La película norteamericana GRAVITY (2013) acaba de obtener su reconocimiento, con el «globo de oro al mejor director» para su autor Alfonso Cuarón. El jurado ha visto el trabajo merecedor de este premio pues se trata de una buena película, con un guión trepidante, efectos especiales impensables, y un final de infarto que permite finalmente […]
La película norteamericana GRAVITY (2013) acaba de obtener su reconocimiento, con el «globo de oro al mejor director» para su autor Alfonso Cuarón. El jurado ha visto el trabajo merecedor de este premio pues se trata de una buena película, con un guión trepidante, efectos especiales impensables, y un final de infarto que permite finalmente respirar tranquilo! En concreto, cuando la protagonista Sandra Bullock consigue volver a la Tierra, y levantarse pisando con pie firme sobre la arena. Ella es la única protagonista, aparte de Georges Clooney, su partenaire, que acaba desapareciendo tragado por el espacio.
Pero ¿qué hacen estos dos en el espacio, fuera de la tierra? Son dos científicos o astronautas, encargados del mantenimiento y labores de investigación en uno de los diversos satélites artificiales que las grandes potencias han situado en órbita de la tierra. La vista del planeta es subyugante, y uno queda embelesado por la belleza de las imágenes. Y ellos hacen tranquilamente su trabajo.
Todo iba bien hasta que un incidente fortuito, un accidente tecnológico, desencadena una situación extremadamente angustiante. Los restos de un satélite que ha explotado en otra parte se dirigen hacia la nave e impactan con la mayor violencia hasta casi destruirla. Como resultado de esto, la protagonista es expulsada al espacio y está a punto de perderse a la deriva en la inmensidad de la nada. Claro que finalmente tiene a Georges Clooney que la rescata yéndola a buscar.
Pero esto no ha hecho más que empezar. La cosa empeora y ahora es aquél el que resulta despedido y desparece sin retorno. Y ella, incrédula, se encuentra en una situación increíblemente difícil, sola, lejos de la tierra, atrapada en el espacio en un despojo tecnológico sin saber cómo actuar.
La inspiración, y sobre todo la determinación, van dirigiendo sus actos, y toma decisiones valientes, que le dan una oportunidad. Al final (para abreviar), in extremis, consigue llegar a la Tierra y salvarse!
La historia es buena, hollywoodiense y del gusto de todos. Pero creo que hay otra lectura que puede hacerse, y que está presente en la intención del autor de manera consciente o no.
Repetimos la pregunta: ¿Qué hacen esos dos allí arriba, en el espacio, lejos de la Tierra? Simbolizan la Humanidad, la parte masculina y la femenina, que se encuentra en un estado comprometido a causa de la aventura tecnológica, la cual comporta un enorme peligro.
Ella (una nueva Eva, la Madre de la Humanidad), sufre una situación que nosotros (sus hijos) reconocemos. Sufrimos con ella y deseamos vehementemente que se salve de la única manera posible: volviendo a casa, a nuestra tierra. Por esto uno gritaría desde su asiento: «va, más deprisa, ahora, ahora…, tal vez todavía estamos a tiempo!»
¿Es exagerada esta interpretación? Resulta que este director es responsable también de un film previo de carácter brutalmente apocalíptico titulado CHILDREN OF MEN (2006), donde la humanidad entera se está autodestruyendo. Es una película que presenta un mundo (¿soñado?) arrasado por las guerras, terrorismo nuclear, contaminación sin fin, suicidios en masa…y la esterilidad espontánea de la especie que lleva a su extinción.
Gravity es la versión luminosa y optimista de la anterior pesadilla. Ante la catástrofe y la posible desaparición de la protagonista, triunfa la voluntad y el deseo de supervivencia, y sobre todo la determinación inteligente que la salva. También está la suerte, pero había que intentarlo! Solo así regresa a casa, a la Tierra. ¿No es el la imagen final la de un nuevo comienzo?