Hoy se nos ha ido Nelsón Mandela, al igual que el 9 de octubre de 1967 se nos fue el Ché Guevara. Dos muertes en dos momentos historicos y en dos formas diferentes. Madiba consiguió vencer la adversidad de 27 años de prisión y torturas mientras el Ché, fue asesinado por aquellos que en su […]
Hoy se nos ha ido Nelsón Mandela, al igual que el 9 de octubre de 1967 se nos fue el Ché Guevara. Dos muertes en dos momentos historicos y en dos formas diferentes. Madiba consiguió vencer la adversidad de 27 años de prisión y torturas mientras el Ché, fue asesinado por aquellos que en su día avalaron la prisión de Madiba. Unidos en la desgracia y unidos en el recuerdo para la humanidad.
Ha existido una historia oficial a cada momento histórico que se ha encargado de hacernos creer que el terrorismo se vestía de negro en Sudafrica, con Kufiya en Palestina, con la hoz y el martillo en Cuba o tras el cuadro de Bolivar en Venezuela. Una historia oficial que ha tratado de manera humillante a estos rebeldes con causa en los momentos de su auge político, y que quienes la han escrito, no han dudado en cada circustancia de usar cualquiera de las herramientas a su alcance para deshacerse de aquellos que se oponian a sus intereses.
Cada lider que ha dado la resistencia, catalogado por las élites dominantes en sus inicios como terroristas o amigos del terrorismo, ha terminado siendo un punto de referencia en ética y valores respetados hasta por sus más feroces enemigos.
El siglo XX ha dado grandes personas que inspiraron a luchar por derechos que se nos negaban como sociedades y plantar cara al abuso, la explotación y la exclusión que se potenciaba desde diferentes despachos. A muchas de aquellas personas que defendían idearios racistas y/o conservadores, se las ha tragado la tierra en el mejor de los casos sin hacer demasiado ruido, pasando al olvido y en algún caso perseguidos hasta después de muertos, como son los casos de Margaret Teacher, dama de hierro británica, de quién hoy nadie habla, Augusto Pinochet, quién terminó sentandose en un banquillo por crimenes contra su pueblo o Adolf Hitler, a quién su ideario se ha proscrito en Alemania y sus prácticas han sido censuradas a nivel mundial. Sin duda, los terroristas del pasado han terminado influyendo decisivamente en los valores del presente y no solo eso, han conseguido imponerse moralmente a quienes en sus momentos los censuraban o perseguian pasando a ser autenticos heroes de la humanidad.
Me imagino que muchos de estos conservadores desde donde quiera que esten, han de observar el devenir de los tiempos con frustración. Nelson Mandela, aquél sucio negro desarrapado que consiguió levantar un movimiento contra el racismo que ha marcado una étapa, no solo en Africa sino en la conciencia de todos los ciudadanos de paises desarrollados, se va entre un sin fin de honores de una punta a otra del globo terraqueo y sobreviviendo a la mayoría de sus enemigos. La muerte de Hugo Chavez también fue motivo de muestras de respeto en medio mundo, y el reconocimiento a su figura y a su obra en Venezuela por la mayoria de instituciones internacionales y un sin fin de lideres. Y para rematar, quién también ha sobrevivido a todos los lideres conservadores y retrogados es Fidel Castro, a quién seguro que Madiba, Arafat, el Ché y Hugo Chavez le prepararán un buen lugar junto a ellos cuando llegue su hora. Reagan, Teacher, Bush y el resto de mediocres históricos han de estar realmente jodidos de ver que pasó su momento y nadie los celebra mientras los «terroristas» de su tiempo, no solo son celebrados sino despedidos con los maximos honores a nivel mundial. La historia nos dice que no estamos equivocados.
Publicado originalmente en http://activistak.com/
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