El 28 de agosto en La Moneda la presidenta Michelle Bachelet firmó la ley que incorpora al pueblo originario Diaguita a los beneficios de la Ley Indígena. Invitados por el gobierno viajó una numerosa delegación de la comunidad del Valle del Huasco, para estar presentes en este importante evento.El domingo, cuando la delegación estaba embarcada […]
El 28 de agosto en La Moneda la presidenta Michelle Bachelet firmó la ley que incorpora al pueblo originario Diaguita a los beneficios de la Ley Indígena. Invitados por el gobierno viajó una numerosa delegación de la comunidad del Valle del Huasco, para estar presentes en este importante evento.
El domingo, cuando la delegación estaba embarcada a Santiago, se enteraron que los buses puestos por la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (CONADI) habían sido proporcionados por la Minera Barrick Gold. Esta situación generó una fuerte discusión entre los delegados, lo que terminó con el desistimiento de continuar viaje de Zacarías Anacona, delegado del sector El Pedregal en el Valle del Carmen. Anacona prefirió pagar de su bolsillo el viaje en una línea interprovincial. Varios delegados se mostraron indignados al saber que irían en los buses de la minera y como no tenían dinero para costear personalmente el viaje, a regañadientes viajaron en los buses de la discordia.
Los problemas entre la comunidad Diaguita y el acto en La Moneda ya venían desde hace algunos días. La Comunidad Diaguita de los Huasco Altinos que habita en el territorio ancestral de la zona alta del Valle del Huasco, no había sido invitada por la CONADI al magno acto en la Casa de Gobierno. Cuestión que quedó representada en una carta que la comunidad le mandó el 22 de agosto a la presidenta. El resultado fue una invitación a dos dirigentes de esta organización que viajaron por sus propios medios.
Es conocida públicamente la tenaz oposición que la comunidad Diaguita ha venido sosteniendo desde los inicios del proyecto minero Pascua Lama de Barrick Gold, este proyecto está emplazado en el territorio Diaguita Huasco-Altino y existen litigios en tribunales que buscan restituir 50.000 hectáreas que fueron usuradas y que hoy están en manos de la empresa minera.
La CONADI debe explicar a los Diaguitas y a la comunidad nacional lo ocurrido, llama poderosamente la atención que la CONADI como servicio público no gestionara el viaje con recursos propios y alevosamente recurriera a la empresa que usurpa y contamina el territorio de la comunidad Diaguita.
Mayores informaciones:
Sergio Campusano, Presidente de la Comunidad Diaguita de los Huasco Altinos, Fono: 09 85047102.