La derecha empresarial, ha sentido la presión que vienen ejerciendo desde el mundo social los trabajadores organizados, la huelga de los forestales, la movilización de los subcontratados de CODELCO, el conflicto agudo de los trabajadores del sector pesquero, han traído consigo severas reacciones del empresariado. En agosto de 2007 Alfredo Ovalle, presidente de CPC advertía […]
La derecha empresarial, ha sentido la presión que vienen ejerciendo desde el mundo social los trabajadores organizados, la huelga de los forestales, la movilización de los subcontratados de CODELCO, el conflicto agudo de los trabajadores del sector pesquero, han traído consigo severas reacciones del empresariado.
En agosto de 2007 Alfredo Ovalle, presidente de CPC advertía sobre el malestar y preocupación por el tipo de movilizaciones que se venían realizando en el ámbito laboral «Este episodio nos inquieta, no sólo porque escapa evidentemente a los parámetros establecidos para una negociación laboral, sino porque también puede constituir un precedente para otras situaciones semejantes en distintos sectores productivos», afirmó, agregando que estos hechos generan «incertidumbres y desconfianzas» en los actores económicos». La Nación 31 de agosto de 2007
Las declaraciones del empresario, surgieron en el contexto de la movilización de los trabajadores subcontratados de CODELCO y de la convocatoria a movilizarse, hecha por la CUT el 29 de agosto del año pasado, la importancia de esas declaraciones, radican en la presión ejercida por el empresariado al gobierno de la presidenta Bachelet, pero también sobre sus socios en lo político, ubicados en la Alianza.
Apresurados en buscar una propuesta atractiva al tema laboral, la derecha se enfrascó en una discusión inútil, sobre quien era dueño de algunas ideas que beneficiarían a los trabajadores de tiendas comerciales, la situación distanció una vez más a Longueira y Allamand, condenando al proyecto al fracaso, eso ocurría en septiembre del año 2007.
En el mismo mes la fundación Chile 21, presenta un trabajo titulado «La negociación colectiva del futuro en Chile» elaborado por María Ester Feres y Ricardo Infante, la primera abogada y Directora del Centro de Estudios laborales de la Universidad Central y el segundo economista y Director del Taller de empleo de la Fundación Chile 21.
En el apartado C de dicho trabajo, en el punto siete de destaca como propuesta. El reconocimiento legal del derecho a huelga, en el punto ocho, letra d, se plantea que el sindicato es el sujeto único de negociación y donde no exista se acepta la existencia de un comité de empresa que represente a los trabajadores. Enfatizo estos dos puntos, por la relevancia que tienen en la larga lucha por la recuperación de los derechos laborales, más allá que queden archivados, en el ir y venir de la casta política gobernante.
El mundo laboral, según Libertad y Desarrollo
Para el Centro de Estudios Libertad y Desarrollo, el tema laboral es de reflexión permanente y su defensa irrestricta del actual legislación laboral, resulta voluminosa.
El 7 de diciembre de 2007 elaboran trabajo titulado «Los beneficios de mantener el reemplazo en la huelga», donde se establece por principio que cualquier intromisión del Estado en esta materia «atenta contra la propiedad privada, pues se está negando la posibilidad de hacer uso de un bien a su dueño, afectando así uno de los elementos del derecho de propiedad», pero luego el discurso ideológico se radicaliza aún más «Basta con que exista la posibilidad de reemplazar, para que se moderen las condiciones iniciales, generando un acuerdo de mercado que tienen un bajo costo para la sociedad. Al eliminar el reemplazo, se otorga una mayor cantidad de presión a un grupo de trabajadores y se restringe la posibilidad de que otros puedan acceder a la empresa».
Si los técnicos del pensamiento conservador se niegan al derecho real a huelga, si además rechazan un nuevo modelo de negociación colectiva, que busca mejorar las remuneraciones, porque en sus conceptos económicos, dichos salarios aumentan y deben aumentar a futuro, en relación con la productividad (Ver trabajo «Derribando mitos en materia de institucionalidad laboral» noviembre de 2007, Libertad y Desarrollo).
El gran desafío en el terreno laboral para estos técnicos, es la eliminación o reacomodo de la indemnización por años de servicio, como variante que contribuya a la rotación de los servicios laborales, porque permitiría la fácil contratación de nuevos trabajadores, hoy el empresariado se encuentra atado, según los expertos del Centro de Estudios. (Ver. «Agenda Laboral: El verdadero desafío», Mayo de 2007).
Del dicho, al hecho
La realidad del último tiempo sin embargo, escapa bastante a los deseos del empresariado como de sus centros de estudios, los trabajadores, han logrado poner en tela de juicio, la legalidad laboral, tienen en disputa al gobierno, obligando a dirimir sus diferencias en los tribunales, en mesas políticas etc.
La arremetida neoliberal no se ha dejado esperar, la conducta de los gerentes de CODELCO, el silencio de las autoridades, el uso y abuso de la fuerza pública en los conflictos laborales, ha generado respuestas contundentes por parte de los trabajadores, llegando incluso a situaciones bastante álgidas como las ocurridas en las salmoneras.
Puestas así las cosas, el llamado del diputado UDI Felipe Salaberry al gobierno, con el objetivo de constituir una mesa de diálogo entre empresarios y trabajadores surge como la apuesta de la clase política, generando un llamado de alerta para los trabajadores organizados, porque se busca una vez más desmovilizar, privar al mundo sindical de una de sus armas más efectivas, la presión social.
Para Arturo Martínez, presidente de la CUT la situación está clara «Cuando hay una ley tan restringida que tiene un marco que asfixia a los trabajadores, que los hace negociar por empresa, indudablemente que necesitamos salir de la ley, y la única forma que la gente sea escuchada es salirse del marco legal. Yo le he dicho al presidente de los empresarios (Alfredo Ovalle): ‘si ustedes no discuten el tema de la negociación supraempresas este año vamos a tener muchos conflictos laborales violentos». El Mercurio, jueves 24 de enero de 2008
El discurso de Martínez, se debe medir en relación a la apuesta de la multisindical en el último tiempo, las elecciones que se aproximan, la necesidad de ocupar los espacios necesarios con el fin de lograr mayores beneficios para los trabajadores, un elemento que no se puede desconocer, es que bajo el argumento de las movilizaciones, han reconquistado un espacio social importante.
Sentarse entonces en una mesa de negociación, los haría perder credibilidad y ceder protagonismo, la política de los acuerdos enarbolada en tiempos de Bustos, carece hoy de sentido, la democracia no se encuentra en peligro, el país tiene riqueza acumulada, los empresarios son los grandes beneficiados del modelo, el apoyo de sectores que parecían dormidos, supone un futuro de oportunidades que no se puede despreciar a costa de nada.
Omar Cid, Centro de Estudios Francisco de Bilbao