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Notas desde el confinamiento

Porvenir de la humanidad

Fuentes: Rebelión

En el seno de las ciudades puede observarse la manera tan diametralmente opuesta en que la pandemia del COVID-19 afecta a los seres humanos, grandes masas de proletarios y sectores oprimidos expuestas por la necesidad de sobrevivir, se ven obligados a pasar por alto la cuarentena decretada por los gobiernos, ya que tal cual, si no ejercen su trabajo, la pandemia mayor que flagela desde siglos atrás a la humanidad hará caer el peso de la realidad y los condenaría al olvido estadístico oficial y a la desmemoria de quienes ocultan con tal de servir a los poderosos, hablamos desde luego, de la pobreza y la explotación, síntomas característicos del capitalismo en el mundo.

Reportes de diferentes rincones del mundo llegan para confirmar lo anterior, industrias y empresas que no han detenido labores ni han garantizado las mínimas condiciones de salud y seguridad para los trabajadores y trabajadoras, la muestran son las maquiladoras que a lo largo de México sobreexplotan a su gusto a los seres humanos sin importarles la pandemia, el riesgo a la vida y las llamados de las autoridades para detener el trabajo o por lo menos realmente dar las condiciones propicias para el cuidado de hombres y mujeres que con su fuerza de trabajo generan la riqueza, todo esto, junto a las ya denunciadas condiciones laborales de siempre, salarios precarios, jornadas de trabaja extremas que sobre pasan las 10 horas o más, falta de derechos sociales, de contrato colectivo de trabajo y de organizaciones sindicales que representen verdaderamente a los proletarios y proletarias expuestas a la pandemia del capitalismo y del coronavirus, los patrones se lavan las manos como acostumbras pero no por cuestiones de sanidad sino porque es su tradición velar por su interés privado condenando a su suerte a miles de obreros y obreras. Ejemplos hay muchos, tan sólo en el transcurso de esta pandemia ya ha sido despedidos de forma injustificada más de 360,000 seres humanos según datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), esta cifra sumada a las condiciones generales de pobreza y desempleo que desde años atrás se arrastran, junto a los despidos que muchos gobiernos realizaron al inicio de sus administraciones como es el caso de Yucatán, dan forma a un panorama trágico para quienes tienen en sus hombros el peso del desarrollo de los países.

La violación flagrante de los derechos laborales quedó al desnudo de forma desmesurada, muchas empresas rápidamente y sin esperar el avance de la pandemia, despidieron a miles de trabajadores y trabajadoras, otras, los enviaron a sus casa sin goce de sueldo y sin ninguna prestación social, otras más, forzaron a continuar con las labores sin ofrecer una sola medida de protección a la salud, razón por la cual, las denuncias se han incrementado en contra del sector patronal y, en el caso de industrias y maquiladoras que obligaron u obligan a sus trabajadores y trabajadoras a continuar con la producción, han registrado en su seno, protestas, paros, suspensiones de labores por parte de los proletarios y proletarias, que ante la grave situación y el riesgo de sus vidas se comienzan a organizar y tomar conciencia de la fuerza y el poder que tienen al ser ellos quienes producen la riqueza de la que son despojados por los patrones, algunos sectores de trabajadores y trabajadoras han logrado victorias iniciales obligando a los patrones a cerrar los centros laborales y pagarles sus salarios completos comprometiéndose a respetar sus derechos, en otros casos, se ha logrado por lo menos, el pago de un porcentaje del salario y el respeto a su trabajo al final de la cuarentena, desafortunadamente, la gran mayoría de quienes fueron despedidos van quedando en la agonía del mar de injusticias y desolación que el panorama pinta para el porvenir inmediato, pues cuando el final de la cuarentena sea decretado, la realidad golpeará con tal fuerza que derrumbará muchos mitos y otras tantas mentiras sobre la realidad latente del país y las condiciones de vida de los trabajadores y trabajadoras. Los propios trabajadores y trabajadoras del sector salud ejercen su profesión en medio de carestías, violaciones a sus derechos, con falta de insumos necesarios y con jornadas extremas, son ellas y ellos quienes luchan por nuestras vidas en estos tiempos y deben contar con todo lo necesario para hacerlo.

El panorama es muy complejo, el futuro de la humanidad peligra por las políticas capitalistas e imperialistas que en este contexto han quedado evidenciadas nuevamente por su inhumanidad, el reto inmediato es garantizar la vidas de todos y todas, las luchas necesarias y venideras están en el marco del respeto y aplicación de los derechos laborales, la organización es indispensable para la planeación de políticas socialistas que beneficien a la humanidad y contribuyan a erradicar la pandemia mayor que por siglos ha oprimido, explotado y llevado a la muerte a miles de seres humanos a lo largo de todo el orbe, poner fin al ya degrado sistema capitalista es y será un acto real de amor y conciencia en favor del porvenir de la humanidad.

Cristóbal León Campos es integrante del Colectivo Disyuntivas