En Medellín entre los días 11 y 12 de julio se llevó a el Foro de Alcaldes de la Cumbre Mundial de Ciudades (World Cities Summit 2019); es la primera ciudad latinoamericana en albergar este encuentro internacional, por ser la ciudad ganadora del Premio de urbanismo Lee Kuan Yew, distinción que obtuvo en el 2016. […]
En Medellín entre los días 11 y 12 de julio se llevó a el Foro de Alcaldes de la Cumbre Mundial de Ciudades (World Cities Summit 2019); es la primera ciudad latinoamericana en albergar este encuentro internacional, por ser la ciudad ganadora del Premio de urbanismo Lee Kuan Yew, distinción que obtuvo en el 2016.
En enero pasado, el Foro Económico Mundial realizado en Medellín, la designó como el Centro para la Cuarta Revolución Industrial al servicio de Latinoamérica; desde entonces el régimen incrementó la publicidad para lavar la desgasta imagen de la ciudad asociada mundialmente, como la sede de un muy violento Cartel de traficantes de cocaína.
Medellín tradicionalmente conocida por sus grandes bandas -no de músicos-, como la Oficina de Envigado, la Terraza, los Triana, la Silla, los Mondongueros, etc., quiere dejar de exporta mafias y sicarios [*], para ser sede de multinacionales tecnológicas… o sea, cambiar de unas manos mafiosas a otras, cambiar de una esclavitud a otra.
Vender unicornios de humo
En mayo, el Presidente Duque visitó Silicon Valley, la zona de San Francisco en los Estados Unidos, en la que se concentran varias de las empresas tecnológicas más importantes del mundo; allí recorrió las instalaciones de empresas como Apple, Cisco y Google; a su regreso a Colombia anunció que al país lo «va a convertir en el Silicon Valley de América Latina».
De fondo no se pretende recrear un Silicon Valley en Medellín, ni en ningún municipio de Colombia, pues esto implica inversión en investigación, educación, emprendimiento, equipos especializados e infraestructura, pero sabemos que esto no va a suceder, todo lo mencionado anteriormente no es ni ha sido prioridad de las clases dominantes y sus Gobiernos.
Lo real es que las políticas del Gobierno se fundan en aumentar impuestos a los ciudadanos, extender los beneficios tributarios a las multinacionales y recortar drásticamente los presupuestos de Gasto Social.
Colombia: la India de Latinoamérica
Pensar en Colombia como una potencia tecnológica no tiene sentido, si en primera instancia no suplen las necesidades de nuestro territorio, de nuestra gente; un país que piensa primero en resolverle los problemas a otros, está destinado a ser un «corral de esclavos del nuevo siglo».
Los intereses de las multinacionales tecnológicas, están buscando en Colombia una segunda India, país que es el mayor exportador de software del mundo, a costa de mantener muy precarias condiciones de trabajo, malos sueldos, entre otras, modelo que ha llegado a un punto de desgaste que obliga a las multinacionales ha trasladarse a otros países.
Según el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (MinTIC) en el 2019 Colombia tendría un déficit de profesionales en áreas tecnológicas de cerca de 70 mil empleados especialmente en desarrollo de software; por lo que han venido elevando exponencialmente los sueldos de los profesionales en estas áreas, situación similar que vivió la India entre los años 2.000 y 2.005, que propicio la creación de universidades lideradas por Microsoft y otras multinacionales de tecnología.
No es coincidencia que entre el 2018 y 2019 han ocurrido numerosos encuentros del Gobierno con Apple, Google, Amazon y otras multinacionales de tecnología, donde han realizado convenios para que estas empresas asuman la formación de jóvenes en estas áreas, para obtener mano de obra calificada a bajo costo.
Fortalecer la educación propia
Las empresas de comunicación al servicio de la élite nos venden la injerencia de las multinacionales, como una gran ayuda para resolver las carencias tecnológicas de nuestro país; a la vez que ocultan que esta capacitación tecnológica tan sólo persigue formar humanos-máquinas que resuelvan de manera efectiva sus problemas, tal cual como sucedió en la India.
El pueblo Colombiano debe entender las prácticas capitalistas y ver más allá del show mediático y de la parafernalia montada por el Gobierno. Nuestros profesionales deben ver mas allá y ante todo pensar con su gran talento la solución a las necesidades y dolores propios, es sólo desde allí que lograremos ser una potencia tecnológica y no un corral de empleados al servicio del capitalismo.
La solución no está en que multinacionales con intereses particulares injieran en la calidad académica de nuestro país; sino en fortalecer nuestro sistema educativo público, con enfoque social y de nación, es decir no buscar el lucro a través de vender educación, sino formar la sociedad para que construyan un mejor país, con calidad, libertad y sentido de patria.
Nota
[*] Investigan red que exporta sicarios desde Medellín. El Colombiano, 13-06-2019 .