El pasado lunes 6 de marzo se dieron cita en las instalaciones de la SEDAMA los líderes campesinos de diferentes comunidades y asociaciones de la zona media y alta de Tuluá para establecer compromisos en la idea de trabajar de manera unida por la implementación del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la […]
El pasado lunes 6 de marzo se dieron cita en las instalaciones de la SEDAMA los líderes campesinos de diferentes comunidades y asociaciones de la zona media y alta de Tuluá para establecer compromisos en la idea de trabajar de manera unida por la implementación del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de la Paz Estable y Duradera, así como evaluar asuntos del desarrollo rural en el municipio. De este modo, dirigentes de las veredas y corregimientos como La Coca, Maraveles, Moralia, Venus, La Diadema, La Mansión, San Marcos, Las Mirlas, Monteloro, Santa Elena-baja, San Antonio, Jicaramata, Santa Lucía y Las Vegas en Puerto Frazadas, acordaron dar vida al Proceso de Unidad Campesina de Tuluá como el espacio legítimo para la discusión y toma de decisiones de las comunidades campesinas de la zona media y alta de Tuluá de cara a la implementación del Acuerdo Final.
Este espacio estará compuesto por un delegado o delegada de cada junta de acción comunal y un delegado o delegada por cada organización campesina que haya en el territorio, motivando la participación de las mujeres en el proceso. La toma de decisiones será de manera democrática, priorizando el consenso. Se nombró una comisión política compuesta por Euclides Narváez, vicepresidente de la Vereda Maraveles en San Lorenzo, Diego Gonzales, presidente de la vereda las Vegas en Puerto Frazadas, y Rigoberto Hoyos, presidente de la vereda San Marcos de Monteloro.
La agenda del proceso de unidad campesina será la implementación del acuerdo final para la terminación del conflicto en el municipio, en particular la formulación y ejecución del plan de desarrollo campesino como hoja de ruta de las comunidades para la implementación, la constitución de la Zona de Reserva Campesina de Tuluá como figura territorial que permita que el gobierno nacional priorice al municipio de Tuluá en la implementación, la creación de una figura propia para la seguridad de los territorios campesinos que esté acorde a lo establecido en el punto 3 del acuerdo final sobre las medidas de seguridad en los territorios para la terminación del conflicto, y la gestión de un plan de reparación colectiva para las comunidades víctimas del conflicto a través de la figura de sujeto colectivo de reparación, proceso que ya se solicitó desde el año pasado por iniciativa de la Coordinación Campesina del Valle del Cauca.
Para la dinamización del proceso de implementación del acuerdo final en el municipio se definió realizar una escuela de formación campesina donde se desarrollen los puntos del nuevo acuerdo final el día domingo 19 de marzo del presente en el corregimiento de Moralia desde las 8 am, con la participación de dos delegados por corregimiento (1 hombre y 1 mujer). Así mismo, se propondrá al Consejo Municipal de Desarrollo Rural-CMDR convocar una asamblea extraordinaria e invitar a la Comisión de Seguimiento e Impulso a la Implementación-CSIVI, para que los delegados del gobierno nacional y las FARC EP informen cómo se desarrollará el proceso de implementación en Tuluá.
Por otro lado, se evaluó con preocupación que la inversión en el 2016 de la SEDAMA, tan sólo de 1400 millones de pesos, no se hizo de manera concertada con el CMDR como lo exige la ley, y sus resultados son imperceptibles; por lo que se definió proponer al comité técnico del CMDR convocar una asamblea para que la SEDAMA presente un informe público de su gestión y resultados de los proyectos ejecutados en el 2016.
Finalmente, el Proceso de Unidad Campesina de Tuluá invita a cada JAC y organización campesina en los territorios de la zona media y alta del municipio a que realicen una asamblea para formalizar su pertenencia al Proceso de unidad campesina de Tuluá y nombren en propiedad a sus delegados, de modo que seamos una sola fuerza trabajando unidos por la construcción de la paz con justicia social en Tuluá.
¡Por la paz de la Nación los campesinos exigimos la implementación!