El 31 de Marzo, los portuarios tienen su primera victoria judicial. Hoy el Tribual de Letras del Trabajo de Antofagasta resolvió condenar a la patronal Ultraport por haber incurrido en remplazos y reintegros ilegales durante la huelga, inclusive contra el pronunciamiento del a Inspección del Trabajo que ella misma, la empresa, solicitó. Esta causa partió […]
El 31 de Marzo, los portuarios tienen su primera victoria judicial. Hoy el Tribual de Letras del Trabajo de Antofagasta resolvió condenar a la patronal Ultraport por haber incurrido en remplazos y reintegros ilegales durante la huelga, inclusive contra el pronunciamiento del a Inspección del Trabajo que ella misma, la empresa, solicitó.
Esta causa partió antes de iniciado el paro, toda vez que la patronal ofreciera peores condiciones que las de la negociación pasada (el contrato colectivo que se encontraba vigente), ante esto se les prohibiría el remplazo y reintegro de trabajadores, antes de los 15 y los 30 días respectivamente, la empresa hizo caso omiso, vulneró su propia ley. Pero una vez terminada la huelga se iniciaron las causas judiciales. Luego de la audiencia de juicio, en esta causa, en donde las declaraciones en juicio del Jefe de Relaciones Laborales de Ultraport, Julio Duarte, obligaron al abogado de la empresa a retirar a todos sus testigos, ya se avizoraba el panorama, una victoria judicial a favor del sindicato.
La lección es que los trabajadores no deben confiarse ni en los empresarios ni en su ley, pues nuevamente vemos como el Código Laboral Pinochetista se queda corto ante la realidad de la vida del trabajo, donde empresarios y trabajadores miden sus fuerzas, y donde los empresarios usan todo el aparataje estatal para aplastar la protesta obrera, pues por más que esta sea una victoria judicial la huelga ya ha terminado, y el funesto Código Laboral sigue indemne.
Hoy con esta lucha trasladada a tribunales se abre una primera victoria, pero no podemos conformarnos con esto, este debe conformarse como un piso para continuar avanzando, recuperar el sindicato y aprestar las fuerzas, para preparar los próximos pasos (no solo ante la situación judicial) debemos mantener rodeando de solidaridad la causa portuaria.
De esta forma, los esfuerzos de quienes impulsamos Coordinadoras de Apoyo (en Antofagasta, Santiago y Valparaíso), tanto como quienes participamos en la Defensoría Popular Antofagasta, son esfuerzos que han buscado visibilizar la lucha portuaria, esfuerzos que buscan mantenerlos en pie, pues bien sabemos, que el único reducto para vencer no vendrá de la mano de los explotadores o sus representantes, nada deben esperar los trabajadores de los empresarios o sus agentes, sea que estén en el Congreso o en la Moneda, sea que prometan al oro y al moro, pues tras los gobiernos de la Concertación (y hoy el de la Nueva Mayoría) y el gobierno de la Alianza (pasado gobierno de Piñera) los trabajadores no han ganado nada gratis, todo ha sido conquistado con unidad, organización y lucha, ningún patrón debe cegar a los trabajadores en este camino, por lo mismo quienes militamos en el Partido de Trabajadores Revolucionarios, afirmamos que no solo se celebra este primer paso en Mejillones, sino que lo celebramos todos y todas las que vibramos con cada paso que dan los trabajadores, lo celebramos todas y todos los que estamos convencidos de que en la clase trabajadora descansa el futuro.
Por lo mismo, para dar pasos concretos hacia el convencimiento de los trabajadores en sus propias fuerzas, en reconocer a sus verdaderos aliados, es necesario que crezcan y se fortalezcan en todo el país las Coordinadoras de Apoyo, para prepararnos ante próximas luchas y, con ello, organizar en torno ello a más y más estudiantes, junto a sus Federaciones y Centros de Alumnos, a más Sindicatos y sus trabajadores, a más organizaciones de izquierda, en definitiva a quienes estén prestos a dar estas luchas.
Daniel Vargas, Miembro de la Defensoría Popular Antofagasta