El candidato presidencial del pacto Juntos Podemos Más, Tomás Hirsch, anunció que si hay segunda vuelta en las elecciones de diciembre próximo llamará a votar nulo como una forma de rechazar hoy el despiadado neoliberalismo. La Concertación, coalición de gobierno, tiene un plan neoliberal que «no es bueno para el país y por tal razón […]
El candidato presidencial del pacto Juntos Podemos Más, Tomás Hirsch, anunció que si hay segunda vuelta en las elecciones de diciembre próximo llamará a votar nulo como una forma de rechazar hoy el despiadado neoliberalismo.
La Concertación, coalición de gobierno, tiene un plan neoliberal que «no es bueno para el país y por tal razón no se puede apoyar en segunda vuelta. Sería incoherente», declaró a la estación televisiva Canal 13 el abanderado de los sectores progresistas.
Explicó que Podemos tiene un proyecto de sociedad para Chile, que propone la redistribución del ingreso y «nuestra opción es llamar a votar nulo, porque no seremos copartícipes de la Concertación y de su proyecto neoliberal», reiteró.
Consultado sobre las últimas reformas a la Constitución de 1980, herencia de la dictadura militar (1973-90), y en especial acerca del injusto sistema electoral binominal, Hirsch señaló que es una nueva trampa para que la izquierda no llegue al Parlamento.
«Lo sacan de la Constitución y le elevan el quórum. No podemos decir que es un problema constitucional y le hacen creer al país que se solucionó el problema, pero en realidad se puso más complicado».
Propuso que lo que debería existir en Chile es un sistema proporcional y que cada «sector este representado según la votación que obtenga».
Aclaró que con el 10 por ciento de la votación obtenida por Juntos Podemos Más en las elecciones municipales de octubre pasado, la coalición de izquierda debería tener entre 10 a 12 diputados.
«Con el sistema binominal, que va ha seguir imperando en la elección de diciembre, vamos a tener cero parlamentarios. Eso no es bueno para la democracia y para la participación real de todos los chilenos», indicó.
Bajo este método electoral, los partidos de la extrema derecha opositora, con un poco más del 34 por ciento de los votos, pueden disponer del 50 por ciento de los parlamentarios en ambas cámaras, lo que hace virtualmente imposible cualquier cambio constitucional.
Para el líder humanista, la actual Carta Magna fue generada en forma antidemocrática, hecha por un «dictador (Augusto Pinochet) para sí mismo».
Denunció que no se puede construir un país con una Constitución aprobada sin registros electorales y con una votación absolutamente manipulada que sólo recibió retoques, pero sigue manteniendo profundas inequidades.
Lo que haría, subrayó el pretendiente presidencial de la izquierda, es «llamar a una Asamblea Constituyente», con la participación de todos los sectores nacionales, partidos políticos, organizaciones sociales con el objetivo de «proyectar al país de mejor manera al futuro».
Hirsch explicó que el Podemos es un pacto de ideas y no electoral, y los partidos (Comunista, Humanista, Izquierda Cristiana y unas 50 organizaciones sociales y políticas) están de acuerdo de hacer de Chile una sociedad más justa y con respeto a la diversidad.
«Estoy convencido que el Chile que todos queremos no debe ser un solo color. Debemos lograr que se respete a los pueblos originarios, a los trabajadores, las mujeres, jóvenes, ancianos», manifestó.
Criticó a la Concertación por ser una coalición electoralista y no de ideas: «ellos dejaron de lado sus principios y son meramente administradores del sistema neoliberal», sentenció.