mas importantes del clan los haya delatado, ya debería ser prueba suficiente, pero listo, hasta ahí vamos. Aida Merlano  es la piedra angular de esta investigación, y su testimonio puede ser crucial en el futuro. 

A propósito de Alex Char, En el sexto capitulo de la investigación aparece un poco de su historia. Este señor es conocido por ser el «Alcalde más bacán»  el «Alcalde de gorra» y fue electo nuevamente como alcalde de barranquilla por tercera vez. Este mismo «bacán» aparece involucrado con la familia Nule, ladrones de cuello blanco que obtuvieron licitaciones a punta de coimas, se robaron anticipos y falsificaron estados financieros en colaboración con Samuel Moreno (Ex- alcalde de Bogotá condenado por corrupción) para quebrar proyectos de infraestructura cruciales de la capital. En el año 2008, mientras defraudaban a Bogotá, y en medio de carnaval, el grupo Nule gana la adjudicación para recaudar los ingresos del sistema publico de transporte de Barranquilla: Transmetro. En este proyecto, los Nule fueron los únicos proponentes y para colmo el «Alcalde de gorra» resulto siendo parte de la junta directiva de Transmetro, según esta investigación en sólo este proyecto se lograron embolsillar hasta un billón de pesos del Estado. Ya lo decía mi abuela: Dime con quién andas y te diré quién eres. 

Según Laura Sarabia en la segunda alcaldía de Alex Char hubo la contratación más multimillonaria de la historia de barranquilla, donde sus aliados, sus amistades del Country Club utilizaron una modalidad «legal» para capturar recursos del Estado, conocida como «Crédito proveedor» donde se hace, en palabras sencillas, un préstamo al Estado por parte de un contratista privado para ejecutar el objeto del contrato y luego el Estado paga ese dinero al contratista con intereses. En esa época eran muy pocos los que tenía esa cantidad de capital para realizar un préstamo de esas características al Estado; y es así como se juntan los amigos del clan, y podríamos estar hablando de un retorno de más de dos mil millones de pesos por concepto de esa figura.  

El patrimonio neto de ese clan para el año 2023 es de alrededor de nueve billones de pesos, al menos eso es lo que declaran. Tanto Junior, el equipo de fútbol de sus amores, como las sucursales de supermercados Olímpica, llegando a medios radiales como Olímpica Estéreo han sido resultado de alianzas políticas con parapolíticos,  financiación irregular con dineros del narcotráfico, compra de votos y según Aida Merlano de mucha, pero mucha corrupción, en dónde están incluso vinculados con las coimas que repartió la multinacional Odebrecht a su llegada a Colombia. 

A lo bien que yo no sé mucho de código penal, pero estos son algunos delitos, tipificados  como enriquecimiento ilícito y concierto para delinquir, dos de los delitos por los que Arturo Char (Hijo menor del Clan) fue llamado a indagatoria ante la Corte Suprema de Justicia en febrero del año 2022. Pero lo que se sabe es poco, los medios tradicionales se han encargado de ocultar lo inocultable. 

Mientras tanto, la farsa de Barranquilla como la ciudad  más feliz del mundo puede ser comparada con las altas cifras de inseguridad alimentaria, donde menos del treinta por ciento de personas reportan tener para comer las tres comidas diarias, según estadísticas del DANE. Barranquilla vea de don se vea ha sido desfalcada, y la pregunta es: ¿Qué ha hecho la Fiscalía de Francisco Barbosa para evitar esto?  ¿Qué ha hecho la «mejor fiscalía de la historia»? hasta hora, absolutamente nada. 

Por ello Gustavo Petro adelantó la terna para elegir la nueva fiscal general en febrero de este año, ya que es urgente desempolvar esos folios archivados por Barbosa y su cúpula de lacayos como la vicefiscal Martha Mancera, arrodillados al poder que tienen estos clanes en las regiones. 

Para cambiar esto se necesita un recambio en el ámbito del poder judicial para que el entierro de Joselito Carnaval cada año, no sea un a triste metáfora del destino de una Barranquilla sumida en la pobreza y la desigualdad. Repitan conmigo, si siguen eligiendo a los Char, Barranquilla cada vez es Joselito, Joselito Carnaval, este año te acabaste para siempre, Joselito Carnaval, los volvieron a robar. 

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