En el famoso programa estelar de los domingos, «Tolerancia Cero» [1] , Fernando Villegas, conversando con Marcela Mella [2] , sostiene que minera Los Pelambres, hacia donde se dirigirá la energía de la Central Hidroeléctrica Alto Maipo, beneficia al país y su crecimiento. De ahí que, según él, el impacto socio-ambiental, por decirlo coloquialmente, «valdría […]
En el famoso programa estelar de los domingos, «Tolerancia Cero» [1] , Fernando Villegas, conversando con Marcela Mella [2] , sostiene que minera Los Pelambres, hacia donde se dirigirá la energía de la Central Hidroeléctrica Alto Maipo, beneficia al país y su crecimiento. De ahí que, según él, el impacto socio-ambiental, por decirlo coloquialmente, «valdría la pena». Hace falta, sin embargo, decirle al Sr. Villegas que se equivoca. Veamos por qué.
Como es sabido, la actividad minera privada en Chile se lleva anualmente exorbitantes cifras. AMSA (Luksic), propietaria de minera Los Pelambres, no es excepción [3] . Así mismo, el Royalty [4] minero reporta ingresos irrisorios para el Estado de Chile [5] , además, no existe una política tributaria que redistribuya los cuantiosos ingresos de la minería privada [6] . Es un mito, la minería privada no aporta al «Sueldo de Chile» y eso que hoy representa junto a la Minería Estatal, el 14% del PIB [7] .
De esta manera, la intervención de Villegas en el programa redunda en una discusión de carácter central: no se trata de si la energía es producida por generación hídrica, solar o termoeléctrica, sino para qué es producida y cuáles son las dinámicas que alimenta. ¿Hacia dónde va esta carrera obsesiva por construir centrales de energía por todo Chile? ¿Por qué el apuro, si el destino es el mismo, la minería que saquea Chile y profundiza la desigualdad social? ¿Por qué el Estado, Agenda Energética mediante, defiende desde lo público los intereses privados?
Indudablemente que Alto Maipo no debe construirse, tanto por sus impactos socio-ambientales como por el destino de la energía, pero en esa lucha opositora debemos destacar también las decenas de situaciones igual o más catastróficas: Puchuncaví (afectada también por Gener), Pilmaikén o Los Cóndores, por mencionar algunos conflictos nacidos de una misma matriz: las necesidades mineras, la acumulación y expansión de ese sector de la economía y la batalla por expropiar de toda soberanía al pueblo.
No podemos concebir el hecho de que para aumentar el beneficio de la minería se deba exprimir la vida humana y la naturaleza, hasta dejarlas agotadas. ¿Qué pasará con las y los que vienen? Mientras tanto, la Presidenta Bachelet y el Ministro de Energía Máximo Pacheco, parecieran defender desde el Estado los intereses privados. Alto Maipo no puede construirse, destruir patrimonio de todos y todas, sólo para la ganancia del 0,01% más rico de este país ¿te parece correcto?
No cederemos, las y los opositores a Alto Maipo manifiestan una conciencia: la sed del gran empresariado de este país nos dejará sin agua, pero, habría que agregar, nos privarán también de futuro.
Es por ello que hay que organizarse, sumarse a esta lucha. Cada vez somos más quienes luchamos en distintos frentes bajo principios de justicia ambiental y social, movidos por la solidaridad, la soberanía y la conciencia de estar fortaleciendo la dignidad de nuestra clase por mucho tiempo postergada.
[1] Revisar entrevista en http://www.chilevision.cl/
[2] vocera de la Coordinadora Ciudadana Ríos del Maipo.
[3] Ver cifras en: http://www.latercera.com/
[4] Ver antecedentes en: http://ciperchile.cl/2011/07/
[5] Ver antecedentes en: http://www.pulso.cl/noticia/
[6] Para profundizar ver: http://ciperchile.cl/2011/07/
[7] Referencia 2013: http://www.latercera.com/
https://www.facebook.com/colectivo.lasavia
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de los autores mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.