Jorge Huenchullán, Werken (mensajero) de la comunidad Mapuche de Temucuicui, comuna de Ercilla (Región de la Araucanía) fue detenido el 10 de mayo en Collipulli, mientras acompañaba al también Werken de Temucuicui Víctor Queipul Waikil. Este último debía comparecer por una querella interpuesta por el ex director de CONADI Jaime Andrade en su contra de […]
Jorge Huenchullán, Werken (mensajero) de la comunidad Mapuche de Temucuicui, comuna de Ercilla (Región de la Araucanía) fue detenido el 10 de mayo en Collipulli, mientras acompañaba al también Werken de Temucuicui Víctor Queipul Waikil. Este último debía comparecer por una querella interpuesta por el ex director de CONADI Jaime Andrade en su contra de él y de otros comuneros, entre ellos Huenchullán. Ese juicio fue aplazado hace tres semanas porque no llegaron al tribunal ni los abogados de la acusación ni los defensores, un hecho que para los mapuche constituye una colosal falta de respeto.
Sin embargo, en esta oportunidad Jorge Huenchullan se enteró de que debía presentarse a un juicio en su contra que nunca le fue notificado, por lo cual quedó detenido «por rebeldía» en el mismo juzgado de Collipulli.
Ninguno de los dos abogados de la Defensoría Mapuche, Jaime López y Ricardo Cáceres le había avisado acerca de la realización del juicio a principio de semana, quedando imposibilitado de preparar una buena defensa . Para los miembros de la comunidad de Temucuicu, según se informa en http://redchem.entodaspartes.org/spip.php?breve141 ello consituye una nueva falta al debido proceso y una instigación a una condena contra un luchador social mapuche, de manera de aumentar la lista de presos políticos mapuche recluidos en las distintas cárceles del país.
A través de esta web, la comunidad Temucui cui está solicitando que las demás comunidades y organizaciones mapuche «se manifiesten en contra de este ilegal y sedicioso procedimiento».
Indefensión jurídica
Una vez más queda de manifiesto la indefensión jurídica en que se encuentran los luchadores sociales mapuche, hecho que fue resaltado especialmente en el reciente informe elaborado por la Asociación Americana de Juristas.
La Defensoría Pública por lo general es inoperante, ya sea por falta de recursos o por falta de convicción y compromiso o por ambas cosas. Además los tribunales se preocupan poco de notificar oportunamente de sus resoluciones a personas que viven fuera del territorio urbano, en comunidades campesinas. A veces ni siquiera lo hacen en los excepcionales casos en que los mapuche han contado con abogados de Santiago, como le pasó el año 2007 EN ESE MISMO TRIBUNAL al abogado capitalino Lorenzo Morales. El profesional no fue notificado que su defendido, José Cariqueo, de la comunidad José Guiñón, que estaba querellándose contra el gerente de una forestal debía presentarse perentoriamente en una fecha determinada. Por supuesto, a Cariqueo tampoco le avisaron. El juicio – que había llegado al momento en que debía presentar disculpas el gerente -se perdió por ese detalle.
Jaime López y Ricardo Cáceres son los mismos «defensores públicos» que tienen los casos de Roberto Painemil y Héctor Llaitul (presos en Lautaro y Angol respectivamente) y que en todo el año 2007 no pidieron nunca la libertad bajo fianza de sus defendidos y se desentendieron de las denuncias de tortura de Painemil. Para el caso Llaitul/Painemil los Familiares de Presos Políticos Mapuche de la Coordinacora Arauco Malleco CAM, lograron constituir un equipo especial de abogados externos que asesorará a López y Cáceres con el fin de que tengan una defensa de mayor peso. El equipo lo encabeza el abogado de ddhh Juan Enrique Prieto, de la Fundación Laura Rodríguez.
¿Quién logrará algo semejante para la sitiada comunidad de Temucuicui? Sus werkenes, lonko y toda la comunidad son hostigados permanentemente por la policía. Y en verdad, como se ve, no cuentan con una verdadera defensa ni tienen garantizado el debido proceso.