Al término de la Asamblea Nacional de la izquierda, el socialista allendista Jorge Arrate, fue proclamado candidato de la izquierda, cuya presentación oficial como tal fue en un masivo acto en el emblemático Teatro Caupolicán este domingo. Ya la izquierda chilena tiene candidato único y resultó ser elegido en una elección que se llevó a […]
Al término de la Asamblea Nacional de la izquierda, el socialista allendista Jorge Arrate, fue proclamado candidato de la izquierda, cuya presentación oficial como tal fue en un masivo acto en el emblemático Teatro Caupolicán este domingo.
Ya la izquierda chilena tiene candidato único y resultó ser elegido en una elección que se llevó a cabo al final de una exitosa Asamblea Nacional en que se debatió y enriqueció el Programa de Gobierno, el candidato del conglomerado llamado «socialistas allendistas», Jorge Arrate.
El flamante aspirante al sillón presidencial por la izquierda chilena representada por el Partido Comunista, Partido Humanista, Izquierda Cristiana y Socialistas Allendistas, además de sectores independientes, tuvo su estreno oficial en medio de una entusiasta multitud de personas congregadas en el histórico Teatro Caupolicán.
Allí, antecedieron a Jorge Arrate los otros candidatos que ahora se encuentran en pleno proceso de incorporación a los múltiples trabajos que demandará esta campaña presidencial. Tomás Hirsch reivindicó que todos estamos detrás del inicio de campaña de Arrate y que con unidad se realizará una campaña masiva y diferente para que la gente «maltratada» por el sistema tenga una oportunidad de decir basta!
Posteriormente, el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, quién en la víspera había depuesto su pre candidatura a favor de Jorge Arrate, manifestó que ahora la izquierda chilena, junto a su candidato y Programa recorrerá el país para que se sepa que hoy sí existe una alternativa seria y creíble para cambiar el estado de cosas y que los trabajadores, mujeres y toda persona en conciencia asuma las banderas de la izquierda para ir ciudad por ciudad, casa por casa, anunciando esta nueva propuesta política.
Jorge Arrate en su discurso del Teatro Caupolicán, en primer lugar agradeció el esfuerzo de tantas personas por llevar a buen término tanto la Asamblea Nacional de la Izquierda, como el grandioso acto del Caupolicán. Iniciando sus palabras señalando que él es un «socialista de toda la vida«. Rememorando lo que fue su trabajo junto al Presidente Salvador Allende, primero como director de Codelco para iniciar el proceso de Nacionalización del cobre, para después aceptar el cargo de Ministro de Minería en el gobierno de la Unidad Popular
Señaló que hoy estaba presente el legado histórico de otros próceres de la izquierda chilena, en los nombres de Recabarren, Laferte, Gladys Marín, junto a los de Marmaduque Grove, Salvador Allende y los cristianos consecuentes como Bosco Parra y Rafael Agustín Gumucio. Agregando a Laura Rodríguez, la recordada diputada humanista..
En ese momento de rescate de la memoria histórica de la izquierda, con emoción Arrate recordó una fecha que no olvida: 1938, año de la Unidad de la Izquierda representada en la creación del FRAP que llevó a la presidencia de la República a Pedro Aguirre Cerda. En este contexto el ahora candidato presidencial de izquierda, señaló que la tarea por delante de alcanzar la primera magistratura es difícil «pero no imposible«.
Junto con indicar que para el 25 de mayo se entregará oficialmente al país el Programa de Gobierno de la Izquierda, adelantó que serán una prioridad la consecución de una nueva Constitución para Chile, dejando atrás la que dejó la dictadura de Pinochet, la formulación de una verdadera Regionalización y hacer realidad un auténtico gobierno ciudadano que una mayoría creciente exige y reclama. También que estará presente en forma responsable la solicitud que hace un tiempo exigió Monseñor Goic, presidente de la Conferencia Episcopal, tendiente a que gobierno y empresarios deberían hacer realidad un «sueldo ético» para avanzar en la superación de la pobreza.
Sin duda que la izquierda chilena ha dado un salto sustantivo al tener su propio candidato presidencial, este acontecimiento habla muy bien de cómo esta izquierda avanza de acuerdo a los buenos signos que observamos en toda Latinoamérica. De esta forma se consagra el clamor de las bases populares que, con mucha sabiduría, vienen pidiendo en todos los tonos que para avanzar y derrotar al neoliberalismo y el continuismo excluyente se debe consolidar una amplia unidad desde abajo.
Jorge Arrate es un excelente candidato para plasmar las ideas y proyectos que necesita nuestra izquierda para estos nuevos tiempos. Entre su amplia praxis como servidor de las causas justas y de los altos postulados de la República, destaca una que tiene especial relevancia: Conoció muy bien cual era el compromiso y el espíritu revolucionario del presidente Allende, particularmente en todo lo que tuvo relación con la histórica nacionalización del cobre en esos años llenos de esperanza y heroicidad.
Ya en el año del centenario del presidente mártir, Arrate nos invitaba a superar los llamados objetivos imposibles: «Constatamos que los que ellos llaman «imposibles», son muchas veces aspiraciones razonables, cuando no elementales. Una nueva Constitución consagrada mediante voto popular, ¿no es acaso razonable?…¿No es elemental terminar con las exclusiones en el Congreso Nacional? ¿No es razonable que la ley habilite a la gran mayoría de los trabajadores para negociar colectivamente?… (Presentación del libro «Compañero Presidente» de Mario Amorós – 24/6/2008).
Finalmente, coincidimos con la opinión de muchos de los participantes de la gran Asamblea Nacional de la Izquierda recién concluida; Chile se pone en sintonía con los procesos de emancipación que cruzan a toda América Latina. Esta candidatura presidencial que encabeza Jorge Arrate hará historia ya que se inicia con una fuerza, mística y proyección que no veíamos desde los días en que Salvador Allende tuvo el coraje de retar a la historia y lograr, efectivamente, la presidencia de la República para representar las aspiraciones y anhelos del pueblo chileno.
– Jaime Escobar es editor de la revista Reflexión y Liberación.