Fuerzas paramilitares que operan junto con la Brigada XVII del Ejército colombiano secuestran a un niño de 12 años en San José de Apartado. Posiblemente, el menor Elias Guzman fue secuestrado como venganza, despues de que la guerrilla propinó un duro golpe a las tropas del gobierno en la vecindad
Desde el día 15 de julio de 2004, se encuentra desaparecido el niño de 12 años quien vivía en la vereda Las Nieves. El niño fue llevado por un grupo paramilitar que subió el mismo día a la vereda la Esperanza y que luego se dirigieron hacia la vereda Las Nieves. Este grupo paramilitar venía de Nueva Antioquia en el municipio de Turbo, donde tienen una base.
En la vereda las Nieves los paramilitares sostuvieron combates con la guerrilla desde muy temprano y testigos locales vieron participar helicópteros de la Brigada XVII, según lo que informa la Corporación Jurídica Libertad.
El niño Elias Guzman se encontraba con su padre a las 8 de la mañana recogiendo fríjol en la finca que estaban trabajando, al escuchar los combates, el padre de Elias le pidió al niño que fuera por un caballo para llevar el fríjol que habían recogido y llevárselo para la casa. El niño fue por el caballo y se encontró con el grupo paramilitar y desde ese momento no se sabe de él, el padre sólo encontró tirada la camisa del niño. Este grupo paramilitar luego de los combates se dirigió nuevamente a su base en Nueva Antioquia.
Tres días despues fueron allanadas por miembros del ejército cuatro casas de miembros de la comunidad, las casas se encuentran a 10 minutos del caserío de San José en dirección a la vereda la Unión.
De acuerdo a la Corporación Jurídica Libertad, a las casas entraron 15 miembros del ejército, quienes sin decirle nada a la gente entraron y comenzaron a requisar todo y tirar las cosas al suelo, luego de ello les pidieron los documentos de identificación y anotaron los nombres y los números de sus documentos de identidad.
Al preguntarles las familias que pasaba y que si no tenían orden de allanamiento, simplemente los soldados respondían que ellos podían hacer lo que quisieran sin que nadie se los impidiera y que tenían que acostumbrarse les gustara o no, y que estuvieran tranquilos porque ya tenían un plan bien diseñado para acabar con la comunidad y los líderes.
«Nuevamente estos hechos demuestran las acciones de muerte y agresión contra la población civil, se ve claramente el abuso del poder, la intimidación, la desaparición, el accionar de los grupos paramilitares en complicidad con las Fuerzas Militares, vemos indudablemente que se mantiene sistemáticamente acciones de muerte en contra de la comunidad con el fin de exterminarla, se evidencias los planes contra lideres de la comunidad manifestados por los mismos militares», manifestó la Corporación Jurídica Libertad en una mensaje enviado a ANNCOL.