El municipio Tierralta en el departamento de Córdoba, fue creado como municipio en el año 1931 por ordenanza de la Asamblea de Bolívar, la que fue anulada por ilegal, se inhabilitó por algunas ilegalidades e irregularidades procedimentales. Se creó como municipio en 1949, se destaca por ser geográficamente parte del Parque Nacional Natural de Paramillo, […]
El municipio Tierralta en el departamento de Córdoba, fue creado como municipio en el año 1931 por ordenanza de la Asamblea de Bolívar, la que fue anulada por ilegal, se inhabilitó por algunas ilegalidades e irregularidades procedimentales. Se creó como municipio en 1949, se destaca por ser geográficamente parte del Parque Nacional Natural de Paramillo, nudo central y paso histórico de grupos de paramilitares. Según investigaciones realizadas por la Universidad de Córdoba, se reporta un total de 288 especies pertenecientes a 227 géneros y 97 familias, constituyéndose un gran ecosistema. [1]
Fuente: https://turismocordoba2012.wordpress.com
El nudo del Paramillo: paramilitarismo
El municipio de Tierralta hace parte del gran Nudo de Paramillo geoestratégico del paramilitarismo de ayer y de hoy en Córdoba. No se sabe si llegará la tan anhelada paz a estas tierras, cuando se firme el proceso de paz entre las FARC-EP y el gobierno
Hoy los paramilitares están en Tierra Alta se llaman e l clan Usuga. En este municipio se abre otra realidad: es un espacio estratégico para la disputa del territorio que de manera segregativa y en las vertientes geográficas del Paramillo, hacen presencia los movimientos insurgentes del EPL, las FARC-EP y se imponen los criminales paramilitares denominados el clan Usuga y las Bacrim. La primera evidencia de las Bacrim, y puntualmente el clan Úsuga, tienen poder hoy en Tierralta, fue en el mes de abril donde el clan Usuga-paramilitares, uniformados, hicieron circular aterradores panfletos y mensajes de voz en chats de celular para intimidar y amenazar la población. Escenarios de guerra con su relación territorial en las diversas veredas del municipio. [2]
La homogenización del miedo del clan usuga y las Bacrim para atemorizar la gente mediante vacunas, extorsión y amenazas no tiene ningún reparo y viene de tiempo atrás. Hoy día, todos deben pagar la extorsión bajo cuotas, ¡hasta para vender minutos de celular!, es un circuito de una economía moral con una horizontalidad, hacia pequeños comerciantes y otros pobladores. Nadie lo dice, pero se sabe. Es la criminalidad impuesta por el paramilitarismo hacia la población por parte de integrantes bajo circuitos económicos de extorsión agenciados por narcotraficantes y en cooperación del silencio de entes burocráticos, militares y políticos.
Lo más grave es que Tierralta se ha convertido en un lugar de silencio de sus pobladores y dominio de voz de los paramilitares. Hoy nadie habla nada y quien lo hace, lo expresa con suma reserva. El Clan Usuga, las Bacrim hacen de las suyas en este gran paisaje de sol. Existe un gran tráfico de armas que llega a manos de los paramilitares. La pregunta señor lector, ¿Cómo cree Ud. que se financia el armamentismo? ¿Quién protege a estos criminales? Ahí le dejo solo dos pregunticas, para las demás vayan avanzando…
En el año del 2014, las necesidades azotaban a una población desplazada hacia Tierralta, más de 50 familias desplazadas vivían en extrema pobreza, la administración se hacía oídos sordos que sin vergüenza y sin dolor no atendía bien a dichas familias desplazadas campesinas. [3] Los malos programas del gobierno sobre las políticas públicas empleadas para atender a las familias desplazadas eran de un trazo de miseria y de total desprecio por el ser humano, como el ICBEF, Familias en Acción, la Unidad de Atención a las Victimas, los programas desprendidos por parte del Departamento de Planeación Nacional y el sistema del SISBEN, no servían para nada, solo para imprimir un modelo impuesto de políticas públicas de corte neoliberal que no tiene ningún diseño participativo y está lejos de solucionar problemas sociales de la comunidad.
Estas instituciones son una política de estado que dé pública y participativa no tienen nada, basta el ejemplo de la comunidad indígena San Matías de la etnia Zenú, en el municipio de Sahagún, se ha visto afectada por la falta de inclusión verdadera en el manejo de un diseño de una política pública; que dicho de paso no ha existido para los indígenas en el territorio nacional, ni para la comunidades campesinas y menos para las poblaciones desplazadas en los cascos urbanos del territorio nacional. ¡Y ni que hablar de los afros , raizales a la redonda¡
Es un caos burocrático, donde los paramilitares se afincaron en todas las esferas de los territorios en relación sobre la soberanía alimentaria, la salud, la vivienda y educación de esta población afectada por la guerra. Los paramilitares hoy día realizan asesinatos segregados, gota a gota y las desapariciones afloran, bajo mecanismos de empadronamiento y en secciones de que el asesinato no sea visto según ellos con horror, bajo un método incremental de conteo. Es el fascismo con tentáculos de araña venenosa. Ni hablemos de los «accidentados lideres» que mueren día a día por accidentes en la calle, en las vías locales por agresión. Todo un modelito importado para segregar, arruinar y atemorizar a un entrono local. Paso a paso, el crimen de estado avanza, sin que se deje ver. El estado está muy lejos de resolver aún la desaparición de las estructuras paramilitares .
Lugar y espacio sobre el paramilitarismo .
Es urgente que el gobierno abra un espacio nacional de diálogo, con los integrantes locales y regionales de los diversos movimientos sociales, sobre el tema de las estructuras paramilitares vigentes, la responsabilidad del gobierno de Juan Manuel Santos es garantizar la vida de las personas como mandatario. La urgencia queda en si -misma, ante la naturaleza del estado que aún pervive bajo estructuras paramilitares.
«La gente siempre cree lo que ven sus ojos». (Proverbio afgano)
Notas
[1] Mirar algunas brevedades allí. https://es.wikipedia.org/wiki/Tierralta
[2] http://www.larazon.co/web/2016/03/ejercito-incauto-caleta-de-guerra-de-las-bacrim-en-cordoba/
[3] Entrevista con desplazados por Sara Leukos en ese año, en Tierralta -Córdoba
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.