500 trabajadores sindicalizados mantienen una huelga legal hace 15 días
* 500 trabajadores sindicalizados mantienen una huelga legal hace 15 días, y la principal dirigenta de la organización junto a un socio, llevan 5 días en huelga de hambre.
* Hasta el momento, sólo han recibido negativas y represalias por parte de la principal entidad bancaria del Estado chileno.
Después de dos semanas de huelga legal, la Presidenta del Sindicato Nacional Servicios de Cobranza S.A. del Banco Estado, Verónica Guzmán, junto a uno de los socios de la agrupación, el pasado 19 de octubre decidieron comenzar una huelga de hambre ante la insensibilidad y oídos sordos de la gerencia de la empresa bancaria estatal en el actual proceso de Negociación Colectiva que protagonizan más de 500 trabajadores del área. En el marco de una visita solidaria del Directorio Nacional de la Confederación de Sindicatos Bancarios, encabezado por su Presidenta, Andrea Riquelme, tuvimos la oportunidad de conversar con Verónica Guzmán, cuyo rostro ya refleja el cansancio de cinco días sin alimentación.
¿Cuáles han sido los principales hitos de la compleja negociación que enfrentan con el Banco Estado?
«El 20 de agosto comenzamos la Negociación Colectiva. La última se realizó hace tres años. Para aprovechar el fuero legal que corre 10 días antes del inicio de la negociación, nosotros solicitamos unos dictámenes a la Inspección del Trabajo. Aquí pedimos un primer dictamen relacionado con la «simulación» que tenemos con Banco Estado. Asimismo, presentamos en la Inspección una solicitud que tiene que ver con un sueldo más un bono de puesta en marcha que reciben, aproximadamente a tres años, los colegas que trabajan en el área de normalización. Ellos cuentan con un sueldo base de $ 300 mil pesos (600 dólares) más un bono de puesta en marcha de $ 324 mil pesos. Como este bono es parte de su sueldo por ley, hicimos la gestión con el fin de que no fuera a perderse posteriormente. Pues bien, cuando comenzó la negociación, la empresa no reconoció estas platas, y quisieron modificar la renta, con un sueldo base de $ 450 mil pesos, más comisiones.»
¿Qué importancia tiene el resultado de las gestiones efectuadas en la Inspección del Trabajo?
«Lo que ocurre es que estas conquistas salariales estaban consideradas en el pliego de peticiones que presentamos el 20 de agosto. Bajar esta reivindicación, significa disminuir la renta de muchos colegas.»
¿Qué sucedió luego de presentado el petitorio sindical?
«La empresa cambió estructuralmente el sistema de las comisiones de mis colegas que tienen sueldos base más comisión (renta variable) a través de la imposición unilateral de una nueva tabla. Nosotros pedimos un reajuste remuneracional de un 4 % a un 8 %, dependiendo de los salarios de los empleados. La empresa sólo ofrece el IPC. Asimismo, nosotros solicitamos aumentar la base de los salarios a 300 mil pesos. Aquí hay personas que ganan $ 172 mil pesos mensuales, sin bonos ni incentivos. Estos son los puntos críticos en los que estamos chocando fuertemente con la contraparte.»
LA HUELGA
¿En qué circunstancias se vota la huelga?
«El 21 de septiembre se estableció la mesa de negociación. Pero ya el viernes 19, la empresa depositó en la Inspección del Trabajo el mismo pliego que nosotros obtuvimos hace tres años (2004), reajustado según el IPC. Producto de esta mañosa gestión, nosotros realizamos una asamblea que debió votar por la huelga, considerando el documento que ingresó la mandante en la Inspección. Más de un 95 % de los trabajadores se manifestó por la huelga el 27 de septiembre. El lunes siguiente solicitamos los buenos oficios de la Inspección del Trabajo. Sin embargo, no llegamos a acuerdo con la empresa. El 5 de octubre, pedimos la prórroga de los buenos oficios, a lo que se negó el Gerente General y nos dijo que nos fuéramos a la huelga, y no nos quedó alterativa que hacerla efectiva el 8 de octubre.»
Después de iniciada la huelga, ¿Cómo se han desarrollado las conversaciones con el banco?
«El 10 de octubre tuvimos una reunión informal con la empresa -mediante su Gerente General, Carlos Eterovic; el Gerente de Planificación, Manuel Díaz; el Jefe de Personal, Alfredo Morales; y el Sugerente regional- para estudiar los puntos que nos permitieran llegar a la conformidad. Al día siguiente instalamos la mesa formal donde se establecieron todos los aspectos de discordia con la empresa. Allí la Administración nos señaló que la tabla de comisiones que había presentado antes en la Inspección era «inmodificable»; no hay reajuste para los empleados administrativos; no hay incremento real en los sueldos base, y, como si fuera poco, nos informan que nos bajarán el bono de término de negociación y no nos pagarán los días de huelga.»
¿Qué han logrado negociar?
«En los hechos, no hay negociación: sólo existe una imposición de la empresa. Entonces, la asamblea de trabajadores decidió continuar las movilizaciones. Durante el fin de semana ha habido reiteradas llamadas telefónicas a los socios por parte de la gerencia, donde se amenaza con que, de no reintegrarse a las funciones, los trabajadores «difícilmente encontrarán trabajo en otra parte», en una abierta práctica antisindical.»
¿Por qué decidieron iniciar una huelga de hambre?
«Hasta el 22 de octubre, más del 80 % de los trabajadores mantiene la huelga. El viernes 19 de octubre, la empresa nos llamó para ofrecernos un bono correspondiente a la mitad de lo que propuso originalmente, y desconsideró todas las demandas que pusimos en la mesa. De este modo, luego de informarle esta situación a los socios del sindicato, y caracterizando la actitud de la mandante como un trato indigno, yo y un colega decidimos comenzar una huelga de hambre. Esta medida fue una decisión personal producto de la humillación de la que somos objeto por la empresa. La mayoría de los trabajadores en huelga formamos esta empresa hace siete años. La institución ha tenido una conducta completamente insensible ante nuestras medidas. La huelga de hambre que ahora realizamos está más bien dirigida a la conciencia de nuestros colegas, porque no podemos permitir que nos pisoteen.»
¿Cuánto pierde el Banco Estado con la huelga?
«Con el 80 % de los empleados de cobranza en huelga, el banco pierde mucho, porque nosotros normalizamos a los clientes deudores de la empresa a nivel nacional. El banco hoy día no cobra; esa labor la hacemos nosotros.»
¿Cuándo terminarás la huelga de hambre?
«Nosotros comenzamos la huelga de hambre junto con presentarle una carta de rechazo a la propuesta de la empresa. Y respecto del pliego original que presentamos, incluso lo hemos modificado para facilitar un eventual acuerdo. Sin embargo, ni así ha mejorado la actitud de la empresa. El martes 23 de octubre, a las 14:00 hrs., tenemos una mediación. Naturalmente, asistiré, pero no dejaré la huelga de hambre hasta que se firme el Contrato Colectivo. Yo espero, nada más, que en la mediación gobierne la cordura. Los trabajadores no somos números, somos personas. Nosotros somos la empresa, no los gerentes. Y estamos convencidos de que nuestras demandas se ajustan a la realidad del banco. Por eso resulta absolutamente insólito tener que apelar incluso a huelgas de hambre para mantener lo que hemos tenido durante tres años. Si se evalúa fríamente lo que ofrece la empresa no llega ni a un 5,7 % de reajuste. Apenas 6 millones de pesos le cuesta al banco el término de la negociación.»
La respuesta de la empresa ha sido pésima…
«Aquí el 50 % de los trabajadores somos mujeres, y el 70 % de las mujeres son jefas de hogar. Estoy muy decepcionada del banco. Nunca pensé que pondrían guardias y cámaras de vigilancia en las dependencias donde trabajamos, y que el gerente andaría con guardaespaldas, como está ocurriendo. No obstante, los socios del sindicato están con un excelente estado de ánimo y permanecen férreamente unidos. «