Para el próximo 17 de marzo fue acordada la movilización con carácter de paro nacional convocada por la Federación Minera de Chile, debido a los despedidos efectuados por las transnacionales que manejan el cobre y otros minerales. La empresa BHP Billingthon, controladora de la mina La Escondida, ha anunciado el despido de 2 mil 500 […]
Para el próximo 17 de marzo fue acordada la movilización con carácter de paro nacional convocada por la Federación Minera de Chile, debido a los despedidos efectuados por las transnacionales que manejan el cobre y otros minerales.
La empresa BHP Billingthon, controladora de la mina La Escondida, ha anunciado el despido de 2 mil 500 personas aduciendo problemas económicos por la crisis financiera mundial.
Pedro Marín, Presidente de la Federación Minera de Chile, dijo para «El Siglo» que los despidos no corresponden, puesto que los altos volúmenes de ganancias, que a pesar de la crisis económica reciben estas empresas, no hacen creíble la cesantía masiva.
En todo el país se están coordinando las movilizaciones que sumarán a trabajadores subcontratados y de planta. En estos términos, los dirigentes precisaron que no tolerarán más abusos de parte de estas empresas.
El dirigente de la Federación Minera de Chile, Pedro Marín, no justificó la estrategia de las empresas que pretenden hacer pagar una vez más el costo de la irresponsabilidad a los trabajadores: «Las empresas están elaborando su discurso con un sentido de oportunismo. La coyuntura política económica mundial, que le llaman crisis, para el caso de la minería no es tal».
Marín hizo un análisis con datos de las propias empresas en que justificó con números que las compañías mineras se están aprovechando de la situación: «Despiden a trabajadores y luego recontratan a algunos con la mitad del sueldo».
Agregó: «una libra del cobre que no supera los 60 o 70 centavos de costo, la venden a 1,5 de dólar. Bueno, que reflexión hacen ustedes; que no hay mejor negocio y más rentable que este».
El dirigente aclaró que todo abuso que comenten las empresas se hace al margen de la ley: «Además, todo esto se hace con explotación laboral para los compañeros contratistas y subcontratistas que trabajan en jornadas de 10 por 5, 20 por 10, horas/ días. En la práctica significa que estamos 20 días en la alta cordillera, alejados de la familia y debemos contar 5 días de traslado. Es decir no tenemos vida familiar. Imagínese usted, pasamos más días trabajando que con nuestras familias, eso en primer término, ahora nos vienen con los despidos injustificados. Esto no lo toleraremos».
Por último, el dirigente junto a sus bases llamó a estar atentos y unidos para enfrentar esta difícil situación que se aproxima.