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Los crímenes contra la Humanidad cometidos en Chile no son “falsos crímenes”

No somos «falsos» ni «falsas», los falsos son ellos

Fuentes: Kaos en la Red

Los crímenes contra la Humanidad cometidos en $hile por la Dictadura, la Derecha -UDI, Renovación Nacional, la DC- la CIA y su órgano oficial el golpista diario «El Mercurio», propiedad de Agustín Edwards, actual presidente de la Fundación Paz Ciudadana, no son «falsos crímenes» y su «obra» es horrorosamente verdadera… Cuerpos flotando en los ríos, […]

Los crímenes contra la Humanidad cometidos en $hile por la Dictadura, la Derecha -UDI, Renovación Nacional, la DC- la CIA y su órgano oficial el golpista diario «El Mercurio», propiedad de Agustín Edwards, actual presidente de la Fundación Paz Ciudadana, no son «falsos crímenes» y su «obra» es horrorosamente verdadera…

Cuerpos flotando en los ríos, detenidos desaparecidos lanzados al mar con rieles amarrados a sus cuerpos, prisioneros a los que les quitaron con alicate, los dientes y las uñas, mujeres violadas por hombres, perros y ratas. Guaguas raptadas, abortos a golpes, embarazos por violaciones, vaginas destrozadas… Madres y padres tiritando de miedo ante los ojos de sus niños y niñas en Policía Internacional por miedo a no lograr escapar del infierno. Niños destrozados, pequeños y solitarios en sus cajones de muerte… Millones de mujeres adultas y jóvenes, cientos de muchachos, niños y niñas peleando contra el hambre, confusos ante un horror que nos perseguía en las esquinas con autos sin patente, para violarnos, humillarnos, golpearnos, asesinarnos…

 

¡No somos falsas «sobrevivientes» del Crimen contra la Humanidad que cometieron, desde septiembre del 73, los mismos que hoy festejan a unos cuantos aprovechadores que se hicieron pasar por desaparecidos para no enfrentar sus obligaciones con esposas, hijos e hijas. Tampoco somos «falsas» denunciantes de otro Crimen Contra la Humanidad que se comete hoy contra el pueblo mapuche por parte del Estado $hileno y su gobierno, con el auspicio criminal de los mismos derechistas que propiciaron el golpe: Terratenientes, Pirañas, El Mercurio que miente y encubre… Y es que la dictadura parece haber puesto la semilla del Estado Policial en un país que alguna vez tuvo potencial para ser libre.

EL MERCURIO, EL EJÉRCITO, LA DERECHA: TODOS CÓMPLICES…

Agosto de 1976: había varios sacos en el helicóptero de los criminales de la DINA. En esos sacos había personas torturadas e inyectadas, no se sabe si para adormecerlas o para matarlas.

Marta Ugarte Román, estaba aún viva. El saco se movió y uno de los asesinos se dio cuenta, sacó un cuchillo, abrió el saco, cortó uno de los alambres con que estaba atado un trozo de riel al cuerpo a Marta, y con ese mismo alambre la ahorcó. Luego, tiró unos ocho bultos al vacío. Sin el riel, el cadáver de ella salió a flote en el océano, y el 9 de agosto la encontraron en la playa La Ballena, en la costa de la Quinta Región. Los medios embusteros dijeron: «crimen pasional». En noviembre de 1976, el jefe de la DINA, Manuel Contreras, mentiroso como siempre, declaró ante un juez que Marta Ugarte Román jamás había sido detenida, y otro falso, el ministro del Interior de Pinochet, César Benavides, afirmó lo mismo.

Marta era integrante del Comité Central del PC de la época de Allende. Según la autopsia, antes de morir sufrió una luxo fractura de columna, traumatismo abdominal, fracturas múltiples, ruptura y estallido del hígado y del bazo, luxación de ambos hombros y cadera, y una fractura doble en el
antebrazo derecho… Fue detenida en la calle Conferencia y llevada con el llamado grupo Delfín de la Brigada Lautaro de la DINA al cuartel del Ejército de $hile de la calle Simón Bolívar 8630 (Barrio alto de La Reina, Santiago).

Algunos criminales confesaron -ya en los 90- que en el cuartel se inyectaba cianuro a las y los detenidos para «asegurar su muerte»… pero Marta estaba viva… Es que los falsos siempre mienten.

FALSA DEPORTACIÓN

Mónica Benaroyo Pencu fue decapitada a patadas. La vieron con vida la última vez el 11 de septiembre de 1973. Se sabe que fue detenida por milicos y trasladada a un recinto militar.

La respuesta de la Dictadura a los organismos internacionales fue que había sido deportada a su país porque era uruguaya. En realidad, los milicos que la tomaron presa en Arica, la enterraron viva hasta el cuello y luego patearon su cabeza una y otra vez hasta matarla y decapitarla.

Mónica fue una joven viajera, mestiza de varios tonos, nacida en Rumania, crecida en Uruguay, habitante de Buenos Aires un tiempo y luego de Arica, titulada en Filosofía, que se ganaba la vida como traductora, era militante del Partido Comunista de Uruguay. Su muerte la falsearon los criminales derechistas hasta el año pasado (2008) cuando debido al hallazgo de sus restos momificados en un terreno del Ejército -¡cómo no!- de Arica, la mentira ya no se pudo sostener más y la hermana de Mónica -Fernanda- viajó a $hile a comprobar la noticia y a llorar a su hermana en este país falso de falsa justicia.

FALSO ENFRENTAMIENTO

Jane Vanini nunca se rindió, ni en el país donde había nacido -Brasil- y donde fue militante del grupo Acción Libertadora Nacional (ALN) contra una dictadura de cinco malditos, ni en $hile.

El 6 de diciembre de 1974, en Concepción, agentes del Centro de Inteligencia Regional (C.I.R.E.) -marinos de $hile- intentaron allanar la casa de Jane Vanini, que también era la de Pepe Carrasco -Jane y él eran pareja-. Pepe, miembro del MIR, periodista, había sido detenido el día anterior.

Desde la calle, los inteligentes allanadores le gritaron a Jane que se rindiera y la respuesta de ella fue resistir por más de 3 horas desde dentro con un arma. Jane, es cierto, los enfrentó, pero eso no fue un enfrentamiento, si no la autodefensa de una sola mujer contra un montón de «efectivos» hombres de una compañía entera del Destacamento de Infantería de Marina Nº 3 Aldea de Talcahuano. Al cabo de 3 horas fue herida y sacada de la casa. A ella o a su cuerpo, los criminales de la C.I.R.E., la trasladaron al Campo de Prisioneros en la Base Naval de Talcahuano. Puede haber sido ejecutada allá o puede que ya estuviera muerta. No entregaron su cuerpo, y sólo en 2005 se encontraron sus restos en Concepción. Jane como todas las demás no fue una falsa desaparecida durante 31 años.

FALSOS Y FALSAS…

A Luz Ayress Moreno, la amarraban de pies y brazos y la colgaban cabeza abajo dándoles choques eléctricos en el ano. Los torturadores de Tejas Verdes -Centro de Entrenamiento del Ejército de $hile- le llamaban a eso el «Pavo de Arara». Esta sobreviviente -hoy libre y madre de una hija- fue torturada desnuda y encapuchada por meses, también en presencia de su padre y hermano. Ella también estuvo forzada a ver la tortura de sus familiares, sufrió innumerables violaciones de torturadores con acentos brasileños, argentinos y paraguayos. Fue violada por perros, le colocaban ratas en la vulva y al darle choques de electricidad «las ratas se desesperaban y hundían sus garras» en la vagina de Luz. Le cortaron con cuchillos la piel del vientre, las orejas… Cuando, a pesar de sus 25 años en ese tiempo, le vino un ataque al corazón, ella escuchó cómo una voz $hilena dio instrucciones de qué hacer para que no muriera todavía. Soportó muchas sesiones de torturas en las que ni siquiera la interrogaban, sólo la querían martirizar. Ella en su testimonio dice «no sabía por qué me seguían torturando»… Es que los falsos, los esbirros, los criminales -y todos sus cómplices- son así: gozan con la maldad, son seres miserables y agresores natos: El maldito Contreras, dicen que se «entretenía» sacando los ojos a los cadáveres de los presos, y el infeliz Comandante Pacheco, a cargo del campo de concentración Tres Alamos en ese tiempo, se paseaba «orgulloso» por todo el campo de concentración con Luz o con otra mujer hermosa a su lado, siempre prisioneras aterrorizadas o debilitadas a las que él abusaba…

Los falsos y malditos también rompen sus juramentos de Hipócrates: Luz, vio cómo torturaban a una mujer embarazada que se llamaba Ana María y cómo un «doctor» supervisaba la tortura. Cuando la misma Luz estuvo en la Cárcel de Mujeres y se dio cuenta de que estaba embarazada, un tal «Dr. Mery» -milico de la Universidad Católica- le dijo que ella debía estar orgullosa de tener un «hijo de la patria». A los pocos meses tuvo un aborto espontáneo y jamás recibió atención médica ni en el embarazo ni en la pérdida…

Y nunca faltan las falsas y turbias como ahora la senadora hija de Matthei, tan entusiasmada con los «falsos desaparecidos» -probablemente porque es hija de un miembro de la Junta Militar golpista-. Luego del golpe, otras buenas esclavas, «un grupo de esposas de militares», visitaron a Luz y la chantajearon con libertad a cambio de que silenciara sus declaraciones sobre su embarazo y tortura. Sus maridos milicos las habían enviado porque esta luchadora había logrado romper el cerco informativo del pinochetismo desde la cárcel con la solidaridad internacional y le tenían miedo…

Luz fue parte del ELN de Bolivia en los años 60, fue activista en las poblaciones de Chile donde trabajaba con mujeres, niñas y niños en los 70, fue integrante del MIR luego del golpe, y en agosto del año 2000 planteó que no quiere lástima, si no justicia y para ello declaró ante el Cónsul General de Chile en EE.UU., solicitando que usaran su declaración como evidencia contra Pinochet y su camarilla… Cosa que, ya sabemos, no pasó porque esa promesa de Verdad y Justicia concertada era otra falsedad…

 

LA FALSEDAD DE «LO POSIBLE»…

…»Ha sido un largo y doloroso tiempo en el cual luchamos primero contra una dictadura que negaba los hechos y ante Tribunales de Justicia que -salvo honrosas excepciones- amparaban a los criminales y no a lasvíctimas. Un tiempo en que tuvimos también que lidiar con los extraños «consensos» de la transición que -de tanto en tanto- volvían a pactar la impunidad», dijo Patricia Verdugo -escritora, periodista, defensora de los derechos humanos- a Ricardo Lagos en agosto de 2005, ante la decisión de indultar al asesino de Tucapel Jiménez…

El dedo de Lagos, ese dedo acusador a Pinochet en los 80, en el renovado siglo 21 ni se inmuta y por eso cosecha monedas en pleno rostro en vez de aplausos, cuando sale a la calle a candidatearse para ser el quinto presidente de la falsedad concertada.

«La medida de lo posible» no es sólo una falsedad absoluta, si no que es corrosiva y pudre una memoria que ya huele mal… Pero a la Concertación y sus nuevos socios, les gusta la «realidad posible» porque repleta sus bolsillos aunque les vacíe la dignidad.

Todo lo que han hecho es «posible»… también chato, cruel y doloroso, al estilo de su coalición malparida. Colocaron a un golpista símbolo -Patricio Aylwin- como el paradojal heredero de un presidente respetable y respetuoso. Les vino la renovación compulsiva más escandalosa y nos hablaron de «amnistía impropia», una maniobra que defendía a esbirros y torturadores de la DINA. Con su mismo dedo acusador Lagos firmó para que construyeran cárceles que emulan cabañas de veraneo para torturadores y criminales.

La falsedad de la Concertación se ha hecho cómplice de la UDI para remitir las penas de criminales uniformados mayores de 70 años, como si la vejez les lavara la miseria de adentro a los viejos vinagres. También oculta los nombres y responsabilidades de torturadores, permite que acriminales procesados por crímenes atroces -Freddy Enrique Ruz Bunger, Carlos Arturo Madrid Hayden, Álvaro Julio Federico Corbalán Castilla, Sergio Antonio Díaz López- se les reduzcan las penas de 10 a 3 años de presidio menor, con remisión condicional, libertad vigilada e incluso que algunos sean absueltos en casos de desapariciones y homicidios calificados… Es decir la falsedad concertacionista-derechista es impresentable.

El Mercurio, la Tercera, la Segunda, Las Ultimas Noticias, todos justificaron y alentaron el Crimen contra la Humanidad en $hile desde sus páginas: «Extremistas se matan entre ellos», «terroristas mueren como ratas», «el golpe se justifica porque en Chile hay caos»… Agustín Edwards, dueño de esta prensa nunca ha sido procesado como ejecutor intelectual y/o cómplice, aunque Patricia Verdugo demostró con documentos desclasificados de diversas fuentes norteamericanas, su implicación directa con la CIA en el golpe…

En los años 90, cuando se comenzó a sentir que vivimos en un gran cementerio en cuyos rincones descansan las osamentas de las muertas, los desaparecidos, las torturadas, los falsos comunicadores vieron que los testimonios de las sobrevivientes les traían dividendos porque la gente quería saber y comenzaron a poner reportajes «conmovedores». Ahora, los muy hipócritas volvieron a titulares retro -como salidos de la Dictadura- intentando decir nuevamente que nuestros muertos y muertas son «falsos».

Criminales disfrazados de políticos como Jovino Novoa, Sergio o­nofre Jarpa, el cura Hasbún, Ambrosio Rodríguez, Manfredo Mayol -que trabaja con Lavín-, Carlos Cantero, Antonio Horvath, Baldo Prokurica, José García Ruminot, Sergio Romero, Alberto Cardemil, Sergio Diez que tuvo la desfachatez de negar ante la o­nU en los años 70 a los desaparecidos y desaparecidas, todos ellos -y sus asesinos a sueldo-, tienen información sobre las guaguas que les robaron a por lo menos 9 detenidas desaparecidas embarazadas o sobre los cerca de 400 prisioneras y prisioneros políticos que a partir de 1974, sus helicópteros Puma arrojaron al mar… pero como son unos miserables que dan náuseas, falsearon y falsearán la verdad con la venia concertada de renegados e indignas.

 

Algunas Fuentes:

Archivo Chile de Derechos Humanos

(http://www.archivochile.com/Derechos_humanos/testimo/hhddtestimo0006.pdf

Memoria Viva (www.memoriaviva.org)

«Por qué el «perdón» no es posible en los campos de la muerte…» Patricia Verdugo, 2005

«A Mónica la decapitaron a patadas»,

Amado de Mérici, PiensaChile, 2008

María de la Luz Salas, abogada: «Los Derechos Humanos son intransables», Victoria Aldunate, Puntada con Hilo, 1995.

«Chile: Mujeres detenidas desaparecidas durante la dictadura», Mujereshoy, 2008.

«Detenidas desaparecidas que estaban embarazadas. ¿Dónde están sus hijos?, Punto Final, 2007.

Verónica Reyna, abogada «Creo en la Memoria Histórica», Victoria Aldunate, Puntada Con Hilo, 1995.

«Sola Sierra: Pora la Vida y la Justicia», Victoria Aldunate, Puntada con Hilo, 1996.

«Los Zarpazos del puma», Patricia Verdugo

Presunto vínculo con la Operación Cóndor: Cadáver hallado en Arica es de uruguaya asesinada en 1973, El Mostrador, 25 de Julio de 2008

http://feministautonoma.blogspot.com/