Un importante grupo de militantes y legisladores del Partido Laborista británico pidió este lunes al gobierno de Londres que suspenda su ayuda militar a Colombia. Entre más de 150 firmantes de la carta abierta que apareció en la prensa londinense están el alcalde de Londres, los dirigentes de los sindicatos afiliados al partido en el […]
Un importante grupo de militantes y legisladores del Partido Laborista británico pidió este lunes al gobierno de Londres que suspenda su ayuda militar a Colombia.
Entre más de 150 firmantes de la carta abierta que apareció en la prensa londinense están el alcalde de Londres, los dirigentes de los sindicatos afiliados al partido en el poder y los integrantes del comité ejecutivo nacional laborista que no están en el gobierno.
«Colombia tiene uno de los peores récords en materia de derechos humanos en el mundo», señala la carta, que denuncia que en los últimos 15 años han sido asesinado 4.000 sindicalistas en ese país.
El embajador de Colombia en el Reino Unido, Carlos Medellín, respondió a BBC Mundo que su gobierno nunca ha negado que haya habido asesinatos de sindicalistas, «pero otra cosa es que se señale directamente al gobierno».
«La mayoría de estos asesinatos se atribuye a las fuerzas armadas de Colombia y a los paramilitares que tienen apoyo del Estado», acusa el documento.
Petición a Londres
La carta urge al gobierno de Gordon Brown a suspender la ayuda «hasta que el Estado colombiano aplique las repetidas recomendaciones del alto comisionado de la ONU para los derechos humanos.
Mariella Kohn, de la organización no gubernamental «Justicia para Colombia», responsable de la publicación del documento, dijo a BBC Mundo que los firmantes creen «en una solución política negociada» al conflicto que ya lleva 40 años.
Kohn reconoce que la organización «no tiene información concreta sobre la ayuda militar» que recibe Colombia del Reino Unido, «ni para qué se está usando», pero señala que «las violaciones a los derechos humanos son demasiadas como para no ser sistemáticas».
En caso de que el gobierno británico no siga la recomendación que presentan en su carta abierta, lo que buscan es que se suspenda la ayuda hasta que se apliquen restricciones o haya transparencia en la forma en que se usan los fondos.
Según Kohn, Gordon Brown va a recibir a una delegación hablar sobre el tema con más detalle.
Situación difícil
«No es ninguna sorpresa», señaló a BBC Mundo el embajador de Colombia en el Reino Unido, Carlos Medellín. «Esa organización (Justicia para Colombia) lleva años insistiendo en el tema, y ha intensificado su campaña en los últimos meses con ocasión del nuevo gobierno de Gordon Brown y aprovechando la conferencia del Partido Laborista».
Los asesinatos de sindicalistas «han sido una situación muy difícil», declaró el diplomático, «porque desafortunadamente están bajo fuego cruzado en el conflicto interno de Colombia».
El embajador explicó que los sindicalistas «han sido señalados por ambos bandos como colaboradores o como amigos. Hay una situación de peligro que nadie va a negar, pero no es cosa de hoy ni de ayer sino muy antigua».
Medellín enfatizó que «un sindicalista asesinado es malo para cualquier sociedad, pero otra cosa es que se señale directamente al gobierno».
En todo caso, el diplomático indicó a BBC Mundo que la ayuda internacional del Reino Unido a Colombia asciende a unos US$700.000, y la ayuda militar «no es en dinero».
Aunque el embajador Medellín toma en serio los señalamientos que se hacen en la carta abierta, explica que la embajada más grande del Reino Unido, después de Washington, está en Bogotá.
«El Reino Unido tiene información permanente y completa sobre Colombia», resumió el diplomático. «Tenemos buenas relaciones y hasta ahora no hay ninguna variación al respecto».