Ayer por la mañana falleció un hombre justo, bueno, íntegro y revolucionario que supo defender las luchas de los trabajadores, sufriendo por ello el destierro y la persecución implacable de la dictadura de Pinochet. Ayer por la mañana, a las 8:00 y a los 94 años falleció don Luis Corvalán Lepe, ex secretario general del Partido Comunista […]
Ayer por la mañana falleció un hombre justo, bueno, íntegro y revolucionario que supo defender las luchas de los trabajadores, sufriendo por ello el destierro y la persecución implacable de la dictadura de Pinochet.
Ayer por la mañana, a las 8:00 y a los 94 años falleció don Luis Corvalán Lepe, ex secretario general del Partido Comunista de Chile y figura emblemática de lucha por los derechos de los más desposeídos. Acción permanente de esta figura y que es reconocida en todo el orbe.
Corvalán Lepe, de profesión profesor y periodista , nació el 14 de septiembre de 1916 en Puerto Montt y tuvo un destacado protagonismo en su partido desde fines de la década del ’40 y, sobre todo, durante el gobierno del Presidente Salvador Allende . Ya en 1947 , cuando fue proscrito el PC , fue llevado a los campos de concentración de Pitrufquén y Piragua , viviendo en situación precaria.
Fue elegido senador en 1961 por las provincias de Ñuble, Concepción y Arauco y en 1969 por Aconcagua y Valparaíso . Además cumplió variadas e importantes tareas en la conformación de la Unidad Popular y, luego en el gobierno de su amigo el Presidente Allende con quién tenía plena confianza más allá de la pura área política. En este contexto, detalla importantes episodios de su fructífera vida política en sus Memorias: «De lo Vivido y lo Peleado» que salió en agosto de 1997 (Lom Ediciones).
Tras el golpe de Estado de 1973 , Luis Corvalán fue detenido y deportado a la Isla Dawson , y durante su permanencia fue galardonado con el Premio Lenin de la Paz . Además de pasar por los campos de concentración de Ritoque y Tres Alamos. Posteriormente don Lucho Corvalán recibió asilo en la Unión Soviética hasta 1988 , cuando regresa a Chile y participa del proceso democratizador del país.
De vuelta en Chile y en pleno tránsito a la democracia, Luis Corvalán hizo importantes aportes para que Chile superara los resabios dictatoriales y la inicua exclusión política. Para ello usó variados caminos y uno de ellos, aparte de la vida partidaria, fue escribir una serie de artículos y libros dando cuenta de su clara e inequívoca posición política comprometida con los valores de la justicia, los derechos humanos y la democracia.
Don Luis Corvalán, respetado por creyentes y no creyentes -tuvo una respetuosa amistad con el cardenal Raúl Silva Henríquez- queda en la memoria del Pueblo chileno como un hombre bueno, íntegro y revolucionario siempre fiel a las causas buenas y justas para todo hombre y mujer que sufre los embates perversos del capitalismo neoliberal que aplasta la libre conciencia humana. Don Lucho ya descansa en Paz.