Desde la semana pasada se declararon en huelga de hambre 18 internos de la cárcel de la Tramacúa – Valledupar exigiendo que los trasladen ya que se encuentran en fase de mínima seguridad y el establecimiento opto por aislarlos. La guardia y la Dirección los han mantenido presionando para que desistan a la protesta, en […]
Desde la semana pasada se declararon en huelga de hambre 18 internos de la cárcel de la Tramacúa – Valledupar exigiendo que los trasladen ya que se encuentran en fase de mínima seguridad y el establecimiento opto por aislarlos. La guardia y la Dirección los han mantenido presionando para que desistan a la protesta, en este momento se encuentran resistiendo el aislamiento el compañero ÁNGEL BARBOSA QUINTERO con td 2247 el cual se encuentran con bastante deterioro de la salud físico y psicológico no le están colocando suero lo mantienen presionando no lo dejan llamar el cabo EINER GUERRERO quien lo ha estado presionando. Los internos VERTULFO SANTAMARIA con td 2858 y ANDY VILLALBA MONTERROSA con td 6018 quienes se encuentra en los calabozos de sanidad en huelga de hambre hace más de un mes y no le han querido dar solución a su problemática.
El preso ULISES GUERRERO LOAIZA, un señor de avanzada edad de la torre tres, quien desde la semana pasada se encontraba hospitalizado donde llevaba más de un mes en delicado estado de salud las enfermeras le dijeron que estaba bien que no tenía nada y solo le colocaban calmantes en ocasiones agua salínica que es lo que hacen muchas veces con los internos cuando presentan un dolor, cuando presintieron que ya estaba para morir lo trasladaron a Valledupar des de la semana pasada el día de ayer murió a las 8:30 am; hasta el día de hoy habían informado a la familia sobre su fallecimiento.
Este es otro crimen del INPEC porque el tratamiento a los presos es indignante pese que se hicieron denuncias a los diferentes medios informando la situación; incluso el Personero de Valledupar ante los medios de comunicación salió diciendo que «debíamos tener en cuenta que la cárcel no era un palacio que era una cárcel y que ese era el tratamiento que nos merecíamos»; según él, a nosotros no nos vulneran nuestros derechos.
Exigimos de inmediato solución estructural a las violaciones a los derechos humanos en la cárcel de la Tramacúa; en igual sentido, solicitamos el cierre definitivo de este centro de tortura. Exigimos castigo para los responsables de muerte.