«A lo que se refiere este tema es a un conjunto de abogados que estén interesados en expandir actividades hacia América Latina y tendrían interés en poder tener una información más adecuada de lo que ocurre en esta parte del mundo», dijo el ex mandatario, quien por haber llegado a la Presidencia tiene una pensión vitalicia que suma en total 12 millones de pesos mensuales.
El ex presidente Ricardo Lagos, junto al ex mandatario de Colombia Andrés Pastrana, formarán parte del nuevo consejo asesor del despacho de abogados español Chávarri & Muñoz, especializado en derecho de empresas.
Según informaron a la Agencia EFE fuentes del bufete, también se ha incorporado a la firma el ex ministro de Relaciones Exteriores de Perú José Antonio García Belaúnde.
Ricardo Lagos fue presidente de Chile desde 2000 a 2006 y es, según destaca el bufete, uno de los políticos más reputados del país y una de las figuras más representativa de la Concertación de Partidos por la Democracia y mentor de la actual presidente de Chile, Michelle Bachelet.
Es, además, abogado, economista, académico e investigador y cuenta con una amplia experiencia institucional y empresarial.
Lagos, quien recibe en su calidad de ex mandatario una pensión vitalicia de cinco millones y medio de pesos, pero que sumando gastos de traslado y de oficinas se eleva a poco menos de $13 millones, se refirió brevemente esta mañana a esta información durante un encuentro con alcaldes de distintas comunas.
«Entiendo que a lo que se refiere este tema es a un conjunto de abogados que estén interesados en expandir actividades hacia América Latina y tendrían interés en poder tener una información más adecuada de lo que ocurre en esta parte del mundo», dijo.
Por su parte, Andrés Pastrana, expresidente de Colombia (1998-2002), es abogado y posee estudios de Derecho Internacional por la Universidad de Harvard (EE.UU.).
Al igual que Ricardo Lagos, según destaca el bufete, es una de las figuras políticas más representativas del país donde fue también, entre otras responsabilidades, alcalde de Bogotá.
José Antonio García Belaúnde, ex canciller de Perú (2006-2011), es hasta el momento el jefe diplomático más veterano en el cargo logrando durante su mandato la entrada de su país en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Según el bufete, que preside Antonio E. Chávarri y cuyo director general es Santiago Muñoz, con los tres nuevos fichajes el despacho incorpora toda la experiencia, conocimiento y prestigio de los miembros de su nuevo Consejo Asesor en Latinoamérica, tanto a nivel institucional como empresarial.
Grandes y medianas empresas
En tanto, en su página web Chávarri & Muñoz detalla que sus «socios y directores de cada área son reconocidos expertos con sólida formación que dirigen a nuestros profesionales de forma directa, involucrándose en los asuntos de nuestros clientes, ofreciendo un trato directo y personalizado».
Y agrega que «nuestros clientes son principalmente grandes y medianas empresas de sectores de actividad muy diversos así como gran número de entidades financieras, lo que nos permite tener amplia experiencia en los distintos sectores que componen el tejido empresarial económico».
Los pasos de Aznar y Tony Blair
Con este nuevo rol que lo dejó con un pie en el mundo privado, Ricardo Lagos se suma a otros renombrados ex mandatarios que han asumido cargos relevantes en la asesoría de grandes empresas, como el caso del ex presidente del gobierno español José María Aznar, quien hizo noticia hace pocos meses al convertirse en asesor peronal del presidente de la firma de auditoría y servicios empresariales KPMG, John Scott, firma que el año pasado facturó 23.420 millones de euros.
Otro caso es el del ex primer ministro británico Tony Blair, quien desde que dejó la política en 2007 ha recibido ganancias por más de 15 millones de euros, gracias a sus incursiones en diferentes negocios, que incluyeron asesoramiento de gobiernos, su trabajo de consultoría para el banco de inversión norteamericano JP Morgan y numerosas charlas en distintos países.
Según informó la semana pasada el diario The Guardian, Blair ha insistido en que no quiere ser «súper rico» y ha dicho que sus ingresos sufragan proyectos filantrópicos, como algunos trabajos de desarrollo en África. No obstante, tras convertirse en uno de los oradores públicos mejor pagados del mundo y de desplazarse por todo el mundo en un avión privado, el ex «premier» ha sido blanco de críticas por su estilo de vida.