Hacer trizas los pactos que siembran la posibilidad de una paz para Colombia es una consigna de la muy poderosa extrema derecha, que viene cumpliendo metódicamente el Gobierno de Duque. Uribe y Duque han negado constantemente los avances alcanzados en la Mesa de Conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional; sin embargo, diferentes organizaciones valoran […]
Hacer trizas los pactos que siembran la posibilidad de una paz para Colombia es una consigna de la muy poderosa extrema derecha, que viene cumpliendo metódicamente el Gobierno de Duque.
Uribe y Duque han negado constantemente los avances alcanzados en la Mesa de Conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional; sin embargo, diferentes organizaciones valoran la importancia de los Diálogos de Paz y por esta razón han realizado el Depósito ante Naciones Unidas y otras instancias internacionales, de todo lo firmado, tal y como la Delegación de Diálogos lo informó al mundo desde La Habana el pasado 3 de julio.
Cumplir Acuerdos de Estado
Federico Mayor Zaragoza, ex Director de la UNESCO (1987-1999) y actual Presidente de la Fundación Cultura de Paz; es un jurista experto y con una amplia trayectoria en Derecho Internacional y Procesos de Paz. Zaragoza, a comienzos de julio dio a conocer su Concepto Jurídico [1] respecto al Protocolo de Retorno firmado entre el Estado colombiano y el ELN, y que el Gobierno de Duque se niega a cumplir.
El pasado 5 de julio a través de una carta dirigida al Presidente Duque [2], el jurista expuso sus elementos conceptuales referentes al Protocolo de Retorno; en su misiva le recuerda a Duque que lo acordado en derecho debe cumplirse, según el Artículo 26 de la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados de 1969. Además, enfatiza en que el Derecho Internacional debe honrarse máxime cuando tiene como propósitos superiores la paz y la humanización, y que no hay base alguna para desconocer legítimamente lo que un Estado se obligó a respetar.
Mayor Zaragoza, le recuerda a Duque que lo firmado con el ELN, en particular el Protocolo de Retorno, tiene un estatus especial al ser un Acuerdo fundado en el derecho humanitario no disponible o renunciable por las partes, suscrito ante seis países y validado en el derecho interno del Estado.
La Fundación Cultura de Paz y Mayor Zaragoza, son contundentes al recalcar que la Interpol no puede actuar como Duque quiere, ya que los artículos 2 y 3 de los estatutos de este organismo internacional, prohíben que este intervenga en casos políticos y de conflicto armado como lo es el nuestro.
Es más, pone de presente cómo hay una utilización no neutral sino inapropiada de los medios de la Interpol, como las Circulares Rojas, en este caso por un Gobierno que es parte en una confrontación, que criminaliza a los enemigos políticos, y donde se mata sistemáticamente a los opositores. Por supuesto, en ese marco Cuba no tiene en lo más mínimo obligación jurídica de proceder como persecutor penal.
Finalmente, Zaragoza recuerda que el Protocolo que dispone el Retorno de la Delegación de Diálogos del ELN, tiene el objetivo de «asegurar una repatriación segura, sin dilaciones o sin poder encajar otras cuestiones, mucho menos las de tipo penal o de persecución judicial, y sin dar cabida a supuestas razones de incumplimiento por hechos ajenos a la Mesa, con efectos sancionatorios».
Notas
[1] Concepto Jurídico. http://www.rebelion.org/docs/
[2] https://www.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.