Se cumplen once días de paro y persisten los señalamientos y hostigamientos por parte de la Policía y el Ejército Nacional. Se evidencia la falta de voluntad de parte de la administración de Ecopetrol para darle una salida negociada al conflicto social y laboral. Toda la institucionalidad ha tenido o avalado una respuesta militar contra […]
Se cumplen once días de paro y persisten los señalamientos y hostigamientos por parte de la Policía y el Ejército Nacional. Se evidencia la falta de voluntad de parte de la administración de Ecopetrol para darle una salida negociada al conflicto social y laboral. Toda la institucionalidad ha tenido o avalado una respuesta militar contra la comunidad que acude como última instancia al derecho de la protesta social. A continuación nuestro informe en materia de derechos humanos.
Militarización. Se mantiene la presencia policial de efectivos de la estación de La Mata y Aguachica; además constante patrullaje de miembros del BAEEV 3 de Ejercito Nacional, quienes continúan tomando fotografías a quienes protestan pacíficamente e intimidando con sus armas de fuego.
Actos de hostigamientos y difamaciones. El 7 de julio, un sargento de la policía de apellido Pérez se acercó al punto de concentración indicando que se seguía incurriendo en el delito de obstrucción a vías y que si no se dispersaban llamarían de nuevo al ESMAD.
De igual manera, responsabilizó al Equipo Jurídico Pueblos de lo que ocurriera, pues según el agente, es la organización responsable del presunto bloqueo; situación que fue objeto de aclaración por parte de los defensores acompañantes, sin que desistiera el uniformado de su señalamiento.
Este mismo funcionario, manifestó también, que la comunidad estaba deteniendo vehículos para identificar quién se movilizaba en ellos, situación que no es cierta, por el contrario, muchos vecinos del lugar arriban en sus automotores con el propósito de visitar y saludar a las quienes se encuentran en el paro. También indicó que los manifestantes han lanzando piedras u objetos contundentes, a los camiones cisterna que transportan el crudo a la subestación. En ese mismo sentido, uno de los miembros del ejército indicó que la comunidad ha amenazado con quemar los carro-tanques, señalamiento al que han hecho eco miembros del corporativo de seguridad de Ecopetrol.
Tales acusaciones son falsas y generan preocupación en la medida que van orientas a orquestar una judicialización masiva de los participantes del paro contra Ecopetrol.
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