Cerca de 600 neoparamilitares piensa asentarse en Curvaradó para asegurar la tierra a sus «patrones» para lo cuál deben «desterrar a la Comisión de Justicia y Paz y a Marcha Patriótica» «Nuestra misión es asegurar la tierra a los que están en la cárcel» (refiriéndose a los paramilitares) El anunció amenazante lo hicieron anoche en […]
Cerca de 600 neoparamilitares piensa asentarse en Curvaradó para asegurar la tierra a sus «patrones» para lo cuál deben «desterrar a la Comisión de Justicia y Paz y a Marcha Patriótica» «Nuestra misión es asegurar la tierra a los que están en la cárcel» (refiriéndose a los paramilitares)
El anunció amenazante lo hicieron anoche en la comunidad de El Cerrao. Seis armados convocaron a pobladores a una reunión y advirtieron que no venían de paso sino para quedarse.
Igualmente, otro grupo de hombres armados de los paramilitares fue observado en el sitio llamado Isla de los Cocos, ubicado entre el corregimiento de Pavarandó y la Comunidad Llano Rico. Los armados de manera pública afirmaron que iban a reunir a líderes de las comunidades para iniciar su proyecto «recuperar» el territorio, expresaron que quien se opusiera sería asesinado.
De acuerdo con testigos entre los armados se encuentra alias «el chapa», quien trabaja al servicio de los paramilitares como informante y es el encargado de hacer seguimiento a los líderes de la zona.
Esta es la segunda manifestación pública de los armados en menos de un mes en Curvaradó. Semanas atrás una movilidad de hombres armados y vestidos de camuflado se produjo hasta Urada Jiguaminadó y límites con Alto Guayabal.
A 200 metros del caserío de Llano Rico se encuentra una base Militar inconsulta y en esta hacen presencia uniformados adscritos al Batallón de Selva N54.
Entre Llano Rico y Pavarandó es frecuente la circulación de efectivos de la fuerza pública.
Fuente original: http://prensarural.org/spip/spip.php?article18386