Las voceras de las estudiantes del Liceo Nº 1 de Santiago y donde estudiara la escuela secundaria la presidenta Michelle Bachelet, reconocieron el rotundo fracaso de las conversaciones sostenidas hasta ahora, para impedir la medida de expulsión autoritaria producida por los máximos directivos del liceo. La Municipalidad de Santiago, cuyo alcalde es un empresario ligado […]
Las voceras de las estudiantes del Liceo Nº 1 de Santiago y donde estudiara la escuela secundaria la presidenta Michelle Bachelet, reconocieron el rotundo fracaso de las conversaciones sostenidas hasta ahora, para impedir la medida de expulsión autoritaria producida por los máximos directivos del liceo.
La Municipalidad de Santiago, cuyo alcalde es un empresario ligado a la extrema derecha (UDI), Raúl Alcaíno, mantendrá, tal como lo anunció desde un comienzo, su respaldo a las sanciones impuestas por los directores de los establecimientos del municipio santiaguino.
La medida la dio a conocer Alexis Ochoa, director educacional del municipio, durante una reunión sostenida esta mañana con un grupo de diez apoderados y cinco alumnas del Liceo Nº 1 de Niñas.
«Alexis Ochoa lo que hizo fue ratificar la primera versión de la Municipalidad. En el fondo, que ellos (las autoridades de cada colegio) decidieran las sanciones», dijo la vocera de las estudiantes, Karina Benavides.
«La intención de nosotros fue que Ochoa se manifestara en contra de las medidas», agregó Benavides, quien reconoció lo nefasto de la gestión.
Por su parte, Fabiola Melo, representante del Centro de Alumnos del Liceo Nº 1, calificó como una pérdida de tiempo el encuentro. «Nos dijo que él ahora no podía intervenir y que iba a respetar decisión de los directores de los distintos recintos educacionales de la municipalidad», manifestó.
Por su parte, José Hidalgo, representante de los apoderados del colegio, pidió la remoción de la directora del establecimiento, Julia Alvarado.
El grupo de alumnas y apoderados del liceo llegó el lunes por la mañana a la Municipalidad de Santiago para solicitar que no se apliquen algunas de las sanciones impuestas por la directora del recinto, como la cancelación de matrícula a 27 estudiantes que participaron en la última toma del edificio y las diversas movilizaciones que vienen desarrollando los estudiantes secundarios chilenos por sus justas reivindicaciones.
En respaldo a esta iniciativa, alrededor de 200 personas, entre estudiantes, padres y alumnos del Instituto Nacional, marcharon hacia la Plaza de Armas y efectuaron una manifestación de protesta por las medidas tomada por el municipio.
También llegó hasta el lugar la portavoz de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes de Secundarios (ACES), María Jesús Sanhueza, en apoyo a las alumnas que serían expulsadas.
«Vamos a dar todo el apoyo y nos movilizaremos todas las veces que sea necesario para que nuestros compañeros sean reintegrados. Es una situación súper grave la de pasar a llevar el derecho a la educación», dijo la vocera de las ACES.
Las críticas de la dirigente estudiantil también apuntaron al Ministerio de Educación, que se encuentra detrás de las medidas de expulsión, «El ministerio se ha lavado las manos. Tiene que preocuparse de que cada estudiante tenga derecho a educarse», agregó. Recordemos además, que el derecho a la educación está consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU y en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, y que recientemente ha manifestado su preocupación por la falta de ‘transparencia informativa de las entidades públicas’ chilenas, además de exigir la derogación de la ley de amnistía que protege a los violadores de los derechos humanos de la dictadura del criminal y ladrón Augusto Pinochet.
Mientras tanto, padres, apoderados, estudiantes y organizaciones sociales han convocan a una movilización general para protestar por las medidas de fuerzas impuestas por los sostenedores de los establecimientos educacionales que han decidido las expulsiones.
A través de una declaración pública efectuada en el Liceo de Aplicación, titulada «Los estudiantes de Chile no están solos», un conjunto de dirigentes sociales, sindicales, deudores habitacionales, padres y estudiantes llamaron a manifestarse en forma pacífica el día jueves 26 de octubre a las 18:00 hrs. en Plaza Italia en solidaridad con los jóvenes sancionados y el movimiento estudiantil, que está exigiendo la derogación de la Ley Orgánica Constitucional de Educación (LOCE) que fuera promulgada por el régimen militar y que ha transformado la educación en Chile en una mercancía más, y de las de peor calidad existente en América Latina.