Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) se mantienen a la expectativa de que el presidente colombiano, Álvaro Uribe, anuncie las garantías para la liberación unilateral de los militares Pablo Emilio Moncayo y Daniel Calvo, y la entrega del cuerpo de un policía que perdió la vida en cautiverio. Iván Márquez, integrante del Secretariado de […]
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) se mantienen a la expectativa de que el presidente colombiano, Álvaro Uribe, anuncie las garantías para la liberación unilateral de los militares Pablo Emilio Moncayo y Daniel Calvo, y la entrega del cuerpo de un policía que perdió la vida en cautiverio.
Iván Márquez, integrante del Secretariado de las Farc, señaló en el portal Agencia de Noticias Nueva Colombia (Anncol), que confían en que la entrega desencadene un ambiente propicio que permita dar comienzo a las gestiones para un intercambio de retenidos por miembros del grupo armado.
«Una vez sean definidas por el Gobierno esas garantías se procederá a la liberación de los dos prisioneros de guerra», dijo Márquez, cuyo nombre de pila es Luciano Marín Arango.
Agregó que la entrega de los dos militares y el cadáver del capitán de la Policía Julián Guevara se hará a una comisión humanitaria que estará liderada por la senadora colombiana Piedad Córdoba, junto a la Cruz Roja Internacional y la Iglesia Católica.
Asimismo, Márquez se declaró esperanzado en que la próxima entrega unilateral propicie un acuerdo para el regreso de 23 policías y militares a sus hogares.
«Luego de haber liberado unilateralmente a más 300 prisioneros capturados en combate, las Farc aspiran, mediante acuerdo, a que sean liberados unos 500 guerrilleros presos en las cárceles del régimen», declaró el líder colombiano.
En tanto, el grupo armado se compromete a dejar en libertad a una veintena de oficiales y suboficiales de las Fuerzas Armadas que aún permanecen en las montañas, fijó.
Ante las vicisitudes que rodearon la pasada liberación de militares y policías en el departamento colombiano de Caquetá, en cuyo desarrollo el Ejército asesinó a un guerrillero y desapareció a otro, las Farc han solicitado estas medidas al Gobierno.
El compromiso de entrega se trata del cabo Moncayo y del soldado Josué Daniel Calvo, ambos del Ejército, así como los restos óseos del capitán de la Policía Julián Guevara.
Desde diciembre de 1997, el cabo Moncayo se mantiene en poder del grupo armado, uno de los retenidos con mayor tiempo en la selva colombiana; en tanto que Calvo se encuentra cautivo desde el pasado mes de abril.
El miembro de la Policía falleció de una presunta enfermedad en 2006, luego de permanecer ocho años en manos de las Farc.