Los prisioneros políticos de la democracia son más de 160 mujeres y hombres de este país que han estado en la cárcel. Madres, artistas, dueñas de casa, trabajadoras, estudiantes, hijas, hijos, trabajadores, jefes de hogar y padres. Personas comunes y corrientes que optaron y optan por vivir sus vidas en pro de la emancipación, de […]
Los prisioneros políticos de la democracia son más de 160 mujeres y hombres de este país que han estado en la cárcel. Madres, artistas, dueñas de casa, trabajadoras, estudiantes, hijas, hijos, trabajadores, jefes de hogar y padres. Personas comunes y corrientes que optaron y optan por vivir sus vidas en pro de la emancipación, de la justicia social, de la Libertad. Son prisioneros políticos simplemente porque desoyeron el canto de las sirenas del neoliberalismo, que fue disfrazado de democracia. Porque sabía que la Transición sería un proceso que consolidaría la dominación de las mayorías por parte del capital. Basta con verificar la distribución del ingreso (a los más ricos les toca 40 veces más que a los pobres), basta con dar cuenta de la precarización del empleo (mejorar la oferta a costa del empobrecimiento de los sueldos y garantías de los trabajadores). Prisioneros políticos porque decidieron luchar con la Constitución, instalada a fuego y a muertos, que restringe la participación ciudadana a la emisión de un voto cada seis o cuatro años. Son prisioneros políticos que no tuvieron derecho a juicios justos y fueron condenados dos veces por el mismo delito por la justicia civil y la justicia militar.
Hasta ahora, el tiempo en prisión es de once, doce, trece y catorce años. Años que han sido de extremo rigor dadas las características del recinto en que han estado la mayor parte de sus condenas: la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago. Una cárcel situada dentro de otra cárcel, al interior de la Ex penitenciaría. Una cárcel invisible para el ojo ciudadano. Ojo que por más de una década, «fue de los peores ciegos». Los prisioneros de la CAS (hombres) y CEAS (mujeres), fueron los detenidos desaparecidos de los ’90s. HOY Por un lado, a nueve meses de la aprobación del proyecto de Ley de Rebaja de Penas, que permitió la salida de la mayoría de los prisioneros de la CAS, aún hay seis prisioneros políticos para quienes el proyecto de ley no alcanzó. La posibilidad de libertad para todos ellos tiene, por lo menos, dos caminos: Para René Salfate y Julio Peña se necesita un indulto del Ejecutivo, esto es, un indulto presidencial. Ambos cuentan con todos los requisitos y no existen obstáculos de tipo técnico que impidan el indulto. Sólo falta la voluntad política por parte del Gobierno para ello. Al respecto, en Agosto del 2004, durante la discusión del Proyecto de Ley, el gobierno se comprometió a que resolvería los casos pendientes. Han pasado muchos meses y aún no hay solución. Para Claudio Melgarejo, Pablo Vargas, Hedor Sánchez, Hardy Peña, hace falta un nuevo Proyecto de Ley, dado que las leyes especiales que los condenaron, no son indultables por el Ejecutivo. Los esfuerzos están dirigidos hacia eso: lograr que se discuta, en el Parlamento, un nuevo Proyecto de Ley que permita la libertad de estos cuatro prisioneros. Por otra parte, en este último tiempo, los prisioneros se han encontrado con los pares e impares en esto de recorrer los últimos metros hacia la calle (unos 150 metros, para ser claros). Por estos tiempos se han venido reencontrando con la solidaridad de mucha gente y de muchas organizaciones que han materializado en acciones concretas: la reivindicación de la libertad para todos los Prisioneros Políticos. Ha sido un proceso muy dinámico donde, permanentemente se han tenido que aclarar detalles como que la reivindicación de «el fin de la Prisión Política y la Libertad de todos los Prisionero Políticos», tiene que ver con los prisioneros Chilenos, Mapuches y los Internacionalistas Chilenos presos en Perú, Brasil y Argentina, pero las «gestiones» tendientes a lograrlas son específicas de acuerdo a la situación de cada uno. Hoy, los prisioneros políticos necesitan de la solidaridad activa de todos los soñadores. De todos los progresistas, de todos los demócratas que entienden que la Prisión Política no es más que una aberración social. Necesitan de su solidaridad concreta, mediante acciones concretas. No se puede ser cómplice por omisión del lado oscuro de la institucionalidad, avalando la prisión política.
BIOGRAFÍAS
- Julio Peña Parada, 40 años, casado, padre de dos hijas. Poblador de la Bandera, entra a militar al MIR el año 1981. Participa activamente en las comunidades de base de la iglesia Católica, en su población. Posteriormente, se hace parte de la generación de estudiantes secundarios que floreció al calor de las luchas contra la dictadura. El 29 de noviembre de 1993, mientras se desplazaba en automóvil por un barrio de santiago, junto al compañero José Aguilera (muerto en aquella ocasión), son interceptados por Carabineros, produciéndose un enfrentamiento. Julio Peña es herido de gravedad y detenido. Pasa meses en estado crítico pero logra sobrevivir. Condenado a 30 años, se encuentra recluido en la Cárcel de Alta Seguridad (CAS). Un Indulto del Presidente de la República puede dejarlo en libertad.
- René Salfate Osorio, 43 años, casado, nacido el 21 de Julio 1962, en la ciudad de Antofagasta. Durante la Dictadura Militar, su compromiso social lo ingresar al Frente Patriótico Manuel Rodríguez. En octubre de 1985, es detenido y baleado en una pierna por la CNI. Permanece en la Cárcel de Antofagasta hasta 1990. En la década de los noventa continúa su lucha. Luego, como militante del Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez, es detenido el 14 de Octubre de 1996 y condenado a 25 años, 15 de los cuales son bajo la Ley Antiterrorista. Actualmente está recluido en la CAS. Junto a sus compañeros, sigue luchando por la libertad.
- Hardy Peña Trujillo, nació en Osorno. Actualmente tiene 38 años. Comenzó su militancia por el cambio social, en plena dictadura pinochetista, al ingresar a la Universidad. No pudo terminar sus estudios por falta de recursos. Hoy lo hace en la cárcel, como los demás, a través de la Universidad ARCIS. Dos matrices políticas lo han formado como luchador social: la comunista-rodriguista y la mapucista-lautarina. En prisión se hizo vegetariano por la liberación animal, pues lo considera parte de su proyecto revolucionario. Detenido el 29 de noviembre de 1992. Está condenado a Presidio Perpetuo por la Ley Antiterrorista, está recluido en la CAS.
- Pablo Vargas López, nació el 17 de julio de 1971, en el barrio Recoleta de Santiago. Durante la lucha contra la dictadura, en los años ochenta, su compromiso social lo lleva a ser parte de la causa estudiantil democrática, integrando, en su Liceo, las Juventudes Comunistas. En el año 1986, ingresa al Frente Patriótico Manuel Rodríguez. Al momento de su detención, era estudiante de Mecánica Industrial. La fecha marcaba 9 de abril de 1991. Condenado por la Justicia Militar a Presidio Perpetuo por la Ley Antiterrorista, está recluido en la CAS.
- Claudio Melgarejo Chávez, 40 años, padre de dos hijos, nacido en la ciudad de Concepción, en la Población Lorenzo Arenas. Militante Lautarino, ingresa a esta organización a fines del año 1982, en el inicio de las jornadas de protesta contra la dictadura. A principios de 1989 se traslada a Santiago producto de la represión en su ciudad, en la capital se incorpora al trabajo territorial y posteriormente ingresa a las Fuerzas Rebeldes y Populares Lautaro. El 17 de febrero de 1993, siendo miembro de la Dirección del Lautaro, cae herido en enfrentamiento con Carabineros en el Centro de Santiago. Condenado a Presidio Perpetuo por la Ley Antiterrorista, se encuentra preso en la CAS.
- Fedor Sánchez Piedrit, 48 años, padre de 5 hijos. Hijo de padres comprometidos con el proceso revolucionario del Gobierno de la Unidad Popular, parte al exilio junto a su familia, primero a Perú, luego a Hungría, donde termina sus estudios secundarios. Su compromiso lo lleva a Cuba para formarse militarmente, integrando el contingente internacionalista en Nicaragua. En 1986 regresa a Chile, sumándose a las filas del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. Cae detenido el 22 de marzo de 1991, condenado a Presidio Perpetuo por la Ley Antiterrorista. Recluido en el Penal Colina 1.
FIN A LA PRISIÓN POLÍTICA NO A LA LEY ANTITERRORISTA LIBERTAD A TODOS LOS PRISIONEROS POLÍTICOS !