Una de las tareas de toda organización Revolucionaria es orientar y acoger a aquellos sectores de compañeros que producto de «la desilusión política», buscan un proyecto revolucionario en común, que por medio del camino de la unidad y de la organización, se pueda levantar en contra de estos sectores que buscan llegar solamente a ocupar […]
Una de las tareas de toda organización Revolucionaria es orientar y acoger a aquellos sectores de compañeros que producto de «la desilusión política», buscan un proyecto revolucionario en común, que por medio del camino de la unidad y de la organización, se pueda levantar en contra de estos sectores que buscan llegar solamente a ocupar un sillón dentro del parlamento. Como es la Concertación y aquellos, que promueven solapadamente proyectos de corte reformistas, que enfatizan caminos electoralistas como un solo fin.
El Marco económico de las presentes elecciones en Chile:
Pese al optimismo del gobierno respecto de las cifras macroeconómicas y de crecimiento, con una proyección para este año de alrededor de un 6%, las burguesías transnacionales y el capital financiero, ve que aun existen tareas incompletas ya sea desde el punto de vista estructural como social. Por ejemplo: La implementación de la Reforma de la Salud y de la Justicia; las nuevas normas de evaluación de profesorado, que están dentro del marco la Ley Educacional, legalizar la flexibilización laboral, completar el TLC con los países del Asia; resolver la bancarrota de las municipalidades, resolver el fracaso de las AFP, ya que el estudio del gobierno arroja que un alto grado de pensionados que no alcanza a jubilar con la pensión mínima de $55.000 pesos, lo que provocaría que el gobierno tendrá que sacar de sus fondos para completar este monto. Hay un proyecto de ley escondido en el Parlamento para alargar en 5 años la edad para jubilar. Los 180 mil deudores habitacionales, la falta de dinero para implementar el AUGE, la cesantía crónica de un 10%, y el incentivo de crear la incertidumbre laboral para profundizar el temor de los trabajadores bajo esta dictadura de las trasnacionales avalado por el gobierno de Lagos y lo más importantes la privatización de CODELCO y lo poco que queda de las empresas del estado.
En otras palabras, aun se precisa de un gobierno que tenga incidencia en las organizaciones sociales, para influir, confundir y derrotar la resistencia, en forma «pacifica», a través de la mediación del «respeto mutuo», que genere expectativas de mejoramiento de sus condiciones al pueblo. Es en ese sentido que el capital financiero necesita a la Concertación como aliado político y como tales permanecen fieles unos a otros.
Pues bien, lo que hay en la farándula eleccionaria son las acusaciones mutuas de corrupciones y las supuestas divisiones en las burguesías. Nosotros no vamos a identificar a las burguesías como lo hace habitualmente la opinión política de los partidos populares y el gobierno de caracterizar superficialmente a las burguesías de derecha. Para nosotros, el gobierno utiliza mañosamente este concepto para hacer ver que la concertación es en sí de izquierda (del pueblo), mientras que en los hechos expresa el sentir más genuino de las transnacionales y del capital financiero. Superado este impasse, nuestro problema es ahora es identificar a quienes representa cada candidato.
De partida lo que tenemos que preguntarnos es si Piñera candidato de Renovación Nacional (RN), tiene un proyecto diferente al de Lavín, representante de la Alianza por Chile del cual también forma parte RN y Bachelet, candidata de la Concertación. O lo podemos plantear de otro modo; si es un proyecto diferente al proyecto de las trasnacionales, es decir al actual modelo económico y político. Si él, esta por nacionalizar la banca o generar una política de empleo, al fomentar la industria manufacturera de la textil, la del calzado, entre otras industrias. Si está por desarrollar una tecnología propia Chilena, si está por defender la ecología sobre el interés empresarial. La respuesta no puede ser más que un ¡NO! rotundo. Las tres candidaturas garantizan el marco sobre el cual se desarrolla el modelo de las transnacionales. Como ejemplo, el foro organizado por la mediana y pequeña empresa, los tres candidatos manifestaron el mismo programa con pequeñas diferencias, pero que en ningún caso se plantearon en fomentar la mediana y pequeña empresa, sino en desarrollar estas en función al modelo es decir a las trasnacionales, continuar externalizando las labores que antes realizaba la gran empresa. Es decir introducir ciertos mecanismos, administrativos, indicativos para lo cual estas empresas pudieran competir.
Entonces cual es la diferencia entre un Piñera, un Lavín o una Bachelet, o lo decimos de otro modo, a quien representan Piñera, Lavín o Bachelet. ¿Estos tres candidatos representan a la mediana y pequeña burguesía? ¿Representan al proletariado?. De ninguna manera, Lavín quien representa a la Unión Democrática Independiente (UDI), partido garante del modelo político económico del capital financiero transnacional, Piñera quien representa a RN, partido que ha sido el «crisol» de la lucha ínter burguesa entre la pequeña y mediana burguesía y los sectores del capital financiero norteamericano. Un detalle que no es menor Piñera es uno de los connotados miembros del ala liberal (entiéndase pro imperialista ¿?). Bachelet quien representa a la Concertación expresa la alianza entre el capital financiero europeo expresado por el Partido socialista (PS), Partido por La Democracia (PPD), Partido Radical (PR) y la Democracia Cristiana (DC) fiel «bisagra» de los intereses norteamericanos.
Para precisar mejor este planteamiento, entregaremos alguno elementos de la conformación de la UDI y RN y su práctica permanente de la DC. Hoy muchos compañeros siguen viendo a la UDI como Pinochetista, (lo que ayuda bastante a sectores de la Concertación), pero eso es falso. La UDI proviene del gremialismo, que se agruparon durante el gobierno de la Unidad Popular en la Universidad Católica. Además, muchos de ellos fueron a estudiar en las universidades yanquis, dándole el norte al interior del bloque dominante de la dictadura de Chicago boy. Fueron educados por el imperialismo para la implementación de su modelo, en el fondo constituyen los cuadros políticos garantes del modelo, son los ideólogos del sistema, son los pragmáticos, que pueden negociar cualquier hecho político, con el fin de mantener su dominación. Es así como se deshicieron, sin asco ni remordimiento, de Pinochet cuando se tradujo en un estorbo para sus intereses. Son los que inducen al resto de los sectores de la sociedad a implementar hechos políticos que finalmente tiendan a fortalecer u ordena el modelo «sacan las castañas calientes con la pata del gato». Es el partido más puro desde el punto de vista ideológico y político.
La incorporación de Piñera a la carrera presidencial, nos hace reflexionar en que dirección apunta. Pues bien, Piñera conformaban en RN el ala liberal junto a Andrés Allamand, dirigente de unas de las fracciones que constituyó RN, y Alberto Espina. Esta posición lo llevó continuamente a tener conflictos al interior de RN, con los sectores ligadas a la mediana y pequeña burguesía y al campo. Liberal desde el punto de vista económico, al igual que la UDI. Aun más, en Dictadura, RN era el desgaste de la lucha ínter burguesa, entre estas facciones, Piñera y otros con Jarpa y Cardemil, mientras que las políticas económicas del imperialismo se imponían. Entonces, ¿el proyecto de Piñera respondería a una burguesía nacionalista, alternativa al modelo de las transnacionales, es decir imperialista? ¿A una burguesía nacional poderosa que se dispute por el control del capital financiero con los países imperialistas?. Para que ello ocurra tiene que existir tres condiciones. Una, un partido poderoso independiente de las trasnacionales; dos, grupos económicos que apoyen a Piñera y tres, generar una economía nacionalista, ligada al bloque «latinoamericanista» liderado por Brasil y Argentina, intención que a la fecha no se ve. Por lo que ha planteado es poco probable que ello así sea. La otra alternativa, es que exprese a la mediana y pequeña burguesía, demás está recalcar que en Chile este proyecto esta derrotado, a no ser que exista una crisis mundial profunda, generalizada, que afecte a los grupos económicos. La tercera, es que sea un proyecto personal, la cual no tiene ninguna opción y va a tener rechazo del imperialismo y de los propios grupos económicos.
A nuestro parecer, se podrían cumplir dos finalidades con la incorporación de Piñera a la carrera presidencial. : Uno, que los resultados de las encuestas internas de la UDI arrojan una merma en la votación de Lavín, Lo que llevaría un importante porcentaje de esta votación, sobretodo de los sectores populares, a ser canalizados por el «pacto» Juntos Podemos y por lo tanto la entrada de Piñera le da un tiraje al mostrar una seudo oposición y colocándolo permanentemente en los medios de comunicación, para evitar una migración de votos hacia el Juntos Podemos. La otra finalidad, que un sector de renovación nacional se proyecte a futuro a conformar una nueva Concertación, con la Democracia Cristiana (DC) para los próximos años, producto del desgaste del actual Concertación y de nuevas exigencias del imperialismo.
La candidata de la Concertación Michele Bachelet, se encuentra en una posición beneficiada, ya que el capital trasnacional y financiero, ven que aún la Concertación tiene el control social para un nuevo periodo. Sin embargo, al interior se expresa la contradicción imperialista y para este efecto nos vamos a detener en el papel que juega la DC en estas elecciones..
Para estas elecciones la DC, tuvo la oportunidad de ganar la el cupo presidencial, pero no lo hizo. Nominó a Soledad Alvear, persona de bajo perfil a competir con Michele Bachelet, mientras que Adolfo Zaldivar, que por su calidad de presidente del partido, era por derecho propio el candidato a las primarias, se restó a participar. ¿Por qué?. Desde nuestro punto de vista, la DC prefirió obtener mayores cupos parlamentarios, debido a que se está preparando a ser un partido poderoso e imponer una Concertación o definitivamente crear otro conglomerado para los «nuevos tiempos» o mejor dicho un periodo de crisis mundial, que va a repercutir precisamente a los sectores sociales llamados de centro. No es menor que la propia DC este denunciando caso de corrupción a sus propios aliados. «Todo es negociable» reza el dicho. Al interior de la DC al parecer, estarían preparando ciertas condiciones, algunos candidatos no estarían en el formato de la DC, como son los senadores Rafael Moreno y Carmen Frei, ligados al área de la Agricultura y Minería, áreas muy sensibles para el futuro de Chile.
La falta de un proyecto popular revolucionario alternativo:
El caso del pacto Juntos Podemos, todavía se expresa la crisis de los sectores populares. La salida de la Surda y la Fuerza Social del pacto, la molestia del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) en los acuerdos que se toman al interior, refleja la poca seriedad y la desvirtuación de los que hoy día lideran organizaciones políticas. Priorizar la lucha por los cupos parlamentarios y no una real alianza que se proyecte hacia un cambio social. El peligro es que estos dirigentes manejan una cantidad de recursos, y por tanto tienen llegadas a algunos medios de comunicación, y se suman a la farándula parlamentaria. Estas prácticas dañinas para el proletariado, son las que los jóvenes generalizan perdiendo el sentido al compromiso militante de clase.
Esta claro que la opción del Partido Comunista (PC) no es ganar la elección, ni sacar un gran porcentaje de votos, sino obtener cupos parlamentarios que le permitan participar en el actual marco político. Es muy probable que se esté «conversando», (negociando) con los sectores del PS y PPD, ya que estos últimos pueden estar interesados en generar una capacidad negociadora al interior de la Concertación como lo hace la DC. Pero la perspectiva hoy de esta idea es poco probable, aún más, en cada elección el PS a «pololeado» al PC, y posteriormente lo ha dejado solo.
Frente al planteamientos de algunos grupos que están en el PODEMOS de que no debe ser solamente un grupo que intervenga en las elecciones, sino que se debe transformar en UN INSTRUMENTO REAL, que impulse las plataformas sociales y políticas, ha tenido hasta la fecha en un rotundo fracaso. Han tenido como resultado una inoperancia práctica que se ha visto reflejado en las poblaciones y en la escasa y nula participación en los conflictos importantes, como por ejemplo la movilización de los estudiantes universitarios. Donde se equivocan estos grupos que conforman el PODEMOS, es que para levantar una lucha social debe existir presencia política y recursos económicos. La pregunta es ¿quien va a apostar y colocar los pocos recursos económicos? en un conglomerado que no tiene una solidez ideológica sino solamente instrumental política. De ninguna manera el Partido Comunista, sus recursos los canalizará donde tenga posibilidades reales de lograr ganar una cupo parlamentario, su interés no es por tanto levantar una red social, para luchar por las Demandas Populares, o generar una real alternativa de clase, como no sucede al interior de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT). No hay intención, ni voluntad política para perspectivas condiciones orgánicas que puedan poner en la sociedad civil los problemas que afectan a los trabajadores y el pueblo.
Ahora bien la cuestión no es si las elecciones sirven o no sirven, sino en saber EN QUE MOMENTO SIRVEN. Para nosotros el CUR, entendemos que la tesis de que las elecciones es un polo que generará la construcción de un movimiento social, que produce conciencia de clase, es como decir que la lucha económica, por sí sola genera conciencia política en la clase obrera. Cuantos años, lleva la clase oprimida en Chile por la burguesía y cuantos años la clase obrera ha dado la lucha económica sin resultados de conciencia, mientras que la lucha política es la que a despertado a la clase de su adormecimiento. Es en este mismo sentido que la lucha electoral, arroja lo que políticamente son las clases en pugna. Para nosotros el reflujo de la clase hace años que tocó fondo. Es hora de prepararnos y el esfuerzo que debemos desarrollar es converger por los que están por el socialismo, porque el socialismo no es un fantasma, ni una religión es la posibilidad política real y económica de salvar a la humanidad de su autodestrucción.
Creemos que debemos converger en la práctica en torno a LEVANTAR LAS DEMADAS POPULARES entendidas como demandas político sociales, ya que sabemos perfectamente que lograr estas demandas pasa necesariamente por el cambio del modelo político económico del imperialismo y las trasnacionales. Estamos de acuerdo que las elecciones son un paso, un instrumento, pero también estamos claros que estas devienen de un desarrollo social previo y consistente, de la vinculación real de las organizaciones políticas con los trabajadores y el pueblo. En la hipótesis de que por algún motivo un parlamentario «del pueblo» lograse aprobar una ley que beneficie a los obreros, cabe entonces la pregunta ¿dónde estaría la organización de trabajadores y del pueblo que tenga la capacidad política de sostener y defender ese logro frente a los intereses del empresariado? Las transnacionales y el imperialismo.
Camino de Unidad, Camino de Victoria