Los vecinos de Lavapiés dicen ¡Basta! a los controles y redadas racistas que lleva a cabo en el barrio la Policía

Los vecinos y vecinas de Lavapiés llevamos meses asistiendo con horror e impotencia a los controles y redadas racistas que la Policía realiza en nuestros espacios públicos. Somos perfectamente conscientes de que estas actuaciones policiales ilegales e inmorales generan auténticas tragedias entre nuestros vecinos y vecinas migrantes y sus familias, y que tienen como objetivo deteriorar profundamente la convivencia en nuestro barrio, puesto que intentan difundir entre nosotrxs la idea de que nuestros vecinos y vecinas de origen extranjero son delincuentes, son malas personas, sobran.

Por eso, hemos decidido decir definitivamente ¡Basta! a los controles de identidad por perfil racial y a las redadas contra la población migrante de nuestro barrio. Decidimos decir definitivamente ¡Basta! a las detenciones preventivas, que no son más que secuestros orquestados por quienes ostentan el poder político, económico y policial contra el sector más vulnerable de la gente de nuestro vecindario.

Todos y todas sabemos que las víctimas de estos abusos son las mismas personas migrantes que hasta hace pocos años las personas del gobierno, la banca y las empresas, han explotado como mano de obra barata, enriqueciéndose así de forma obscena. Ahora, en tiempos de lo que ellxs han llamado «crisis económica», parece que les sobran y necesitan borrarlos de nuestras calles.

Pero nosotrxs tenemos muy claro que ningún ser humano es ilegal, y que nuestros vecinos y vecinas migrantes son personas, no mercancías. Estamos bien informadxs; sabemos que los controles racistas de la Policía, además de ser injustos e ilegítimos, también son inconstitucionales:

• Los controles de identidad por perfil étnico violan de forma flagrante el derecho a la libertad y a la intimidad de las personas, el artículo 14 de la Constitución Española y el Dictamen del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas de 17 de agosto de 2009 (Comunicación núm. 1493/2006), reiterado en 2011. Y lo que es más importante, atentan gravemente contra la prohibición de discriminación recogida en la Constitución, en el artículo 5, 1-2 de la Ley Orgánica 2/86 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y en los tratados y acuerdos internacionales en materia de derechos fundamentales y libertades públicas suscritos por el Estado español.

• No estar en posesión de un permiso de residencia en vigor en nuestro país constituye una falta administrativa, no un delito. Los artículos 19.2 y 20.1 de la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana (1/1992) determinan que legalmente la realización de controles masivos e indiscriminados de identificación en lugares públicos sólo queda autorizada cuando haya constancia de la existencia de un delito causante de grave alarma social y tenga como fin descubrir a lxs autores del mismo para detenerlxs y recabar pruebas. Por lo tanto, la ley sólo autoriza el desarrollo de este tipo de actuaciones policiales en el marco de funciones de policía judicial y, en ningún caso, en funciones de policía administrativa.

• Los traslados a comisarías de personas que ya se han identificado ante la policía (por ejemplo enseñando su pasaporte), por mucho que sus agentes sospechen que carecen de dicho permiso de residencia, suponen «detenciones preventivas». Las detenciones preventivas están terminantemente prohibidas en nuestro país en casos de faltas administrativas, puesto que vulneran de raíz el artículo 17.1 de la Constitución Española, el artículo 9.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el artículo 5.1. del Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales, suscrito por el Estado español.

Por todo eso, la Asamblea Popular de Lavapiés HA DECIDIDO:

1. Declarar el barrio de Lavapiés «territorio libre de redadas». No vamos a permitir ni un control racista más en nuestro vecindario. A partir de hoy, cada vez que uno de nuestros vecinos o vecinas sufra un control de identidad o una detención por razones racistas, realizaremos acciones directas de desobediencia civil pacífica para evitar que sean conducidos de forma ilegal a dependencias policiales, centros de internamiento y/o que sean deportadxs.

2. Denunciar la impunidad con la que actúan las personas e instituciones que ordenan y ejecutan controles de identidad por perfil racial y sus consiguientes detenciones preventivas y exigir que sean castigadas en función del daño que causan a sus víctimas. Nuestrxs gobernantes, las cúpulas policiales, y el ministerio del Interior son responsables y saben perfectamente que este tipo de prácticas son ilegales y constitutivas de delitos de abuso de autoridad y discriminación, y por eso niegan sistemáticamente su existencia.

3. La paralización de redadas es la expresión de la sensibilidad de nuestro barrio ante la injusticia de los controles de identificación por perfil racial y el acoso policial permanente. Frente a sus armas de fuego, sus porras y sus escudos, seguiremos respondiendo de forma no violenta, todxs juntxs y con las manos en alto. No nos sirven los argumentos de algunos de ellos, asegurando que se limitan a cumplir órdenes. Por tanto, exigimos a los funcionarios de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado que se nieguen a realizar más redadas, controles y detenciones por motivos racistas.

4. Realizar una llamada a la convivencia pacífica basada en el respeto a todas las personas, pidiendo a todos los vecinos y vecinas del barrio su participación para lograrla, reflexionando además sobre las duras condiciones de vida de parte de la población migrante en nuestro barrio, ante la pasividad de las instituciones.

La próxima vez que vengan a llevarse a alguno de nuestrxs vecinxs, tendrán que llevarnos a todos.

NI UNA REDADA MÁS EN LAVAPIÉS.

NO A LOS CONTROLES RACISTAS

NINGÚN SER HUMANO ES ILEGAL

En Lavapiés, a 16 de julio de 2011

Asamblea Popular de Lavapiés