Miles de personas -12.000 según los organizadores- se manifestaron ayer por la tarde en Madrid bajo una intensa lluvia en conmemoración del 79 aniversario de la proclamación de la República y para pedir una III República. La calle Alcalá, entre la plaza de Cibeles, donde se inicióo la manifestación, y la Puerta del Sol, se […]
Miles de personas -12.000 según los organizadores- se manifestaron ayer por la tarde en Madrid bajo una intensa lluvia en conmemoración del 79 aniversario de la proclamación de la República y para pedir una III República.
La calle Alcalá, entre la plaza de Cibeles, donde se inicióo la manifestación, y la Puerta del Sol, se llenaron de banderas tricolores que ondeaban los participantes, que corearon consignas a favor de la República y en contra de la monarquía.
Los manifestantes, encabezados por una pancarta en la que se leía «Por la III República, no a la Constitución monárquica del 78», portaban pancartas y banderas de las más de 20 organizaciones que integran la Coordinadora Republicana de Madrid, entre ellas el PCE, el PCPE, Los Verdes de la Comunidad de Madrid, Unidad Cívica, PTE, Iniciativa Comunista o Izquierda Anticapitalista.
La conocida consigna «España, mañana, será republicana» fue la más coreada por los manifestantes quienes también dirigieron gritos contra la Familia Real y la Conferencia Episcopal.
A su paso por el Ministerio de Igualdad, donde ondea la enseña constitucional, los manifestantes han comenzado a gritar: «No es la verdadera, esa bandera».
También hubo referencias al juez Baltasar Garzón y a la Memoria Histórica en pancartas como «No es Garzón el problema, fue la transición», «Juzgan a Garzón, no al Borbón» o «Verdad, justicia y reparación para las víctimas del franquismo».
A su llegada a la Puerta del Sol, donde fueron recibidos por el himno de Riego, el actor Guillermo Toledo, tras desplegar la bandera tricolor, leyó un extenso manifiesto en el que se denunció que la «crisis capitalista», además de a los millones de parados, ha debilitado a toda la clase obrera.
Además de criticar el Plan Bolonia en materia educativa, la discriminación salarial de las mujeres, la Ley de Extranjería y la privatización de la sanidad, arremetió contra el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y contra «las demás fuerzas del Parlamento burgués», así como contra la Audiencia Nacional.
En declaraciones a los periodistas, Guillermo Toledo consideró «anacrónico» el sistema monárquico y dijo que con actos como éste pretenden que su mensaje llegue a la sociedad, al Gobierno y a los que legislan «para que el pueblo pueda decidir si está de acuerdo con la monarquía parlamentaria o prefiere una república democrática».
Sobre el proceso contra Garzón en el Tribunal Supremo por declararse competente para investigar las desapariciones durante el franquismo, el actor aseguró: «estamos siendo la vergüenza del mundo entero».
«Un país que se dice democrático está impidiendo mediante denuncias del partido que representó a los asesinos en su momento» que se pueda investigar el asunto, sostuvo el actor, quien aseguró que tratan de «tapar los crímenes».